Estoy en deuda con muchas personas que me han ayudado durante la documentación y la redacción de este libro. Mis sinceras gracias a Knútur Óskarsson y a su madre por su generosidad y su café, su ayuda con las traducciones y todas esas conversaciones ya entrada la noche con Ósar. Conoceros a ambos ha sido uno de esos momentos singulares en que se combinan la buena sintonía y la suerte. Gracias a Jón Torfason y al resto de archiveros de Þjóðskjalasafn Íslands por su ayuda y entusiasmo, y por encontrarme la correspondencia original del juicio. Gracias a Guðmundur Jóhannsson por esa carta tan inmensamente útil. A los bibliotecarios y demás personal de Þjóðminjasafn, Árni Magnússon Institute for Icelandic Studies, Kringlan Library, Árbæjarsafn y Glumbær, gracias por vuestra paciencia y vuestra ayuda.
A mi «familia islandesa»: þakka þer kærlega fyrir. Sin vosotros esta novela no existiría. Todo mi cariño y mi gratitud a mis queridos Pétur Bjórnsson, Regína Gunnarsdóttir, Hera Birgisdóttir, Halldör Sigurðsson, Sylvía Dögg Gunnarsdóttir y María Reynisdóttir, por su amabilidad, sus habitaciones de invitados y su generosidad. También estoy en deuda con muchos otros islandeses que he conocido y que han contribuido a esta novela de maneras extrañas y diversas. Espero que la leáis como la oscura carta de amor a Islandia que es.
Gracias a todos en la Universidad de Flinders, en especial a Ruth Starke, quien me apoyó desde el principio. Gracias a mis primeros lectores, Kylie Cardell y Kalinda Ashton, y a Kate Douglas, David Sornig y Bec Starford por vuestra amistad y por las oportunidades que me habéis brindado.
A Geraldine Brooks, por tus sabias observaciones y tu tutela, muchas gracias. Al premio al Mejor Manuscrito Inédito de Australia, al SA Writers’ Centre y a Peter Bishop, Valerie Parv, Patrick Allington y Mark Macleod por vuestras generosas observaciones: gracias.
Estoy agradecida también a la maravillosa Pippa Masson y a mi querida Annabel Blay de Curtis Brown Australia. Gracias a Gordon Wise, Kate Cooper y sus colegas de Curtis Brown UK, y a Dan Lazar de la Writers House. A Emma Rafferty, Sophie Jonathan, Amanda Brower y Jo Jarrah por vuestras atentas lecturas y acertadas sugerencias: gracias. A mis maravillosos editores, Alex Craig y Paul Baggaley en Picador, y a Judy Clain de Little, Brown, gracias por creer en este libro.
Por último, mi agradecimiento más sincero a Pam, Alan y Briony por vuestro cariño y vuestra constancia, y por interesaros por Agnes Magnúsdóttir tanto como yo. Y por último, pero no por ello menos importante, gracias a Angharad, por no dudar nunca y darme fuerzas cada día, cada hora.