Glosario

Oficios litúrgicos

Las siguientes indicaciones son orientativas ya que la hora de los oficios variaba según las distintas estaciones.

Además de la misa, y aunque esta no forme parte en sentido estricto, los oficios divinos, instaurados en el siglo VI por la Regla de San Benito, comprenden varios oficios cotidianos que regulan el ritmo de la jornada. Así pues, los monjes y monjas no podían cenar antes del anochecer, es decir, después de vísperas.

Vigilias o maitines: entre las 2:30 y 3 de la noche.

Laudes: antes del alba, entre las 5 y las 6 de la mañana.

Prima: hacia las 7:30, es el primer oficio del día, poco después de la aurora, justo antes de celebrar la misa.

Tercia: hacia las 9.

Sexta: al mediodía.

Nona: entre las 2 y las 3 de la tarde.

Vísperas: entre las 16:30 y las 17, al ponerse el sol.

Completas: es el último oficio de la tarde antes de vísperas, entre las 6 y las 8.

Los oficios divinos se celebraron íntegramente hasta el siglo XI. Sin embargo, a partir de entonces fueron disminuyéndose para permitir a monjes y monjas consagrar más tiempo a la lectura y al trabajo manual.

Hacia las 10 de la noche se celebraba también una oración nocturna.

Medidas de longitud

Trasladarlas a medidas actuales es una tarea harto difícil teniendo en cuenta que a menudo difieren en las distintas regiones.

Arpende: de 160 a 400 toesas cuadradas, es decir, de 720 a 2.800 m2.

Legua: aproximadamente 4 kilómetros.

Toesa: de 4,5 a 7 m.

Alna: de 0,7 m en Arras a 1,2 m en París.

Pie: de 34 a 35 cm aproximadamente.

Pulgada: de 2,5 a 2,7 cm aproximadamente.

Monedas

Se trata de un auténtico galimatías pues con frecuencia variaban en los distintos reinos y regiones. En función de la época, su valor se determinaba o no según su peso real en oro o en plata, así como su revaluación y devaluación.

Libra: unidad de cuenta. Una libra valía 20 sueldos, 240 dineros de plata o bien 2 pequeños reales de oro (moneda real durante el reinado de Felipe el Hermoso).

Pequeño real: equivalía a 14 dineros torneses.

Dinero tornes (de Tours): reemplaza progresivamente al dinero parisiense de la capital. Doce dineros torneses equivalían a un sueldo.