Notas

[1] La Tentation totalitaire, Laffont, 1976. <<

[2] Cogí al vuelo, y por casualidad, en una emisora de radio, en mayo de 1987, estas palabras de un superviviente de una redada antijudía organizada por Barbie: «Espero una condena ejemplar. No a causa del hombre: Barbie es un personaje totalmente secundario. Lo que hay que condenar es la ideología que lo ha engendrado». Confieso, en cuanto a mí, haber estado animado por una esperanza inversa cuando empezó el proceso. Experimenté entonces un deseo, tal vez no muy noble, de venganza por las víctimas; quería la humillación pública de un individuo por el cual sentía una viva repulsión; deseaba que se le pusiera ante sus crímenes. Pero, afortunadamente, la ideología que le ha engendrado me parece condenada sin apelación desde hace varios decenios. Por lo que se refiere a la teoría, me parece que la cuestión está resuelta y sólo temo ver florecer en esta esfera, con ocasión del proceso, los tópicos grandilocuentes que —ésos sí— «banalizarán» el horror. Por otra parte, si de lo que se trataba era de atacar a una ideología, y no a un hombre, ya se había hecho: Barbie, con la idea que encarnaba, había sido condenado dos veces a muerte en rebeldía tras dos procesos, algunos años después de terminada la guerra. <<

[3] Robert Conquest, The Harvest of Sorrow, 1986. <<

[4] Teresa Toranska, «ONI», Des staliniens polonais s’expliquent, traducido del polaco por Laurence Dyèvre, prólogo de Jan Krauze, Flammarion, 1986. <<

[5] En el artículo citado en la página 45, Raymond Aron escribe, refiriéndose a la publicación de la conversación mantenida con Darquier: «Al encontrarme ausente de París en el momento en que se tomó la decisión, no conocí el texto de antemano y el comité editorial no pudo discutir sobre él». [L’Express núm. 1427 del 11 de noviembre de 1978). Esta frase no coincide con lo que yo recuerdo. Si es cierto que Aron no leyó la entrevista, también lo es que le dije que obraba en mi poder y que tenía la intención de publicarla. No formuló ninguna objeción y se marchó de viaje. De hecho, ni él ni yo imaginábamos las tormentas que causarían la necedad y la malevolencia. <<

[6] «A furia di spiegazioni-giustificazioni il rischio infatti è che la storia stessa sia cancellata». <<

[7] «Comincia ad esserci qualcosa di stupefacente, nello sdegno che Philipp Jenninger continua a suscitare da noi in Italia, oltre che nella sinistra tedesca ed europea. A nulla sembrano servire i chiarimenti, le citazioni esatte. A nulla sembrano giovare i commenti di personalità antorevoli come Simon Wiesenthal, che pure è addestrato a stanare nazisti e nonostante cio ha difeso Jenninger, ha approvato la sua raffigurazione della Germania hitleriana, e ha definíto una “grande tragedia” le sue dimissioni». <<

[8] «Questo giornale è stato l’único, nel nostro Paese, che di fronte all’oggettiva enormitá di una notizia secondo la quale il presidente del Parlamento tedesco avrebbe fatto publica apologia del nazismo nientemeno che commemorando l’inizio dello sterminio degli ebrei da parte del medesimo ha riportato si la natizia per quella che essa era, per come era giunta dalle agenzie, ma ha voluto contrallare e capire esattamente quanto era successo, cercando il testo integrale del discorso e pubblicandolo. I lettori de La Stampa hanno così potuto constatare con i loro occhi che quella notizia ero nel mérito assolutamente falsa» <<

[9] Citado por Il Giornale, de Milán (22 de mayo de 1987). <<

[10] Los otros minoritarios fueron los profesores Raoul Girardet y Olivier Passelecq (ambos del Instituto de Estudios Políticos de París), el profesor Erwin Scheuch (de la República Federal de Alemania), André Glucksmann y el disidente soviético Mijaíl Voslensky. Las veinticuatro declaraciones son aquellas cuyo texto se reproduce íntegramente en los anexos del informe final, que tengo ante mis ojos. Pero fueron en número muy superior a esa cifra las personalidades de toda Europa —presidentes de asociaciones diversas, diputados, dirigentes sindicales— que fueron invitadas a ilustrar a la comisión. <<

