2.

Entonces encontraron un cuerpo flotando en el lago, boca arriba, con el ojo derecho, el único que le quedaba, abierto y sin signos de aparente agresión humana. El volumen corporal, debido al agua ingerida, a los agentes químicos en suspensión que abarrotaban el lago y a la diferente fauna y flora que había tomado forma en los intestinos y otros conductos internos del fallecido, se había multiplicado casi por 2. Cuerpo-esponja. Saco de infusión. Cuando estamos vivos absorbemos pasado y aire; cuando morimos, química y organismos, procreación, tiempo futuro, aunque ese futuro ya de nada valga. Y no hay más. Desde la azotea se ven las partes traseras de los coches que bajan la avenida de única dirección que enfila al astillero en el borde del mar. Ninguno puede ni podrá remontarla.