EL WILDER KÁISER (AUSTRIA)

16 DE MARZO DE 1939.

Oyó el viento mientras caía. Vio el rostro negro de la montaña volverse cada vez más borroso. Pensó en Elise, sentada junto a él en Montségur. Le daba un suave beso en la mejilla y le decía que quería recordarlo como estaba en aquel preciso instante, los dos por encima del mundo, descansando durante unos momentos entre aquellos bellos fantasmas.