[11] Xavier Raufer, Terrorisme, J. J. Pauvert, 1984. El autor cita algunos hechos en apoyo de su tesis: «La vigilia de Navidad de 1959, unas sinagogas son embadurnadas con cruces gamadas en grandes ciudades alemanas. Inmensa emoción en el mundo entero. El gobierno federal presenta sus excusas. Pravda, en particular, se ensaña con los “revanchistas”. Son detenidos dos “embadurnadores”, que designan a su jefe: Bernhard Schlottmann, agente de los servicios de información de Alemania del Este, actuando por órdenes de sus superiores. «Entre cien casos idénticos, varios son especialmente reveladores». Un tal Herbert Bormann monta, en Essen, un “grupo de combate nacionalsocialista democrático”, o KDNS. Investigación. Bormann es, en Alemania del Este, como “comunista perseguido por los nazis”, poseedor de una carta oficial de… víctima del fascismo. Más aún: el 15 de enero de 1975, a las 15 horas, la radio de propaganda de Alemania del Este, Radio Libertad y Progreso, denuncia violentamente la creación, ese mismo día, de ese partido “anticomunista y nazi”… que sólo será fundado el día siguiente». <<

[12] El 6 de febrero de 1986, el Guardian atacaba a la revista Commentaire, fundada por Raymond Aron y dirigida por uno de sus más fieles y notables herederos intelectuales, Jean-Claude Casanova, clasificándolo, junto a mí, por otra parte, en la «nueva derecha». Yo ya había tenido derecho al mismo tratamiento en el Times Literary Supplement a causa de mi libro El rechazo del Estado (1984). Se sabe que la nueva derecha francesa no tiene nada que ver con el liberalismo, al que odia. <<

[13] Cómo terminan las democracias, capítulo XXIV. <<

[14] Albert Memmi, Portrait d’un Juif, París, 1961. <<

[15] Albert Memmi, Le Racisme (description, définition, traitement), París, Gallimard, 1982. <<

[16] Les Français et les Immigrés, por Muriel Humbertjean, cap. V de la colección anual SOFRES-Opinion publique, París, Gallimard, 1985. <<

[17] Op. cit., capítulo X. Se puede leer también un modelo de reportaje por Christian Jelen (Le Point, 20 de julio de 1987) sobre el ambiente inmigrado y las reacciones a tal medio ambiente en la ciudad de Aix-en-Provence. Jelen describe notablemente dos barrios de esa ciudad que desde hacía mucho tiempo votaban en su mayor parte comunista y que se han convertido, entre 1981 y 1986, en feudos electorales del Frente Nacional. Para precaverse del racismo, sería mejor diagnosticar y erradicar las causas profundas de estas evoluciones que organizar, a costa de los contribuyentes, en la plaza de la Concordia, para el gran mundo, conciertos de música pop que no sirven más que para promover la imagen publicitaria de algunos narcisistas de la política-espectáculo y para irritar aún más a las poblaciones afectadas por el neorracismo plebeyo. <<

[18] Jérôme Jaffré, «Ne pas se tromper sur M. Le Pen», Le Monde, 26/5/1987. <<

[19] Del nombre del general Georges Boulanger (1837-1891), que fue muy popular durante algún tiempo, y que la derecha antirrepublicana creyó capaz de provocar un cambio de régimen. Paradoja clásica: Boulanger fue una «criatura» de Clemenceau, entonces líder de la extrema izquierda en el Parlamento. <<

[20] Eric Roussel, Le Cas Le Pen, París, J. C. Lattés, 1985. <<

[21] A propósito de la operación de propaganda mediante la cual la izquierda trató de atribuir a los liberales franceses lo que correspondía al Próximo Oriente, los atentados antisemitas de la calle Copernic (3 de octubre de 1980) y de la calle Rosiers (9 de agosto de 1982), en París, me remito a un libro precedente, Le Terrorisme contre la démocratie (Pluriel, 1987), concretamente, el prólogo, pp. IX-XIII. ¿Se dan cuenta los socialistas franceses de que esta clase de calumnia es exactamente la que utilizaba Adolf Hitler para deshacerse de sus oponentes? <<

