[1] Ved referencia histórica XII. Heraldo disfrazado. (N. del a.) <<
[2] No necesitamos decir que todo lo que sigue es imaginario. (N. del a.) <<
[3] Ved Ensayo sobre lo pintoresco, de Price, en particular la bella y poética descripción que, hace de sus propios sentimientos al ver destruir, por la voluntad de un innovador, un antiguo jardín secuestrado, con sus setos de tejos, sus adornadas puertas de hierro y florestas. (N. del a.) <<
[4] Se refería a la obra de W. Scott, The Bride of Lammermor. (N. del t.) <<
[5] El verso de Shakespeare es: Chewing the cud of sweet and bitter fancy, reflexionando con dulce y amarga fantasía. (N. del t.) <<
[6] Esta editio princeps, que, en buen estado de conservación, es muy buscada por los entendidos, se titula Les Cent Nouveles, contenant Cent Histoires Nouveaux, qui sont moult plaisans à raconter en toutes bonnes compagnies par maniere de joyeuxeté. Paris, Antoine Verard. Sans date d’anée d’impression, in folio gotique. Ved a De Bure. (N. del a.) <<
[7] Cada vocación tenía en la Edad Media su santo protector. La caza, con sus azares y andanzas, que a tantos ocupaba y que a todos divertía, estaba bajo la protección de San Humberto.
Este santo de los bosques fue hijo de Beltrán, duque de Aquitania, y mientras estuvo en el estado secular fue cortesano del rey Pepino. Era muy aficionado a la caza, y acostumbraba a descuidar sus deberes religiosos por esta diversión. Una vez que estaba ocupado en este pasatiempo se le apareció un ciervo con un crucifijo sujeto entre los cuernos Y oyó una voz que le amenazaba con el castigo eterno si no se arrepentía de sus pecados. Se retiró del mundo y se hizo fraile, retirándose también al claustro su esposa. Humberto llegó a ser después obispo de Maastricht y Lieja, y por su celo en destruir los restos de la idolatría se le llamó apóstol de las Ardenas y de Brabante. A los que descienden de su estirpe se les atribuye el poder de curar a personas mordidas por perros rabiosos. (N. del a.) <<
[8] A veces se le daba ese nombre al gran árbol enfrente de un castillo escocés. Es difícil saber su origen; pero a esa distancia del castillo el lord recibía a los huéspedes de rango y hasta allí los acompañaba cuando se marchaban. (N. del a.) <<
[9] Éste fue Adolfo, hijo de Arnoldo y Catalina de Borbón. La presente historia tiene poco que ver con él, aunque es uno de los caracteres más atroces de su época. Hizo la guerra a su padre, en cuya lucha, tan poco natural, hizo prisionero al pobre viejo, y empleó con él la violencia más brutal, llegando, según se cuenta, a alzarle la mano. Arnoldo, resentido de este trato, desheredó al inhumano vástago y vendió a Carlos de Borgoña cuantos derechos tenía sobre el ducado de Gueldres y condado de Zutphen. María de Borgoña, hija de Carlos, devolvió estos derechos al desnaturalizado Adolfo, que fue asesinado en 1477. (N. del a.) <<
[10] Esta parte del reinado de Luis XI fue muy perturbada por las intrigas del condestable Saint Paul, que se declaró independiente, y mantuvo intrigas con Inglaterra, Francia y Borgoña al mismo tiempo. Según la suerte corriente en políticos de esa clase, el condestable acabó por atraerse la animosidad de todos los poderosos vecinos a quienes sucesivamente había entretenido y engañado. Fue entregado por el duque de Borgoña al rey de Francia, juzgado y ejecutado precipitadamente por traidor en 1475. (N. del a.) <<
[11] Fue por apoderarse de esta población de San Quintín por lo que el condestable fue capaz de realizar esas intrigas políticas que acabaron por costarle tan caro. (N. del a.) <<
[12] Entre las cualidades del desagradable temperamento de Luis, y no una de las mejores, figuraba su gran desprecio por la inteligencia y carácter del bello sexo. (N. del a.) <<
[13] Se refiere a los zancos que se usan en Escocia para pasar los ríos. Son empleados por los campesinos del país próximo a Burdeos para atravesar esos desiertos de arena suelta llamados landas. (N. del a.) <<
