Yazgo en el pañol de cables
Fumando tabaco fuerte
De pipa y pensando en nada.
Verde es el mar,
De verde ajenjo obscuro;
Y amargo cual cloruro de magnesio
Y más salado que la sal marina
Y casto cual cloruro de potasio;
Y olvido, olvido
De grandes culpas y mayores penas,
¡Y ajenjo!
¡Tú, verde mar de ajenjo,
Y tú, sereno olvido del ajenjo,
Da a mis sentidos paz
Y déjame dormir en paz
Como antes me dormía en pleno artículo
De la Revista de dos Mundos!
Suecia como el humo se extiende
De un Maduro-Havanna
Y el sol sobre ella yace
Como un puro a medio fumar,
¡Ay, pero en torno al horizonte
Hay heridas tan rojas
Cual fuegos de Bengala
Iluminando la miseria!