FELIPE (Oficial superior)

Los Mellizos pertenecían a una familia numerosa, criados en un ambiente de narcotráfico en el cual, para esa época el norte del Valle, al occidente de Colombia —un sector históricamente violento—, arrojó a los narcotraficantes más grandes que han existido en el país.

Ellos se iniciaron siendo muy jóvenes porque Víctor Manuel, o sea el segundo Mellizo en esta historia, se fue a probar suerte en Estados Unidos. Inicialmente trabajó en una panadería en Nueva York, Brooklyn, y dejó a su hermano como contacto en Colombia.

Allí se hizo al ambiente del bajo mundo y empezó a recibir pequeños envíos de cocaína que Pablo Arauca le enviaba por correo y fue creciendo en tal forma que llegó a crear unas rutas y unos mecanismos importantes para el tráfico, y eso culminó en grandes exportaciones a bordo de barcos cargados en alta mar con cinco, seis, diez toneladas de cocaína con destino a México, Estados Unidos y Europa.

Los dos fueron hábiles en el manejo de su organización y, ante todo, de su bajo perfil: siempre rechazaron el darse a conocer o en buscar reconocimientos sociales o políticos.

Víctor Manuel, el segundo, es una persona pausada, menos calculador, tal vez más sociable. En cambio Miguel Ángel, o sea Pablo Arauca, se caracteriza por ser el más inclinado al ajuste de cuentas.