México, por segunda vez

La Copa del Mundo de 1986 se jugó en México por renuncia de Colombia, como se ha detallado anteriormente. La concesión se decidió el 20 de mayo de 1983. Fue el primer país que repetía organización de la Copa del Mundo. Atendió a las nuevas exigencias de la FIFA, que habían echado atrás a Colombia, en cuanto a número y capacidad de estadios, comunicaciones entre sedes, hoteles y demás detalles.

Se dispuso que se disputara en nueve ciudades: México D.F., Guadalajara, Irapuato, León, Monterrey, Nezahualcóyotl, Puebla, Querétaro y Toluca. No se repitió la mascota del 70, un simpático charro llamado Juanito, sino que se creó una nueva figura, llamada Pique, un chile (pimientito verde picante) dotado de bigote y sombrero mexicano. El balón se llamó Azteca y seguía la inspiración y el dibujo del Tango, utilizado en las dos Copas anteriores, pero con trazados aztecas en las zonas pintadas en negro.

El 19 de septiembre de 1985, a menos de un año para empezar el campeonato, México D.F. sufrió un terremoto de 8,1 grados en la escala Richter. Fallecieron 6800 personas y cayeron muchos edificios. Pero eso no frenó la decisión de los organizadores. El campeonato empezó en la fecha prevista, el 31 de mayo, y finalizó el 29 de junio.

Hubo diecinueve árbitros europeos, diez americanos (seis de Sudamérica y cuatro de la CONCACAF), cuatro de África, seis de Asia y uno de Oceanía. Por España fue Sánchez Arminio. Se jugó bajo un intensísimo calor, en horarios convenientes a las televisiones europeas, lo que reportó grandes incomodidades a los futbolistas, que en el futuro intentarían agruparse, sin éxito, para enfrentarse a la FIFA en este y otros aspectos.

Para este campeonato se suspendió la segunda fase de grupos, que se venía utilizando desde 1974. Se decidió que tras la primera fase, en liguillas de cuatro, se pasara a un sistema de eliminatorias, desde octavos de final, con prórroga y penaltis en caso de empate. Se jugaron en total cincuenta y dos partidos, con 2,54 goles por partido. Los equipos oscilaron entre el 4-4-2 y el 4-3-3, con pocas excepciones, y según esta ordenación aparecen en las alineaciones de la época. Bilardo empezó a utilizar con Argentina, que ganó, un modelo 4-2-3-1, que con el tiempo haría fortuna. El máximo goleador fue Gary Lineker, con seis tantos.