Los métodos de ataque senderistas descritos en este libro, así como las estrategias contrasubversivas de investigación, tortura y desaparición, son reales. Muchos de los diálogos de los personajes son en realidad citas tomadas de documentos senderistas o de declaraciones de terroristas, funcionarios y miembros de las Fuerzas Armadas del Perú que participaron en el conflicto. Las fechas de la Semana Santa del año 2000 y la descripción de sus celebraciones también son verdaderas. Sin embargo, todos los personajes, así como la mayoría de las situaciones y lugares aquí mencionados, son ficticios, e incluso los detalles reales han sido descontextualizados de su lugar, tiempo y sentido. Esta novela cuenta, como todas, una historia que podría haber ocurrido, pero su autor no da fe de que haya sido así.
Gracias por la lectura del original y sus sugerencias a Pablo Lohmann, Diego Salazar, Juan Ossio y Jorge Villarán.