[22] Se reprochó al ministro del Interior haber embarcado con demasiada brutalidad a dichos malíes en el chárter. Pero ¿se atacaba en verdad el método, o más bien el mismo sentido y el principio de la expulsión? <<

[23] Le Monde, 19-20 de julio de 1987. <<

[24] Según el Washington Post, julio de 1987, «Burundi Tempers its Black Apartheid», por Blaine Harden (Washington Post Service, citado por el International Herald Tribune). <<

[25] A principios de septiembre de 1987, el dictador en ejercicio de Burundi fue derribado por un golpe de Estado cuando realzaba con su presencia la cima de la Francofonía en Montreal. Fue inmediatamente reemplazado por otro dictador, igualmente tutsi, naturalmente, pero, según parece, menos anticlerical. <<

[26] Cito su texto en Cómo terminan las democracias, capítulo XVIII. <<

[27] Jean-Christophe Rufín, Le Piège, J.-C. Lattés, 1985. <<

[28] André Glucksmann y Thierry Wolton, Silence, on tue, París, Grasset, 1986. <<

[29] «Angola’s civil war reduces a fertile district to hunger», por James Brooke. No hay guerra civil en Vietnam, y no obstante las autoridades, preocupadas, anunciaban en 1988 que siete millones de personas estaban amenazadas de hambre… sin contar el millón que había huido por mar. <<

[30] «Angola, admitting hunger crisis, asks urgent aid», por Blaine Harden (citado en el International Herald Tribune, 15-16 de agosto de 1987). <<

[31] Esta tesis fue recuperada más tarde —con argumentos mucho mejores, dicho sea de paso-por el economista británico Peter Bauer. <<

[32] A decir verdad, el sujeto cada vez es menos tabú a medida que la corrupción causa estragos más evidentes. Jacques de Barrin escribía en Le Monde del 21 de julio de 1987, a propósito de la reunión de la OUA (Organización de la Unidad Africana), en Addis-Abeba, las siguientes líneas, que hubieran sido difícilmente concebibles algunos años atrás en un diario de tendencia izquierdista: «Si la élite dirigente africana diera pruebas de un comportamiento responsable, no sería imposible creer en África. ¿Quién sabe si la suma de sus desfalcos no es del mismo orden de amplitud que el importe de la deuda exterior del continente, hoy día evaluada en doscientos mil millones de dólares?» A esta pregunta sacrílega los jefes de Estado africanos replican, en ocasión de la reunión del UNCTAD (United Nations Conference on Trade and Development) de agosto de 1987, reclamando… sanciones económicas contra… Sudáfrica (International Herald Tribune, 3 de agosto de 1987). Sobre las reformas agrarias, véase especialmente Guy Hermet, Sociologie de la construction démocratique, París, 1986, pp. 100 y siguientes. <<

[33] Véase Murray Gordon, L’Esclavage dans Le Monde arabe, trad. francesa, Robert Laffont, 1987, título original: Slavery in the Muslim World. Del mismo modo, las injusticias sociales y las desigualdades económicas sólo son condenadas cuando se observan en el seno de las sociedades occidentales o proceden de una opresión blanca. ¡Como si fuera el único tipo de opresión! Muy justamente, Jacques de Barrin observa en su artículo de Le Monde ya citado (21 de julio de 1987): «No hay, tal vez, en este continente, con excepción de Sudáfrica, sociedad con menos igualdad que la sociedad zambiana». Sin embargo, esta situación de injusticia, muy fácilmente comprobable para cualquiera, no ha impedido nunca al patrón vitalicio de Zambia, el inefable Kenneth Kaunda, el único jefe de Estado que conozco que llora a voluntad, construirse una reputación de héroe del Tercer Mundo, porque sabe echar con brío a las compañías multinacionales y a la Banca Mundial la culpa de los desastres debidos a su propia incapacidad, igual que en Tanzania ha hecho Julius Nyerere, durante veinte años y todavía más sistemáticamente calamitoso, mejor organizado en la confección metódica del desastre, tanto a corto como a largo plazo. <<

