Algo habrás hecho tú
Consecuencias en la infancia:
—Mamá, me han castigado en el colegio porque dicen que he copiado, y yo no era.
—Algo habrás hecho tú.
—Mamá, un señor me ha robado la pelota en la calle.
—Algo habrás hecho tú.
—Mamá, Pablito me ha roto las palas de un balonazo.
—Algo habrás hecho tú.
—Mamá, que dice la señorita Charo que estoy castigada por escaparme del grupo en la excursión del martes.
—Algo habrás hecho tú.
—Mamá, ¡pero si yo no fui a la excursión!
—A mí no me rechistes, nena. Me vas a matar de un disgusto. Un día me matas de un disgusto.
Me pasé la infancia sintiendo que era yo contra todo el mundo.
Consecuencias en la adolescencia:
—Mamá, Pablo ha roto conmigo.
—Algo habrás hecho tú.
—Mamá, pero si se ha liado con Martita.
—Algo habrás hecho tú.
—Pues le he partido las palas.
—Me vas a matar de un disgusto. Un día me matas de un disgusto.
Después de una infancia de «sola contra el mundo», había aprendido a defenderme.
Consecuencias en la treintena:
—Mamá, han hecho un ERE en mi empresa y nos echan a noventa a la calle.
—Algo habrás hecho tú.
Cada vez que pasa algo en 20 kilómetros a la redonda: una inundación, un terremoto, una riada, un accidente, una crisis económica mundial, me pregunto: «¿Habré sido yo?»
Excepciones para utilizar esta frase con mis futuros hijos:
Es fácil. Cuando hayan hecho algo. No cuando me lo imagine, lo crea, lo intuya, me lo invente, lo necesite o esté casi segura. No, no. Sólo cuando realmente hayan hecho algo mal.
Versiones:
«No lo olvidaré en mi vida. Llego con 8 años indignada a mi casa, preparando mi intervención ante el defensor del menor, y pienso: esa monja se va a cagar. “Mamá, la hermana María me ha pegado dos veces con el borrador en la cabeza. Tienes que hacer algo.” ¿Su respuesta? “Qué raro que no le haya hecho falta una tercera.” Entonces lloraba, ahora no paro de reírme. No sé si es porque no he tenido otra o porque me he acostumbrado, pero, a día de hoy, no la cambiaba.» Valentina, mi amiga Cristina
La opinión del experto:
No conviene reprender a un niño «cuando exista una duda considerable sobre quién ha hecho qué a quién. Casi todos los niños pequeños son bastante transparentes, y enseguida sabrás cuál ha sido la parte culpable en una disputa sucedida en tu ausencia. Pero si castigas a un niño repetidas veces por algo que no ha hecho tendrá todo el derecho del mundo a sentirse perseguido y empezará a mentir». Jo Frost. (Supernanny. Consejos prácticos y sensatos para educar a tus hijos.)
Repito: TODO EL DERECHO DEL MUNDO. Jamás pensé que escuchara algo así de la boca de una supernanny.