Vosotros, los zombies y la autocreación humana mediante el viaje en el tiempo

Más intrigante es aún Vosotros, los zombies (1959), del maestro de la ciencia-ficción Robert Heinlein, una de las mejores novelas sobre viajes en el tiempo jamás escritas. Un joven de veinticinco años se halla en un bar lamentando su suerte; curiosamente se llama a sí mismo «Madre Soltera». El joven le cuenta al barman su historia. Su vida ha sido muy dura. Nació mujer y se crió en un orfanato. De joven tuvo relaciones sexuales con un hombre que la abandonó. Quedó embarazada y decidió tener el niño. Llegado el momento, fue necesario practicarle una cesárea y dio a luz a una niña. Durante la operación, el médico observó que en el interior de su cuerpo había órganos masculinos y femeninos, e intervino quirúrgicamente para transformarla sin su consentimiento en un varón. Ésta es la razón por la que el protagonista se refiere a sí mismo como «Madre Soltera», Por otra parte, el bebé fue secuestrado en el hospital por un desconocido.

El barman interrumpe al joven: «La matrona de su orfanato era Mrs. Fetherbridge, ¿verdad?… Su nombre cuando era mujer era Jane, ¿no? Y usted no me había contado esto hasta ahora, ¿no es cierto?». El barman pregunta entonces a Madre Soltera si quiere encontrar al padre de su hija. El desgraciado joven acepta y es conducido por el barman a la parte trasera del bar, donde hay una máquina del tiempo. Viajan siete años y nueve meses al pasado. El barman deja allí al joven y avanza nueve meses, justo a tiempo para raptar a un bebé llamado Jane. A continuación lleva a la niña dieciocho años atrás en el tiempo y la deja a la puerta de un orfanato. Después regresa junto al joven, que acaba de dejar embarazada a una muchacha llamada Jane. El barman conduce al joven al futuro para que estudie hostelería. Al final, mientras el barman reflexiona sobre la aventura, se mira una vieja cicatriz en el vientre y murmura: «Sé de dónde vengo yo. Pero ¿de dónde venís todos vosotros, los zombies?».

El barman, que es Jane, ha retrocedido en el tiempo para convertirse a la vez en su propia madre y en su propio padre. Su línea de universo es verdaderamente compleja.[2] Comienza siendo el bebé Jane, es llevado al pasado por un barman, crece en un orfanato, tiene relaciones sexuales con un hombre, da a luz una niña llamada Jane, cambia de sexo, acude al bar a lamentarse de su sino, viaja al pasado con un barman, hace el amor con una mujer llamada Jane y es conducido al futuro por dicho barman, donde a su vez se convierte en barman que viaja al pasado para tramar la historia de nuevo. Se trata de un relato autoconsistente, extraño y maravilloso a la vez.

La idea fue trasladada al origen de las especies por Ben Bova en su novela Orión, de 1984, en la que un viaje en el tiempo permite a los humanos del futuro regresar al pasado y crear la raza humana. En la novela, pues, la especie humana se crea a sí misma. De una forma similar veremos más adelante cómo el viaje en el tiempo en la relatividad general puede permitir que el universo se origine a sí mismo.