[34] Mientras Le Monde concedía importancia a la noticia convirtiéndola en un titular de primera página, el International Herald Tribune del mismo día no le concedía más que una gacetilla en la página 2 (sin mencionar la esclavitud), y dedicaba su primera página a los… ¡lazos entre Reagan y Sudáfrica! <<

[35] Allan Bloom, L’Âme désarmée, trad. francesa, Julliard, 1987, título original: The Closing ofthe American Mind (1987). <<

[36] La verità, in conclusione, é che si tratta di fenomeni identici. Il totalitarismo caratterizza e definisce il nazismo come lo stalinismo, senza alcuna differenza reale. Forse, mi sono espresso da estremista; forse l’ho detto con brutalità; ma ritengo sia giunto il momento di attenersi ai fatti e di rompere falsi ed inutili miti». Marzo de 1988. Actas del coloquio El estalinismo en la izquierda italiana. Véase la referencia más adelante, página 337. <<

[37] Le Point, 12 de octubre de 1987. <<

[38] No insisto sobre la negación de la existencia de los hornos crematorios por los sedicentes historiadores llamados revisionistas, sino para recordar que no se puede comparar la influencia de un puñado de fanáticos de cerebro desquiciado con la enorme destilación universal y cotidiana de la ideología marxista por millones de canales en el mundo entero. <<

[39] El Guardian (6 de febrero de 1986) llama con desprecio Internacional de la Resistencia «a strongly anticommunist organization». Como sus fundadores son Boukoski, Valladares y otros fugitivos del gulag, parece difícil, indeed, O dear, pedirles que sean procomunistas. <<

[40] 30 de septiembre de 1987. <<

[41] El otro sendero, Editorial El Barranco, 1986. El GRECE (Grupo de Civilización y de Estudio para la Civilización Europea, fundado en 1969), es un movimiento cultural que depende de la nueva derecha. <<

[42] Es el nombre de la corresponsal de Le Monde ya citada. <<

[43] 1944. Y 1947 para la traducción francesa. Libro redactado en los Estados Unidos durante la guerra y cuyo título original es The Omnipotent Government, The Rise of the Total State and the Total War. <<

[44] Le Nouvel Observateur, 16 de octubre de 1987. <<

[45] La Faute à Rousseau, Seuil, 1985. <<

[46] Diario 16, 25 de marzo de 1987. <<

[47] L’Humanité del 21 de julio de 1988 califica de «pétainista» al Consejo Constitucional por haber tomado una decisión que no gusta al partido comunista. <<

[48] El subrayado es mío. Citado por Jeannine Verdès-Leroux en Le Réveil des somnambules, París, Fayard-Minuit, 1987. <<

[49] Diario 16, 1.º de noviembre de 1987. <<

[50] Moliere, El atolondrado. <<

[51] François Mitterrand, Politique, París, Fayard, 1977. <<

[52] 5 de julio de 1981. Emisión muy escuchada de la emisora de radio Europa n.º 1. Una veintena de periodistas interrogan todos los domingos por la tarde a una personalidad política durante aproximadamente una hora. <<

[53] 23 de noviembre de 1984. <<

[54] Aquí, en cambio, la cifra es un poco baja. Se está de acuerdo, en general, sobre 60 millones de víctimas. <<

[55] «Apostrophes», en Antena 2, el 30 de octubre de 1987. <<

[56] Doctor Willy Rozenbaum, encargado del servicio del SIDA en el hospital Claude Bernard de París. <<

[57] Observateur de la OCDE, núm. 143, noviembre de 1986. <<

[58] Pensées diverses, CLV. <<

[59] El Antiguo Régimen y la Revolución, libro 1.º, capítulo III. <<

[60] Véase el excelente libro (antología de textos, relato, bibliografía y comentarios) de Éric Vibart, Tahiti, naissance d’unparadis au siècle des Lumières, 1767-1797, Bruselas, Éditions Complexe, 1987. <<

[61] Estas dos obras han sido reagrupadas parcialmente y traducidas al francés bajo el título Moeurs et sexualité en Océanie, 1963. <<

[62] «Saudi Justice Looks Savage to Us, but it Works», Washington Post, 19 de enero de 1987. <<