[14] Esta leyenda está grabada en una daga que perteneció a una persona que tuvo muchas razones para escoger dicha leyenda. Se la dejó a mi padre, y está ligada a una serie de aventuras extrañas que algún día quizá sean contadas. El arma está ahora en poder mío. (N. del a.) <<
[15] Cuchillo negro, especie de cuchillo recto que no se dobla, como la navaja, antiguamente muy usado por los montañeses, que rara vez viajaban sin arma tan fea, ahora poco usada. (N. del a.) <<
[16] Me enteré por la Chronique de Jean de Troyes, aunque demasiado tarde para hacer uso de la información, que uno de estos dos verdugos podía haberse llamado, con más propiedad, Petit Jean, que Petit André. Éste era el nombre del hijo de Henri de Cousin, maestro verdugo del Alto Tribunal de Justicia. El condestable Saint Paul fue ejecutado por él con tal destreza, que al cercenar la cabeza de un golpe, ésta cayó al suelo al mismo tiempo que el cuerpo. Esto ocurrió en 1475. (N. del a.) <<
[17] Véase referencia histórica I. Gitanos o bohemios. (N. del a.) <<
[18] Ved referencia histórica I sobre los gitanos o bohemios. (N. del a.) <<
[19] Flor de lis. Referencia a Francia a través de su blasón. (N. del t.) <<
[20] Tales disputas entre los escoceses de la Guardia del rey y las otras autoridades de los demás cuerpos militares ocurrían a menudo. En 1474 dos escoceses estaban complicados en un robo de importante cantidad de dinero al pescadero Juan Pensart. Fueron presos por el preboste Felipe de Four con algunos de sus compañeros. Pero antes de poder encerrar a uno de ellos, llamado Mortimer, en la prisión de Chastellet fueron atacados por dos arqueros de la Guardia escocesa del rey, que rescataron al prisionero. —Ved Chronique de Jean de Troyes de dicho año de 1474. (N. del a.) <<
[21] En ambas batallas los auxiliares escoceses de Francia se distinguieron a las órdenes de Stewart, conde de Buchan. En Beaugé fueron victoriosos, matando al duque de Clarence, hermano de Enrique V, y destruyendo su ejército. En Vernoil fueron derrotados y casi aniquilados. (N. del a.) <<
[22] «Cortar un cuento con un trago», expresión usada en Inglaterra cuando un hombre habla con la copa al lado. (N. del a.) <<
[23] El apodo de Oliver era Le Diable, que se lo puso el odio popular, en vez de Le Daim o Le Dain. Fue primeramente barbero del rey, y luego un consejero favorito. (N. del a.) <<
[24] Tradicional pendón de guerra de los reyes de Francia y clásico grito de guerra francés. (N. del t.) <<
[25] El doctor Dryadust hace aquí la observación que los naipes, que se suponen inventados en el anterior reinado para divertir a Carlos V en los períodos de su enfermedad mental, debieron de popularizarse rápidamente entre los cortesanos, ya que proporcionaron a Luis XI el uso de una metáfora. El mismo proverbio fue citado por Durandarte en la cueva encantada de Montesinos. El pretendido origen de la invención de las cartas produjo una de las respuestas más agudas que conozco. Fue hecha por el difunto doctor Gregorio de Edimburgo a un consejero eminente del foro escocés. La prueba del doctor tendía a demostrar la locura de la parte cuya capacidad mental se discutía. En un interrogatorio celebrado estuvo conforme en que la persona en cuestión jugaba admirablemente al whist. «¿Y dice usted en serio, doctor —dijo el erudito consejero—, que una persona que tiene una disposición especial para juego tan difícil, y que requiere en grado preeminente memoria, juicio y cálculo, puede al mismo tiempo estar trastornada?». «No soy jugador de cartas —dijo el doctor con gran habilidad—; pero he leído en la historia que las cartas se inventaron para la diversión de un rey loco». La consecuencia de esta respuesta fue decisiva. (N. del a.) <<
[26] Secreto de confesión. (N. del t.) <<
