Bebe con felicidad lo que te ofrece un hombre noble y lleno de gloria.
¡No se te resista el placer!
Te trajo un vino que se vistió la túnica de oro del crepúsculo, con orla de burbujas,
en un cáliz en el cual no se escancia sino a varones principales e ilustres.
No obró mal al escanciarte por su mano oro fundido en plata sólida.
¡Levántate obsequioso en honor suyo! ¡Bebe por que su recuerdo perdure siempre!…
Poema del Diwan del príncipe Abu Abd al-Malik Marwan,
apodado al-Sarif al-Taliq, o «el Príncipe Amnistiado».
Córdoba, año 978.
L’alba part umet mar atra sol,
poy pasa bigil, mira ciar tenebras…
[El alba trae al sol sobre el mar obscuro,
luego salva las colinas; mira, las tinieblas se aclaran…]
Dístico escrito en el siglo X, en una lengua
que ya no es latín pero no es aún lo que,
más tarde, será el catalán.