¿Cuándo puede comenzar nuestra felicidad? Cuando tengamos la certeza de que la verdad no puede existir. Todas las modalidades de salvación son posibles a partir de entonces, incluso la salvación gracias a la nada. A quien no cree en la imposibilidad de la verdad, o que no se regocija de ella, sólo le queda un camino de salvación, el cual, por lo demás, nunca encontrará.