La última edición de estos ensayos históricos se realizó en mayo de 1975. Luego vino el período donde no sólo se hizo desaparecer a seres humanos sino también a los libros. Según certificación de mi antigua editorial durante la dictadura de los generales, almirantes y brigadieres “desaparecieron” ocho mil ejemplares del compendio de estas investigaciones.
Pero pese a las hogueras y a los verdugos siempre presentes (el teniente coronel Jorge Gorleri, quemador de libros en 1976, fue ascendido a general en 1984 por el Senado de la Nación) los libros destruidos vuelven a nacer. No como los seres humanos asesinados y desaparecidos para siempre, a quienes dedico estas páginas en permanente recuerdo.
OSVALDO BAYER