Antes de que se iniciara la operación tuvimos que trasnochar en una vigilancia cerrada y cuando creíamos estar más que listos para actuar, llegó nuestro jefe que generalmente le hace algunas preguntas al analista, y me dijo:
—¿Entramos o no entramos?
—Creo que deberíamos esperar la oportunidad de la bicicleta —le respondí—, porque parece muy claro que el objetivo va a utilizar ese truco. Ya comprobamos que se la llevaron hasta aquella finca y se encuentra allí.
Sin embargo, el jefe ordenó llamar a los Comandos Antiterroristas, ellos llegaron y se preparó el operativo.