15 DE SEPTIEMBRE. REPÚBLICA DE TRABAJADORES

Don Luis Araquistain, escritor y diputado socialista (tendencia Largo Caballero), trabaja día y noche para que en la Constitución ponga que España es una República de trabajadores. Al parecer, esto molesta a mucha gente. Se busca una fórmula. Es ésta: España es una República de trabajadores de todas clases. La gente se queda más tranquila. El caso es pasar el rato.

El texto del artículo constitucional al que hacemos referencia ha sido telegrafiado a todos los rincones del mundo y ha provocado innumerables carcajadas. Las más ilustres se han producido en Ginebra, cuando Briand, presidente del Consejo de la Sociedad de Naciones, viendo entrar a Lerroux, Madariaga y a tres o cuatro profesores más de la delegación española, ha dicho, reloj en mano, constatando que llegaban una hora tarde:

Voilà les travailleurs…

Lerroux se sienta, ve que todo el mundo ríe y le pide al delegado que tiene al lado que le explique la causa de la hilaridad:

C’est que, vous savez, c’est un peu difficile de prendre sérieusement certains travaux constitutionnels que vous êtes en train de faire en Espagne…

¡Ah, claro, claro…! —añade Lerroux, que no ha entendido ni jota de lo que le acaban de decir—. No faltaría más…