Nota sobre la numeración de los objetos encontrados en la tumba de Tutankamón

La tumba de Tutankamón produjo 5.398 hallazgos distintos. Howard Carter asignó a cada objeto, o grupo de objetos, un número desde el 1 al 620, con letras usadas para las subdivisiones (de forma atípica, el hallazgo 620 recibió subdivisiones numeradas). Los objetos encontrados fueron numerados tal y como se indica:

Después, a medida que llegaban al Museo de El Cairo, cada objeto recibía un número de museo en el journal d’entrée. Por ejemplo, el primer objeto que se sacó oficialmente de la tumba, un baúl bellamente pintado lleno de ropa de niño, fue el número 21 de Carter, y se convirtió en JE61467.

La inmensa mayoría de los objetos de la tumba de Tutankamón se exhiben actualmente en el Museo de El Cairo. Existe una exposición subsidiaria en el Museo de Luxor, y el material botánico está en el Museo de la Agricultura de El Cairo. Algunos de los sarcófagos de mayor tamaño están almacenados en Luxor. El propio Tutankamón descansa todavía en su tumba del Valle de los Reyes.

Incluso hoy en día, la tumba y su contenido siguen en general sin publicar, aunque algunos expertos han escrito ocasionalmente algún volumen dedicado a componentes individuales y diversos objetos de la tumba, como por ejemplo el calzado, los carros y las cajas de juegos. El Instituto Griffith de la Universidad de Oxford, depositario de los documentos de Carter, ha hecho un gran trabajo para remediar esta deficiencia haciendo públicos online los diarios de Carter y sus meticulosos registros y dibujos, además de los diarios de Arthur Mace, las notas tomadas por Alfred Lucas y las numerosas fotos tomadas también por Harry Burton, en Tutankhamun: Anatomy of an Excavation, http://www.griffith.ox.ac.uk/gri/4tut.html.. Mientras, el exhaustivo Complete Tutankhamen de Nicholas Reeves (1990) proporciona una introducción erudita —pero al mismo tiempo accesible— a la tumba y un detallado análisis de sus contenidos para lectores no especializados. Existen muchas otras obras con el tema de Tutankamón dirigidas a distintos públicos, algunas buenas, otras menos, otras decididamente malas. Lo difícil, para el no experto, es separar el trigo de la paja. Como norma general, es mejor evitar cualquier libro que se refiera al rey como «Tut» y a su esposa como «Anjy» o «Patty» y cualquier libro que incluya la palabra «verdad» en la cubierta.