La Abeja y el Cuclillo
(La variedad es requisito indispensable en las obras de gusto.)
Saliendo del colmenar,
dijo al Cuclillo la Abeja:
«Calla, porque no me deja
tu ingrata voz trabajar.
«No hay ave tan fastidiosa5
en el cantar como tú:
cucú, cucú, y más cucú,
y siempre una misma cosa.»
—«¿Te cansa mi canto igual?
(el Cuclillo respondió):10
pues a fe que no hallo yo
variedad en tu panal.
«Y pues que del propio modo
fabricas uno que ciento,
si yo nada nuevo invento,15
en ti es viejísimo todo.»
A esto la Abeja replica:
«En obra de utilidad,
la falta de variedad
no es lo que más perjudica;20
«Pero en obra destinada
sólo al gusto y diversión,
si no es varia la invención,
todo lo demás es nada.»