LIBRO XI

LA RUEDA DEL DESTINO

Porque dos toneles están fijos en el suelo del umbral de Zeus;

uno contiene los males y el otro los bienes que nos obsequian.

A quien Zeus, señor del rayo, le da una mezcla,

unas veces se encuentra con algo malo y otras con algo bueno

Pero aquél a quien solo da miserias lo convierte en un paria;

el hambre y la locura lo persiguen cruelmente

hasta los confines de la tierra,

y vaga sin el aprecio de los dioses ni de los mortales.

Homero