MINISTERIO DEL INTERIOR
El ministro
Al Gran Oficial
Arrigo Monterchi
Comisario de Montelusa
Roma, 20 de agosto de 1892
Señor comisario:
La excesivamente rígida oposición asumida por usted con S.E. el prefecto de Montelusa con ocasión de las vicisitudes del conocido subversivo Genuardi podría haber sido considerada una normal divergencia entre las libres opiniones de dos altos representantes del Estado si no fuera porque usted se ha extralimitado sobremanera. Las acciones llevadas a cabo por usted para apoyar su tesis (que se ha revelado, además, trágicamente infundada) han llegado a la sistemática denigración de dos brillantes oficiales del Arma de Carabineros que sólo estaban interesados en cumplir con su deber, engañando también al comandante general del Arma en Sicilia y haciéndole tomar medidas erróneas. No satisfecho con esto, usted ha ofrecido continua protección a las poco claras maniobras del delegado de policía de Vigàta, su subordinado.
Es con pesar que, de acuerdo con S.E. el presidente del Consejo de Ministros, me veo obligado a considerar del todo inoportuna su ulterior permanencia en Montelusa.
Dentro de un mes desde la recepción de la presente, usted se presentará en su nuevo destino en Nuoro (Cerdeña).
Espero que usted aprenda la lección del recentísimo pasado y modere ciertos aspectos no precisamente positivos de su temperamento.
El ministro
(firma ilegible)