De los seis sancionados de por vida por la USADA (Armstrong, Ferrari, Bruyneel, Del Moral, Celaya y Martí), tres son españoles, un porcentaje impresionante. Ya se ha visto en las declaraciones de Hamilton y en los pronunciamientos del COI la percepción que hay del dopaje en España fuera de nuestras fronteras. Ahora bien, el documento de la USADA nos permite por fin entrar en detalles, aunque dé la sensación de que no son sino la punta del iceberg. Aparte de Eufemiano Fuentes y Michele Ferrari, la cantera de médicos deportivos españoles o que han pasado consulta en España es amplia.
Tras abandonar el US Postal, Luis del Moral tuvo que buscarse la vida por su cuenta y lo hizo con cierto éxito. Entre los clientes que mantuvo estaban Floyd Landis y Levi Leipheimer, cuando estos corrían para Phonak y Rabobank, respectivamente. Landis asegura que, cuando salió del Discovery Channel en 2005, estaba perdido. Phonak venía del escándalo Hamilton-Pérez y no estaba dispuesto a arriesgarse a encargar un programa de dopaje sistemático de equipo, así que a Floyd solo se le ocurrió contactar con Del Moral en Valencia para seguir con lo que ya hacían en el Postal: EPO, transfusiones de sangre, hormona del crecimiento, testosterona, etc. En una entrevista al portal NY Velo City, Landis asegura lo siguiente en lo referente al transporte y almacenaje de sustancias dopantes: «Realmente no era necesario ningún equipamiento médico. Lo único que era difícil de conseguir eran las propias bolsas para la sangre, y esas las podía conseguir de mis compañeros de equipo españoles, de Del Moral o de quien fuera».
El dopaje llevó a Landis a ganar el Tour de Francia de 2006, pero a los pocos días se reveló su positivo por testosterona, sustancia que él insiste en que no tomó nunca. Se revolvió contra la sanción hasta que en 2010 estalló y admitió su culpa.
Recientemente, Del Moral ha sido de nuevo protagonista de varias informaciones por su relación con el mundo del tenis, especialmente con la academia TenisVal de Valencia, una zona que viene a ser al tenis lo que Girona al ciclismo, en términos de concentración de estrellas nacionales y extranjeras. Entre las clientes reconocidas de Del Moral se encuentra la italiana Sara Errani, sorprendente finalista en 2012 de Roland Garros. Los rumores llegaron a apuntar a David Ferrer la víspera de la última Copa Davis, pero el tenista de Jávea negó conocer a Del Moral.
Por su parte, Leipheimer asegura en su testimonio ante la USADA que recurrió a Pepe Martí para comprar EPO cuando estaba en el Rabobank y luego en el infame Gerolsteiner de Bernard Kohl y Stefan Schumacher, que dieron positivo por consumo de CERA o EPO de tercera generación. Pepe Martí siguió vinculado a la estructura del US Postal cuando esta se mudó al Astaná, y ya se quedó ahí como preparador personal de Alberto Contador hasta la marcha del pinteño al Saxo Bank.
Otro médico español involucrado en casos de dopaje es Jesús Losa, médico del Euskaltel, y que en el libro de David Millar aparece como su suministrador de EPO cuando decidió dar el paso al lado salvaje. Losa fue investigado por la Guardia Civil en la Operación Chinatown a raíz del positivo de la ciclista Maribel Moreno previo a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, y en sus llamadas y SMS aparecen corredores de la talla de Francisco Mancebo, Luis León-Sánchez, Dani Moreno o Alexander Kolobnev. Todos negaron su relación y, como sucedió con la Operación Puerto, el juez archivó el caso.
Por último, Walter Virú no es español sino peruano, aunque también eligió Valencia para establecer su consulta de medicina deportiva. Amigo de los hermanos Fuentes —Eufemiano y Yolanda—, consiguió un puesto como asesor médico en el Kelme en 2003, aunque la experiencia fue desastrosa; según Jesús Manzano, Virú fue el responsable junto con Alfredo Córdova de un dopaje sistemático en el equipo que casi acaba con su vida dos veces: una en el Tour de Francia, por tomar una sustancia nueva que le dejó inconsciente al borde de la carretera, y pocos días después, en Valencia, tras recibir una transfusión sanguínea en mal estado. Algo parecido refiere Tyler Hamilton en su libro después de un viaje a Madrid para hacerse una transfusión con Eufemiano, lo que puede invitar a pensar que la red Fuentes-Virú no era tan profesional como la de Ferrari-Del Moral-Celaya, aunque todo eso lo tendrán que determinar los tribunales en las próximas fechas.
Virú salió indemne de la Operación Puerto de manera casi milagrosa y le tocó un dineral en la lotería en otro golpe de suerte… pero acabó cayendo en la Operación Grial (2009), que se llevó por delante la carrera del corredor de marcha Paquillo Fernández, quien al menos sí colaboró con la justicia deportiva y reconoció su participación en la trama, recibiendo así una rebaja en su sanción. Desgraciadamente, si no hubiera «chivatos» que rompieran la omertà de la que hablan Hamilton y la propia USADA, sería imposible averiguar la verdad de los hechos.