Jamling Tenzing Norgay es el hijo de Tenzing Norgay, que, junto a sir Edmund Hillary, fue el primer hombre que alcanzó la cumbre del monte Everest, o Chomolungma, como lo llamamos en tibetano. En este libro cuenta la historia de su participación en la venturosa ascensión del Everest en 1996. Aunque los tibetanos, en general, no se proponen escalar los picos de las montañas y se contentan con cruzar los pasos que caracterizan los viajes por el Tíbet, Jamling Tenzing Norgay adopta una visión muy tibetana de tal empresa al considerarla un peregrinaje. Se trata de una peregrinación con la que rinde tributo a su afamado y valeroso padre, y que emprende con la visión tradicional tibetana de que estas montañas son moradas de divinidades.
Por supuesto, el peregrinaje se considera a menudo un complemento físico del modo de vida espiritual. Ambos requieren una actitud especial, una preparación cuidadosa, valor para vencer los obstáculos que aparezcan en el camino y cautela ante el peligro. Los miembros de los grupos de escalada adquieren una aguda conciencia de su dependencia de los compañeros y, al mismo tiempo, de su propia responsabilidad hacia ellos.
Felicito a Jamling Tenzing Norgay por su éxito en la ascensión a la montaña más alta del mundo y por haber escrito este libro, que será sin duda fuente de inspiración positiva para muchos lectores.
DALAI LAMA
Diciembre de 2000