ESPADAS[2]

Gram, Durendal, Joyeuse, Excalibur.[3]

Sus viejas guerras andan por el verso,

Que es la única memoria. El universo

Las siembra por el Norte y por el Sur.

En la espada persiste la porfía

De la diestra viril, hoy polvo y nada;

En el hierro o el bronce, la estocada

Que fue sangre de Adán un primer día.

Gestas he enumerado de lejanas

Espadas cuyos hombres dieron muerte

A reyes y a serpientes. Otra suerte

De espadas hay, murales y cercanas.

Déjame, espada, usar contigo el arte;

Yo, que no he merecido manejarte.