Capítulo III
La guerra en el aire
La Segunda Guerra Mundial fue el primer conflicto en el cual la aviación tuvo una intervención destacada. Desde el reñido enfrentamiento entre la Luftwaffe y la RAF en los cielos de Inglaterra a la despiadada campaña de bombardeos sobre las ciudades germanas, pasando por el alevoso ataque aéreo de los japoneses a la base de Pearl Harbor, los aviones de uno y otro bando se convirtieron en grandes protagonistas de la contienda.
Pese a que se cumplió el axioma de que la aviación no es capaz de ganar una guerra por sí misma, no es menos cierto que el control del espacio aéreo fue determinante para el éxito de las operaciones en tierra. Los alemanes tuvieron en sus aparatos la clave para el éxito de la guerra relámpago, mientras que los Aliados lograron culminar con éxito el Día-D gracias, en buena parte, a su apabullante dominio aéreo.
Aquí conoceremos de cerca a esos aparatos que extendían el poderío militar en el cielo y a los valerosos hombres que los tripulaban, así como las apasionantes historias que forjaron unidos, y que ahora podemos admirar.