MICHAEL SWANWICK. Vive en Filadelfia con su mujer Marianne Porter y su hijo Sean.

Por ello, no es extraño que el grave accidente nuclear ocurrido en Harrisburg, en la denominada Isla de las Tres Millas, los días 28 y 29 de marzo de 1979, le afectara muy de cerca y muy profundamente. Swanwick, que pertenece a las más recientes hornadas de jóvenes escritores norteamericanos que creen que la ciencia ficción debe ocuparse también de las inquietudes del mundo contemporáneo, ha visto sus relatos publicados en las revistas y antologías más prestigiosas de los Estados Unidos, entre ellas Omni, Penthouse, Universe, New Dimensions, y sobre todo el famoso Isaac Asimov’s Magazine, verdadera forja de las nuevas generaciones de grandes talentos. El origen de En la Deriva se halla en «El beso del Mimo», que Swanwick publicó como relato (en una forma más abreviada) en el número 11 de las antologías Universe de Terry Carr.

El último capítulo de la novela, La muerte de la médula, apareció también como un relato en el número de mediados de diciembre de 1984 del Isaac Asimov’s, y quedó finalista en los premios Nébula de aquel año. De ahí a enlazar ambos relatos como principio y final de una novela sólo había un paso, y Swanwick lo dio inmediatamente. El resultado es una obra inolvidable, que no sólo nos habla del peligro nuclear, sino también de los terribles efectos que puede tener un desastre de enorme magnitud en el seno de una gran potencia que basa toda su fuerza en la tecnología, y de las sorprendentes formas que puede tomar el poder en un mundo radicalmente transformado con respecto al que conocemos.