[27] Al decir esto el rey, indicó el verdadero fin por lo que apremiaba ese casamiento con tal severidad tiránica, que era el de que la rama de Orleáns, que era la primera con derecho de sucesión a la corona, pudiese resultar, por falta de herederos, debilitada o extinguida, ya que la deformidad personal de la princesa hacía presumir que no llegaría a ser madre. En una carta al conde de Dammarten, Luis, hablando de la boda de su hija, dice: «Qu’ils n’auroient pas beaucoup d’ambarras a nourrir les enfants que naitroient de leur union; mais cependant elle aura bien, quelque chose qu’on en puisse dire». Wraxall, Historia de Francia, vol. I, pág. 143 nota. (N. del a.) <<
[28] Una persona amiga me ha indicado que me he equivocado al afirmar que el cardenal era mal jinete. Si así fuese, debo una reparación a su memoria, pues hay pocos hombres que hasta en edad avanzada hayan amado ese ejercicio más que yo. Pero el cardenal puede haber sido un jinete como muchos, aunque presumía de poder competir con los más expertos en los peligros de la caza. Era un hombre resuelto y aficionado a la ostentación, como lo demostró en el sitio de París de 1465, en donde, en contra de la costumbre y usos de la guerra, hizo guardia durante una noche con sonido desusado de clarines, trompetas y otros instrumentos. Al atribuir al cardenal falta de práctica como jinete, recuerdo su aventura en París cuando fue atacado por unos asesinos, en cuya ocasión su mula, espantada de la gente, huyó con el jinete, y tomando el camino de un monasterio, a cuya abadía había anteriormente pertenecido, proporcionó el medio de salvar la vida a su amo. —Ved Crónica, de Juan de Croye. (N. del a.) <<
[29] Carlomagno, sin duda por su generoso rigor con los sajones y otros herejes, gozó fama de santo en aquellos tiempos remotos; y Luis XI, como uno de sus sucesores, honró su altar de un modo especial. (N. del a.) <<
[30] Adelante, Escocia. (N. del a.) <<
[31] Durante su residencia en Borgoña, en época de su padre, Genappes era la residencia habitual de Luis. En la novela se alude con frecuencia a este período del destierro. (N. del a.) <<
[32] Semejante al refrán Mejor buena comida que capa fina. (N. del t.) <<
[33] Auxerre es la bebida de los reyes. (N. del t.) <<
[34] La índole de los chistes groseros de Luis XI puede adivinarse por aquéllos que han leído las Cent Nouvelles, que son de mayor calibre que la mayoría de las colecciones similares de la época. (N. del a.) <<
[35] Tercer estado. Comunes de Francia, que lograron mayor opulencia e importancia bajo el reinado de este sagaz príncipe. (N. del t.) <<
[36] El marqués de Hautlieu es el nombre de un personaje imaginario en cuya biblioteca Scott declara haber encontrado las memorias que son la base de esta novela. (N. del e.) <<
[37] La Crónica escandalosa es un relato del reinado de Luis XI erróneamente atribuida a un imaginario Jean de Troyes y que probablemente fue escrita por el abogado Jean de Roye. (N. del t.) <<
[38] ¡San Julián escucha nuestras oraciones! ¡Ruega por nosotros! (N. del t.) <<
[39] Referente a cosas desconocidas para la generalidad de las personas. (N. del a.) <<
[40] ¡Santo Huberto, San Julián, San Martin, Santa Rosalía, todos los santos que me escuchan orad por mí, pecador! (N. del t.) <<
[41] Véase referencia histórica II Galeotti. (N. del a.) <<
[42] Antiguamente un príncipe renano. (N. del t.) <<
[43] Quien ocupó una de estas mazmorras por más de once años. (N. del a.) <<
[44] Variedad de tropas a quienes los venecianos de aquella época reclutaban en las provincias en la parte oriental de su golfo. (N. del t.) <<
[45] Véase referencia histórica III. Religión de los gitanos. (N. del a.) <<
[46] Agentes o policías a caballo. (N. del t.) <<
[47] Incluso en el dormitorio. (N. del t.) <<
[48] Una historia similar se contó del duque de Vendome, quien contestó en esta especie de latín macarrónico a las reconvenciones clásicas de un convento alemán contra la imposición de una contribución. (N. del a.) <<
[49] Lansquenete, nombre que designa a mercenarios alemanes que operaron durante los siglos XV y XVII. (N. del t.) <<
Vox quoque Mœrin
Jam fugit ipsa, lupi Mœrin videre priores.
Virgilio, IX, égloga.
