En la creciente tormenta, jinetes del viento,

cabalgamos hacia el fragor de los truenos.

Entre cegadores relámpagos danzamos,

y en dos al mundo desmembramos.

Fragmento de un poema anónimo supuestamente

escrito al final de la Era anterior,

llamada por algunos la Tercera Era.

A veces atribuido al Dragón Renacido.