Aquel arbitraje de Al-Ghandour

La sustitución de Clemente se resolvió con Camacho, exjugador del Madrid, declarado patriota, y con alguna experiencia ya como entrenador. El equipo hizo una preciosa clasificación para la Eurocopa de 2000, en Bélgica-Holanda, para allí caer otra vez en la fatalidad de cuartos de final, por un penalti fallado en los últimos instantes por Raúl ante Francia. Camino de esa Eurocopa debutará Casillas en un amistoso, aunque tardará en consolidarse. Ahora está en perspectiva el Mundial de CoreaJapón. Toca un grupo tranquilo, con Austria, Israel, Bosnia-Herzegovina y Liechtenstein. Lo pasamos de calle, con seis victorias y dos empates.

Hay concentración en Jerez de la Frontera. Tres días antes, Camacho anuncia la lista, en la que faltará Guardiola, por lesión. En principio fue esta:

Porteros: Cañizares (Valencia, que finalmente no pudo ir), Casillas (Madrid) y Ricardo (Valladolid). (Luego llamará a Contreras, del Málaga, de urgencia).

Defensas: Curro Torres (Valencia), Iván Helguera (Madrid), Puyol (Barça), Hierro (Madrid), Nadal (Mallorca), Juanfran (Celta) y Romero (Deportivo).

Centrocampistas: Baraja y Albelda (Valencia), Sergio González y Valerón (Depor), Mendieta (Lazio), Xavi (Barcelona).

Delanteros: Joaquín (Betis), Morientes (Madrid), Raúl, (Madrid), Diego Tristán (Deportivo), Luque (Mallorca), De Pedro (Real) y Luis Enrique (Barcelona).

Muchos delanteros, como se ve, aunque algunos podían jugar en apoyo de la media, casos de De Pedro, Luis Enrique o Raúl. Ya son veintitrés en la lista, porque se admite uno más siempre que sea portero.

Con Cañizares se dio un caso insólito. Su conocida afición a los afeites le jugó una mala pasada. En la concentración de Jerez se le cayó un frasco, se rompió y el canto del cristal le cortó el tendón en el dedo gordo del pie derecho. Imposible recuperarse. Viajó con el equipo, pero solo para acompañar. Le sustituyó Contreras, del Málaga. Eso elevó a Casillas a una inesperada titularidad. Poco antes del Mundial se había visto favorecido por otro golpe de fortuna. En la final de Champions del Madrid en Glasgow, contra el Bayer Leverkusen, había salido como titular César, que lo era desde algún tiempo antes; se lesionó, salió Casillas y con tres paradas providenciales salvó el título. En menos de un mes pasó de suplente en el Madrid a titular de la selección en la Copa del Mundo.

España llega a Corea del Sur con buen ánimo y con Raúl como líder indiscutido: «Raúl es el que tiene que tirar del carro», dijo Camacho, y la frase hizo fortuna. El sorteo ha sido bueno: nos tocaron Eslovenia, Paraguay y Sudáfrica. Suena bien. Y sonará mejor.

España, 3 - Eslovenia, 1

Nos estrenamos con Eslovenia, la primera de las naciones que se escindió de la vieja Yugoslavia. Es el 2 de junio, en Gwangju. Salen estos: Casillas; Puyol, Hierro (capitán), Nadal, Juanfran; Luis Enrique, Baraja, Valerón, De Pedro; Raúl y Diego Tristán. Raúl, en efecto, tira del carro. Agita el ataque, va, viene, anima y hace el 1-0 en el 44’. Entra Morientes en el 67’ por Tristán, que no encaja. En el 74’, Valerón, que ha hecho un partidazo, marca a pase de De Pedro, que también ha brillado. 2-0. Con el gol llega otro cambio, Helguera por Luis Enrique. En el 82’ Cimirotic hace el 2-1 para Eslovenia. Y en el 87’ Hierro hace el 3-1 de penalti. Hay optimismo.