Los comentadores añaden, al explicar este pasaje, la opinión de Plinio: «El ser contemplado por un lobo en Italia es un hecho nefasto y se supone que deja mudo a un hombre, si estos animales lo ven antes que él a ellos». (N. del a.) <<
[51] La aventura de Quintín en Lieja no debe ser tomada como exagerada, ya que es extraordinario lo que las circunstancias pueden influir en la imaginación de un pueblo en momentos de duda o incertidumbre. Muchos lectores recordarán que cuando los holandeses estaban a punto de rebelarse contra el yugo francés, su ansia de liberación recibió un fuerte impulso al desembarcar una persona con uniforme de voluntario inglés, cuya presencia, a pesar de ser un individuo ajeno a todo, fue recibida como una garantía de socorro que enviaba Inglaterra. (N. del a.) <<
[52] Dieron esta batalla los sublevados de Lieja contra el duque de Borgoña, Carlos el Temerario, cuando era conde de Charolais, y en ella fue derrotada la gente de Lieja con gran mortandad. (N. del a.) <<
[53] Véase referencia histórica IV. Asesinato del obispo de Lieja. (N. del a.) <<
[54] Véase referencia histórica V. Schwarzreiters. (N. del a.) <<
[55] ¡No, no!; eso no puede ser. (N. del a.) <<
[56] Cabo que tiene a su cargo la distribución de suministros de determinadas unidades, así como el nombramiento del personal destinado al servicio de la tropa correspondiente (N. del t.) <<
[57] ¡Arriba, arriba señores!, ¡en marcha! (N. del t.) <<
[58] Aunque situada en una frontera expuesta y aguerrida, nunca fue tomada por un enemigo, sino que conservó el orgulloso nombre de Peronne la Pucelle hasta que el duque de Wellington, gran destructor de esa clase de reputaciones, tomó a plaza en su memorable avance sobre París en 1815. (N. del a.) <<
[59] D’Hymbercourt, o Imbercourt, fue llevado a la muerte por los habitantes de Gante con el canciller de Borgoña, en el año 1477. María de Borgoña, hija de Carlos el Temerario, apareció enlutada en el mercado, y con lágrimas rogó por la vida de sus servidores a los vasallos rebelados, pero fue en vano. (N. del a.) <<
[60] Véase referencia histórica VI. Felipe des Comines. (N. del a.) <<
[61] Véase referencia histórica VII. Entrevista de Luis y Carlos después de la batalla de Montlhéry. (N. del a.) <<
[62] El bufón de Carlos de Borgoña, del que más adelante se habla. (N. del a.) <<
[63] La llegada de tres hermanos, príncipes de las Casas de Saboya; de monseñor de Lau, a quien el rey había mantenido largo tiempo en prisión; de sir Poncet de Rivière, y del Señor de Urfé —escritor de novelas de estilo peculiar—, portadores todos estos nobles del emblema de Borgoña, a saber: la cruz de San Andrés, inspiró a Luis tales sospechas, que con muy poco tacto político pidió ser alojado en el antiguo castillo de Peronne, haciéndose él mismo un cautivo sin escape. —Ved Memorias del año 1468, por Comines. (N. del a.) <<
[64] Este gesto, muy indicador de un carácter fiero, es también, por tradición de escena, característico de Ricardo III, de Shakespeare. (N. del a.) <<
[65] Así fue llamado un conde de Douglas. (N. del a.) <<
[66] La famosa aparición, a veces llamada le Grand Veneur. Sully da algunos detalles de este espectro de las cacerías. (N. del a.) <<
[67] Véase referencia histórica VIII. Exigencias de Carlos. (N. del a.) <<
[68] Luis mantuvo su promesa de venganza con el cardenal La Balue, a quien siempre censuró como habiéndole traicionado con Borgoña. Después que regresó a su reino, ordenó que su último favorito fuese encerrado en una de las jaulas de hierro en Loches. Éstas estaban construidas con horrible ingeniosidad, de modo que una persona de estatura media no podía ni ponerse de pie del todo, ni tenderse a lo largo del todo. Algunos atribuyen este terrible invento al propio Balue. De todos modos, estuvo confinado en uno de estos calabozos durante once años, sin que Luis permitiese le libertasen hasta su última enfermedad. (N. del a.) <<
[69] Véase referencia histórica IX. Plegaria de Luis XI. (N. del a.) <<
[70] El fin corona la obra (N. del t.) <<
