Aunque las limitaciones y errores que pueda tener este ensayo son sólo míos, sus eventuales aciertos deben mucho a las sugerencias de tres amigos generosos que leyeron el manuscrito y a quienes quiero citar y agradecer: Verónica Ramírez Muro, Jorge Manzanil a y Carlos Granés.
MARIO VARGAS LLOSA
Madrid, octubre de 2011