[63] So they cut off a few hands of guilty people and avoid horrors like rape and murder. Can you really say that makes them barbarie and us civilized?» Es admirable que esas opiniones sean profesadas por intelectuales que, en su país, consideran un atentado a los derechos del hombre que la policía proceda a controles de identidad… de una identidad «no cultural», es cierto. <<

[64] «… a society that believes in the sanctity of the family, a religious, moral people». <<

[65] Bernard Lewis, «The State of Middle-Eastern Studies», The American Scholar, verano de 1979, y «The Question of Orientalism», The New York Review of Books, 24 de junio de 1982. Estos dos textos han sido traducidos al francés en Le Retour de l’Islam, Gallimard, 1985, compendio de estudios y de conferencias del autor. <<

[66] Hermann editor de la edición original francesa, 1984; en inglés The Buming Forest, Essays on Chínese Culture and Politics, Holt, Rinehart and Winston, 1987. <<

[67] En la revista mensual Chronicles, julio de 1987. <<

[68] París, Éditions Champ Libre. <<

[69] Obra de Simón Leys aparecida en 1974. Nuevas ediciones aumentadas: Robert Laffont, 1976 y 1978. <<

[70] The Making of the Soviet System, Nueva York, Pantheon Books, 1985; traducción francesa, Gallimard, 1987. <<

[71] Pierre Gallois, La Guerre des cent seondes. París. Fayard, 1985. <<

[72] París, 1970; traducción inglesa, Without Marx or Jesús, 1971. <<

[73] Habitualmente designado con las siglas TTAPS, iniciales de sus cinco autores: Turco, Toon, Ackerman, Pollack, Sagan. <<

[74] «It’s (TTAPS) an absolutely atrocious piece of science, but I quite despair to set the public record straight. I think I am going to chicken out on this one: who wants to be accused of being in favor of nuclear war?» Citado por Russell Seitz, «In from the Cold», The National Interest, otoño de 1986. <<

[75] «On scientific grounds the global apocalyptic conclusions of the initial nuclear winter hypothesis can now be relegated to a vanishingly low level of probability». <<

[76] «Nowhere is this more evident than in the recent literature on Nuclear Winter, research which has become notorious for its lack of scientific integrity».<<

[77] Scientific Committee on Problems of the Environment. <<

[78] La Guerre de cent secondes, op. cit. <<

[79] Game Plan, a Geostrategic Framework for the Conduct of the US-Soviet Contest. The Atlantic Monthly Press, 1986. «If the initiative is technically unfeasible, economically ruinous and militarily easy to counter, it is unclear why the SDI would still be destabilizing and why the Soviets should object to America’s embarking on such a self defeating enterprise; and even less clear why the Soviets would then follow suit in reproducing such an undesirable thing for themselves». <<

[80] «The War against Star Wars», Commentary, diciembre de 1984. <<

[81] Véase Angelo M. Codevilla, «How Eminent Physicists Have Lent their Names to a Politicized Report on Strategic Defense», Commentary, septiembre de 1987. <<

[82] Hoy está de moda en Francia no emplear la palabra «sabio», que, según parece, resulta anticuada. Se emplea, pues «hombre de ciencia» o «científico». La dificultad consiste en que así se renuncia a diferenciar el sustantivo del adjetivo, lo que crea un inconveniente tanto para la claridad como para la eufonía. Curiosa manera de defender la lengua francesa, que consiste en no desperdiciar nunca una ocasión de empobrecerla. El inglés, por su parte, conserva la distinción entre el nombre (scientist) y el adjetivo (scientific). <<

[83] Wohlstetter ha escrito numerosos estudios criticando la disuasión pura. Se encontrará, particularmente, un buen enfoque de sus tesis en «Swords without Shields», The National Interest, verano de 1987. <<

[84] Mésopotamie, París, Gallimard, 1987. <<

[85] «Triple secreto», porque el cuneiforme servía de escritura a tres lenguas, tal como se descubrió paulatinamente: el antiguo persa, el elamita y el acadio. <<

[86] Gallimard. La edición original inglesa es de 1958. <<

[87] La Formation du système soviétique, op. cit., introducción. <<

[88] El texto de la Literaturnaya Gazeta, un debate entre un historiador y un filósofo, ha sido resumido por Le Monde del 2 de octubre de 1987. <<