[71] Varillas, en la historia de Luis XI, hace la observación de ser a veces tan precipitado su capitán preboste para las ejecuciones, que llegó a sacrificar a otra persona distinta de la indicada por el rey. Esto siempre traía consigo una doble ejecución, pues la cólera o venganza de Luis nunca se veía satisfecha con un castigo equivocado. (N. del a.) <<
[72] El autor ha tratado de atribuir al odioso Tristán l’Hermite una especie de fidelidad brutal a Luis, análoga al apego de un perro dogo a su amo. Con todo su execrable carácter, fue ciertamente un hombre de valor, y en su juventud fue promovido caballero en la brecha de Fronsac, con otro gran número de jóvenes nobles, por mano de Dunois el mayor, el célebre héroe del reinado de Carlos V. (N. del a.) <<
[73] Véase referencia histórica X. Martins Galeotti. (N. del a.) <<
[74] La anécdota está referida de otro modo, y probablemente con menos exactitud, en las Memorias francesas de la época, que afirman que Comines, con una presunción incompatible con su excelente buen sentido, pidió a Carlos de Borgoña que le sacase las botas, sin haber sido tratado antes con ninguna familiaridad para tomarse semejante libertad. He tratado de dar a la anécdota un giro más en armonía con el sentido y prudencia del gran autor mencionado. (N. del a.) <<
[75] Cosa variable y cambiante. (N. del t.) <<
[76] Véase referencia histórica XI. Felipe Des Comines. (N. del a.) <<
[77] Fiero como un escoces. (N. del t.) <<
[78] Un Persevante es un oficial de armas de menor rango. Un oficial de armas es el encargado de los asuntos relacionados con la heráldica, los registros genealógicos y las ceremonias de estado. Tradicionalmente existen tres grados que son: rey de armas, heraldo y el comentado persevante. (N. del t.) <<
[79] La enfiteusis es un derecho real que supone la cesión del dominio útil de un terreno o un inmueble a cambio de un canon anual. <<
[80] Véase referencia histórica XII, Heraldo disfrazado. (N. del a.) <<
[81] El conceder la mano de una heredera, como consecuencia del resultado de un combate, no es probable que ocurriese con tanta frecuencia en el siglo XIV, como cuando las leyes de caballería se llevaban con más rigor. Sin embargo, no es improbable que ocurriese en época de príncipe tan absoluto como el duque Carlos, en las circunstancias expuestas. (N. del a.) <<
[82] Casi no es necesario aclarar que el matrimonio de Guillermo de la Marck con lady Hameline es tan apócrifo como la misma dama. La esposa verdadera del Jabalí Salvaje de las Ardenas fue Juana d’Arschel, baronesa de Scoonhoven. (N. del a.) <<
[83] Véase referencia histórica XIII. Ataque de Lieja. (N. del a.) <<
[84] Una expresión en argot escocés para designar la muerte. (N. del a.) <<
[85] Ya hemos llamado la atención sobre el anacronismo relativo a los crímenes cometidos por este terrible barón, y no es necesario repetir que, si en realidad asesinó al obispo de Lieja en 1482, el conde de La Marck no pudo ser muerto en la defensa de Lieja cuatro años antes. En realidad, el Jabalí Salvaje de las Ardenas, como de ordinario se le llamaba, era de buena estirpe, siendo el tercer hijo de Juan I, conde de La Marck y Aremberg, y progenitor de la rama llamada barones de Lumain. No escapó al castigo que merecían sus atrocidades, aunque no tuvo lugar en la época o de la manera narrada en el texto. Maximiliano, emperador de Austria, le mandó detener en Utrecht, donde fue decapitado en 1485, tres años después de la muerte del obispo de Lieja. (N. del a.) <<
[86] Antigua rima, por la que los Lesies justifican su descendencia de un antiguo caballero, del que se dice mató a un gigantesco campeón húngaro, y formó un nombre adecuado para él con un juego de palabras sobre el sitio en que derrotó a su adversario. (N. del a.) <<
[87] Hidalgo, noble sin fortuna. (N. del t.) <<
[88] Referencia a una composición de 1799 del poeta inglés Samuel Taylor Coleridge. (N. del t.) <<
[89] Celebrar un banquete de bodas. (N. del t.) <<
E come à ritornare in sua contrada
Trovasse e buon naviglio e miglior tempo
E dell’ India a Medor desse lo scettro
Forse altri cantera con milior plettro.
Orlando Furioso, canto XXX, stanza 16. (N. del a.)
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