Agradecimientos

La aventura de escribir este libro ha sido posible gracias a la ayuda de muchos. En primer lugar quiero agradecer a Dominique Lapierre el estímulo y el ánimo que siempre me ha transmitido para que El pie de Jaipur llegase un día a caminar. Gracias también a mis editores Mario Lacruz en Barcelona y Richard Ducousset en París, por la confianza que han depositado en mí y que me ha permitido llevar a cabo la larga y costosa investigación de este libro.

Aparte de los personajes que aparecen en la historia, quiero expresar mi más sincero reconocimiento a Rina y Takis Anoussi en Nueva York; Dena Dunnells en Washington; Kia Abitbol en París; Celia Vázquez en Barcelona; Shannon Boase en Bangkok, y al personal de Handicap International en Phnom Penh, en particular a Thierry Mulpas y Becky Jordan. Todo mi agradecimiento a Laura Garrido por su eficaz y valiosísima colaboración. También quiero recordar aquí a los que tuvieron la amabilidad de revisar el primer borrador: Eugenio Suárez, Rafael Araújo, Enrique Puerta, Luis Alaejos y muy especialmente al profesor Ricardo Hernández.