PARA TI
Por Santi
Millán
Amigos, esta receta va dirigida a todos aquellos que lleven más de diez años con su pareja, o en su defecto (porque cada vez es más difícil encontrarlos) a los que quieran llegar a celebrarlos.
Las relaciones estables de largo recorrido tienen infinidad de pros, pero también tienen sus contras.
Después de diez años de convivencia no esperes que tu mujer llegue a casa por la noche con lencería de encaje, se desnude delante de ti y te pida que le des su merecido porque ha sido una chica mala.
No, desgraciadamente, eso no pasa. Cada vez hay menos sorpresas, y cuando hay alguna suele ser desagradable.
(Ahora leer con tono teletienda). ¡Pero todo eso va a cambiar si sigues mi consejo! ¿Cuánto hace que no sorprendes a tu chica con una cena romántica hecha por ti? Demasiado, ¿verdad? Pues te voy a ayudar a poner remedio a ese error. Vamos a preparar unos platos con los que tu pareja se va a chupar los dedos, y con un poco de suerte, algo más (fin tono teletienda).
Para el primer plato lo ideal es una ensaladita pero con un toque especial. Por eso te recomiendo nido de parmesano con rúcula y fresas.
La preparación es muy sencilla. Rallas el parmesano, una buena cantidad. Calientas una sartén y echas el parmesano rallado en ella. Cuando se haya fundido y veas que adquiere un color doradito, apartas la sartén del fuego y esperas a que se enfríe un poco para despegar el queso (te tiene que quedar como una tortita). Antes de que se enfríe del todo, coges un cuenco pequeño y lo utilizas de molde para que la tortita de queso adquiera la forma del cuenco. Ahora ya tienes el nido, solo falta que lo rellenes con la rúcula y las fresas cortadas (si puedes, córtalas con una mandolina para que queden bien finitas) y que lo aliñes con una reducción de vinagre de Módena, aceite de oliva virgen y sal.
El entrante ya lo tenemos, ahora vamos a por el principal. Yo creo que, para este plato, algo con un toque oriental va a funcionar de maravilla. Así que haremos sashimi de salmón a la catalana.
Solo necesitamos un buen trozo de salmón bien fresco (es recomendable congelarlo durante veinticuatro horas antes de comerlo crudo), un poco de pan tostado y un tomate muy maduro y gustoso.
Coges el pescado, lo cortas en piezas rectangulares uniformes (el grosor depende de ti) y las colocas en un plato rectangular. Después, pones encima de cada pieza un poco de pan rallado y una pizca de tomate, que también has rallado previamente. No te pases, tiene que ser un toque, no inundes el salmón de pan ni de tomate. ¡Y ya está! Más fácil imposible, y te aseguro que le encantará.
¡Y ahora llega el postre! No lo dudes, tiene que ser de chocolate. Vamos a hacer uno muy sencillo con el que vas a triunfar seguro: tortilla fea de chocolate. Vale, el nombre no es muy atractivo, pero tiene la garantía de ser una receta del maestro Arzak.
Para hacer un par de tortillas vas a necesitar:
—50 g de chocolate para fundir
—dos huevos
—50 g de azúcar
—5 g de cacao en polvo
La preparación no puede ser más fácil. Fundes el chocolate en el microondas (fúndelo lentamente y así evitarás que se queme) y lo mezclas en un bol con el resto de los ingredientes. Con esta mezcla ya puedes hacer las tortillas en una sartén antiadherente, dejándolas bien jugosas. Si te animas, también puedes hacer una vinagreta de maracuyá para acompañar la tortilla. Solo necesitas un maracuyá, una cucharada de azúcar moreno y una cucharada de aceite de oliva. Cuando sirvas la tortilla, le pones al lado la vinagreta.
Si después de todo esto tu mujer no se lanza a tus brazos, no desesperes. Por lo menos habrás cenado de cojones. ¡Buen provecho!