Uno de los vehículos empleados por los marines en sus asaltos anfibios era el LVT, por las siglas de Landing Vehicle Tractor. El LVT fue ampliamente utilizado en los desembarcos en las islas del Pacífico, pero era especialmente útil en las que presentaban corales y arrecifes en las orillas, lo que dificultaba el empleo de los demás vehículos. La razón de esta versatilidad era que el LVT podía superar fácilmente estos obstáculos, a diferencia de los demás.
El apodo del LVT era Alligator (Cocodrilo); este nombre, al igual que en el caso del Jeep, tiene un origen confuso. Unos aseguran que su aspecto recuerda a uno de esos animales —algo innegable para cualquier observador con un mínimo de imaginación—, mientras que otros creen que remite a su origen, puesto que había sido diseñado originalmente para efectuar labores de rescate en las zonas pantanosas de Florida, en donde abundan estos temidos saurios. Las características de ese terreno habían inspirado a un mecánico, Donald Roebing, a crear ese vehículo, capaz de desplazarse por el agua, penetrar a través de tupidos cañaverales y trepar por pequeñas colinas.
El vehículo anfibio LVT, conocido como Cocodrilo, fue muy útil a los marines norteamericanos en sus desembarcos en las islas ocupadas por los japoneses.
Una vez que Estados Unidos entró en guerra, los marines tuvieron conocimiento de la existencia de este vehículo y propusieron su producción en serie. Finalmente, el Alligator trasladó su campo de actuación de Florida a las islas del Pacífico, cumpliendo con creces su cometido.