España, 3 - Paraguay, 1

El 7 de junio, en Jeonju, segundo partido, este ante Paraguay. Su meta, Chilavert, de poderosa y extravagante personalidad, ha calentado el partido. Tiene una poderosa pegada izquierda, que le lleva a lanzar y marcar no solo penaltis, sino tiros libres, lo que hace con frecuencia. Anuncia que le marcará dos a Casillas de este modo. Dice que España no ha ganado a nadie importante desde 1998. Camacho convierte sus declaraciones en motivación para sus jugadores. Repite alineación: Casillas; Puyol, Hierro (capitán), Nadal, Juanfran; Luis Enrique, Baraja, Valerón, De Pedro; Raúl y Tristán.

Hay inquietud porque en el 10’ llega el gol paraguayo, marcado en propia puerta por Puyol. Luego se cierran y se protegen bien. Tras el descanso entran Helguera por Luis Enrique y Morientes por Tristán, que tampoco ese día está bien. Morientes hará pronto dos goles, el 1-1 en el 53’ y el 2-1 en el 69’. En el 83’, Hierro marca de penalti. En el 85’ sale Xavi por Valerón. Chilavert se ha adelantado en una ocasión a lanzar una falta, pero ha ido fuera. España acumula fe.

España, 3 - Sudáfrica, 2

Tercer partido, 12 de junio, en Daejeon. Con todo hecho, Camacho aprovecha para refrescar el equipo, aunque no da descanso a Raúl, siempre ansioso por jugar, lo que luego habrá que lamentar. Salen estos: Casillas; Curro Torres, Nadal (capitán), Helguera, Romero; Joaquín, Xavi, Albelda, Mendieta; Raúl y Morientes. Raúl sigue tirando del carro y marca el 1-0 muy pronto, en el 4’. McCarthy, la única celebridad de Sudáfrica, hace el 1-1 en el 31’. Al filo del descanso, en el 45+2’, Mendieta logra el 2-1 de tiro libre. En el 53’ hace el 2-2 Radebe e inmediatamente entra Sergio por Albelda. En el 56’ otra vez Raúl y 3-2. En el 77’ Morientes deja su puesto a Luque y en el 82’, Raúl a Luis Enrique. El partido acaba 3-2. Tres partidos, tres victorias, nueve goles a favor y cuatro en contra. El último día ha servido para calmar las ansias de jugar de todos menos los porteros suplentes.

España, 1 - Eire, 1 (3-2 en penaltis)

Octavos de final en Suwon, siempre en Corea del Sur. Eire llega invicta de su grupo, tras empatar con Alemania y Camerún y ganar a Arabia. No es mal equipo, con Keane y Duff como amenazas. Camacho vuelve al primer equipo: Casillas; Puyol, Hierro (capitán), Helguera, Juanfran; Luis Enrique, Baraja, Valerón, De Pedro; Raúl y Morientes. El partido es difícil, a pesar de que Morientes marca el 1-0 en el 8’, y lo salvará en varias ocasiones Casillas, que se encumbrará este día. Eire ocupa el campo, presiona, lanza pelotazos largos, hace nuestro medio campo inútil para obstruir. Es cansado jugar contra ellos, en esa continua lucha aérea. En el 66’ Mendieta reemplaza a De Pedro, achicharrado por el ritmo. Hierro hace un penalti, por agarrón a Quinn y Casillas detiene el lanzamiento. Siguen los recambios: Albelda por Morientes, en el 72’, para contener, Luque por Raúl, que no puede más, en el 80’. En el último minuto, hay un nuevo penalti contra España que transforma Keane en el 1-1. Prórroga. Lo pasamos verdaderamente mal, Casillas hace de las suyas y ganamos como podemos la orilla de los penaltis. Es un consuelo. Nos hemos visto fuera. Para los irlandeses, al revés. Lamentan el primer penalti, fallado, y las ocasiones perdidas. Y tienen enfrente, a la hora de tirar los penaltis, a ese mocoso paralotodo. Problema sobre problema.

Y el mocoso paralotodo sigue en lo suyo. Para dos penaltis y otro va fuera. Solo encaja dos de los cinco. Suerte, porque por España marcan primero Hierro y Baraja, luego fallan Juanfran y Valerón y finalmente Mendieta marca el tercero. Pasamos a cuartos, pero pasamos por la gatera. Lo hemos pasado de verdad mal.

