En la segunda fase de la terapia, las distinciones más útiles del Meta-modelo son aquellas que identifican los límites del modelo que el cliente está usando para organizar su actual experiencia. Específicamente son:
Cuando el cliente usa Estructuras de Superficie que incluyen un operador modal de posibilidad o necesidad, está literalmente identificando los límites de su modelo. Su comunicación es una representación lingüística directa de la porción de su modelo con opciones inadecuadas, o, más frecuentemente, sin opciones. Nótese que los desafíos que hace el Meta-modelo a los operadores modales son peticiones para que el cliente complete una eliminación de mayor nivel mientras presupone el proceso de modelamiento semánticamente mal-formado de Causa-Efecto. Por ejemplo:
Cliente: No puedo irme de la casa.
Terapeuta: ¿Qué pasaría si te fueras?
o
Terapeuta: ¿Qué te impide irte?
En la primera respuesta, la afirmación del cliente es aceptada como una Causa de algo y se le pide que especifique cuál sería el Efecto de hacer lo que considera imposible. En el segundo caso, la afirmación del cliente es aceptada como un Efecto y se le pide que especifique la Causa de esta supuesta imposibilidad. En ambos casos, la afirmación del cliente es aceptada por el terapeuta como una porción de una relación semánticamente mal-formada de Causa-Efecto (ya sea como X o Y, en la siguiente ecuación):
X causa Y
Y al cliente se le pide que proporcione el material que ha sido eliminado del mapa al pasar de Estructura de Referencia[34] a Estructura Profunda. Así, las pautas e y e-1 ocurren en este siguiente nivel de formación de patrones. En la primera fase, los procesos e y e-1 eran aquellos que ocurrían entre la Estructura Profunda y la Estructura de Superficie; aquí, en la fase 2, los procesos e y e-1 operan entre la Estructura de Referencia y la Estructura Profunda.
La respuesta del cliente a los desafíos del Meta-modelo de los operadores modales será una de las formas de mal-formación semántica. Debido a que el desafío del terapeuta presupone una relación Causa-Efecto semánticamente mal-formada, la respuesta del cliente estará al menos mal formada de esa manera. Además, el cliente puede responder con las otras formas de mal-formación semántica:
Lectura de Mente
Yo sé que mi padre se sentiría mal si me fuera de casa.
Performativo Perdido
Sería malo que me fuera de casa.
El desafío del Meta-modelo a la Lectura de Mente es el desafío v-1 a este nivel de estructura:
Terapeuta: ¿Cómo específicamente sabes que tu padre…?
El desafío del Meta-modelo al performativo perdido es el desafío e-1 en el primer nivel de formación de patrones —una inversión de la eliminación que se aplica entre la Estructura Profunda y la Estructura de Superficie (ya que, de hecho, la representación lingüística de eliminación performativa es un proceso de Estructura Profunda a Estructura de Superficie). Si el cliente responde con una afirmación Causa-Efecto tal como:
El hecho de que mi padre se sienta mal me impide irme de casa.
Entonces es aplicable el desafío habitual del Meta-modelo v-1, solicitando al cliente que especifique el proceso mediante el cual ocurre esta conexión causal.
Más importante, sin embargo, para entender la estrategia global, es el hecho de que las dos formas principales de mal-formación semántica, Causa-Efecto y Lectura de Mente, son las representaciones lingüísticas de las funciones de sinestesia sobre las cuales el cliente, en este momento, no ejerce ningún control. Por lo tanto, la aparición de operadores modales y la aplicación exitosa de los procesos d-1, r-1, v-1 y n-1 en el nivel 1 (entre Estructura Profunda y Estructura de Superficie) y en el nivel 2 (entre Estructura de Referencia y Estructura Profunda) señalan al terapeuta que es el momento para iniciar la tercera fase —seleccionar la técnica para ayudar al cliente en el proceso de cambio.