… y si la Ciudad cae pero un solo hombre escapa
llevará la Ciudad dentro de sí mismo en las rutas del exilio
él será la Ciudad.
ZBIGNIEW HERBERT
Finalmente Schenk pensó que comprendía y empezó a reír con más fuerza. Luego, de repente, preguntó en un tono más serio:
—¿Cree usted que los rusos son homosexuales?
—Lo averiguará usted al final de la guerra —repliqué.
CURZIO MALAPARTE