España, 0 - Corea del Sur, 0 (3-5 en penalties)

Los cuartos son con Corea, mala cosa. Los coreanos han eliminado a Italia en octavos, con un arbitraje infame del ecuatoriano Moreno. Un penalti que paró Buffon, injusta expulsión de Totti, gol mal anulado a Tommasi… Después de todo eso, gol de oro del coreano Ahn en la prórroga. Una verdadera vergüenza. La casa coreana Hyundai era uno de los patrocinadores del evento y su presidente, Chung Mong-joon, lo era también del comité organizador y vicepresidente de la FIFA. Era para temer. Pero confiábamos antes del partido en que Villar era el presidente del comité de árbitros de la FIFA, y en que dos veces no se iba a hacer la misma burrada. Pero…

Hay un debate mayor, un problema que tapa todas esas suspicacias. Raúl está lesionado. Tiene tensionados los abductores, parece que no está para jugar. No se entrena. Se recluye con su masajista del Madrid, Chueca, que ha ido con él, en sesiones interminables para aliviar el dolor. La comidilla es Raúl sí, Raúl no. Si habrá quien tire del carro o si no lo habrá. Los programas no hablan de otra cosa.

Finalmente se conoce la alineación: Casillas; Puyol, Hierro (capitán), Nadal, Romero; Joaquín, Helguera, Baraja, Valerón, De Pedro; Morientes. Raúl no ha llegado a tiempo, aunque luego de su entorno saldrá que sí, que podría haber jugado y que ha sido Camacho quien no se ha decidido a ponerle, prefiriendo reservarle para la semifinal. Pero en realidad cuando debió reservarle fue en el tercer partido, como a todos los demás. Fue el ansia de Raúl por jugar y la falta de firmeza de Camacho lo que provocó que no descansara ese día.

No jugamos bien. Los coreanos, a los que entrena Hiddink, nuestro viejo conocido (pasó por el Valencia y luego ganó con el Madrid la Intercontinental) corren mucho y con mucha fe. España a ratos parece descabezada sin Raúl. En algunos ratos parece que no hay ni carro del que tirar. Con todo, debería haber ganado, por ráfagas de juego en las que impuso su mayor categoría técnica. En el 49’ hay un córner desde la derecha. Helguera salta limpiamente y cabecea a gol. Los españoles se abrazan, pero ven con sorpresa que el gol ha sido anulado. El árbitro, el egipcio Al-Ghandour, dice que ha habido falta. No ha habido ninguna falta, no aparece tal cosa en repetición alguna, no cabe más que una explicación: como en tantos córners hay agarrones recíprocos, él da por sentado que los habrá habido aquí también y manda el gol al limbo de los justos. Sigue el partido, con España encorajinada. Van llegando los cambios. En el 70’, Mendieta por De Pedro, en el 80’, Luis Enrique por Valerón. Se huele la prórroga y hay que refrescar. En el 93’, ya en prórroga, Xavi por Helguera, que sigue indignado. Y ya en ella, una colada de Joaquín por la línea de fondo y centro al segundo palo que Morientes cabecea a gol. Otro abrazo y otro chasco. El linier de ese lado, Ali Tomusange, ha levantado la bandera, señalando que a Joaquín se le ha ido el balón por la línea de fondo antes de centrar. La repetición muestra que ni mucho menos. Pero ese gol también se va al limbo.

Pasamos a los penaltis. Nos queda Casillas. Pero no es lo mismo. Ahora estamos todos ofuscados y Casillas no para ninguno de los cuatro primeros. Por España marcan Hierro, Baraja y Xavi. Joaquín falla el cuarto. Cuando ellos tiran el quinto y marcan, estamos fuera. Otra vez en cuartos. Y expoliados, severamente expoliados. Corea ha llegado a las semifinales, remolcada por árbitros sacados del tercer mundo futbolístico. En semifinales, contra Alemania, ya no se atreverán. Era suficiente. Semifinalista era una posición excelente para el capo de la Hyundai y sus paisanos.

La irritación en España es mayúscula. Encima regresamos con el conventillo de si Raúl podría o no haber jugado, si debería o no haberse arriesgado Camacho. Al cabo de unas semanas, el seleccionador se harta y anuncia que se marcha. Ha estado cuatro años, un ciclo justo, una Eurocopa y un Mundial. Las dos veces nos clasificamos, las dos veces caímos en cuartos de final. Aquello se convirtió en obsesión. Nunca pasaremos de ahí, pensábamos.