[89] Inventarío hecho por Christian Jelen y Thierry Wolton en L’Occident des dissidents, París, Stock, 1979. <<

[90] La Gauche et la Révolution francaise au milieu du XIXe siécle, Hachette, 1986. <<

[91] Pero lo trágico, para los inquisidores, es que tras el estudio que les consagró Furet, fueron reeditados. Augustin Cochin, L’Esprit du jacobinisme, París, PUF, 1979, prefacio de Jean Baechler. <<

[92] Citado por Christian Jelen, L’Aveuglement, les socialistes et la naissance du mythe Soviétique, París, Flammarion, 1984, p. 56. Edición española: La ceguera voluntaria. Los socialistas y el nacimiento del mito soviético, Barcelona, Planeta, 1985, p. 50. <<

[93] Le Bolchevisme et le Jacobinisme, París, Librería de «L’Humanité», 1920. <<

[94] Reynald Secher, Le Génocide franco-frangais, la Vendée «vengé», París, PUF, 1986. <<

[95] Esta anécdota es referida por uno de los participantes en el coloquio, Jacques Rupnik, «Glasnost: Gorbatchev’s Profs; a New Generation of American Academics is Re-writing Soviet History», The New Republic, 7 de diciembre de 1987. <<

[96] Citado por Tocqueville, El Antiguo Régimen y la Revolución, libro I, capítulo II. <<

[97] En La Storia come pensiero e come azione, 1938 (La Historia como pensamiento y como acción). <<

[98] L’Humanité, 10 de septiembre de 1987. <<

[99] Los fidjianos étnicos representaban el 43% de la población. En la fecha en que repaso mi texto (junio de 1988), todavía no se han celebrado elecciones. <<

[100] «On my short excursión to the West, I found that, as a rule minds were already made up on these issues. People who endorsed the NATO decisión to deploy new missiles welcomed my observations about Kremlin thinking as ammunition for their team, while opponents dismissed what I had to say about Soviet perceptions of the West as irrelevant: I felt distinctly uneasy with how quickly I was categorized in any discussion of this subject. It was a matter of choosing up sides in a domestic political debate, and what relation all this bore to Soviet intentions hardly seemed to matter».<<

[101] Aux chrétiens dans les temps d’épreuves, Harmonie, 1,6. <<

[102] La République des camarades, 1914. (Robert de Jouvenel era tío de Bertrand de Jouvenel). <<

[103] John Milton escribió sin duda el más antiguo folleto en favor de la libertad de la prensa (en el sentido literal de «prensa»): el Discurso por la libertad de imprimir sin autorización ni censura (1644). <<

[104] «Congress shall make no law respecting an establishment of religion, or prohibiting the free exercise thereof; or abridging the freedom of speech, or of the press; or the right of the people peacebly to assemble, and to petition the Government for a redress of grievances». <<

[105] Pierre-Paul Royer-Collard (1763-1845), filósofo, escritor, político, formó parte con Francois Guizot, Prosper de Barante y Charles de Rémusat, del grupo liberal llamado «los doctrinarios». <<

[106] Chateaubriand, al cual se atribuyen a menudo, equivocadamente, ideas reaccionarias, defendió también, con entusiasmo, la libertad de prensa, bajo la Restauración, contra toda forma de censura y aceptando el riesgo del abuso. Pero se observará que él considera también la prensa, igual que los demás autores que he citado, únicamente como portadora de opinión, no de información, cuando escribe, por ejemplo, en 1824 (Diario de debates, 21 de junio): «Sin duda los periódicos no son nada en comparación con el poder social, con el trono, con la tribuna. No son, siquiera, cosas comparables; son de dos órdenes diferentes. Nadie ha pensado nunca en considerar un periódico como un poder político; es un escrito que expresa una opinión; y si esa opinión reúne en ella la pluralidad de hombres ilustrados y considerados, puede convertirse en un gran poder. Es el poder de la verdad; no hay nada tan elevado en el orden moral, no hay nada que no desaparezca ante esa fuerza eterna». Chateaubriand cae aquí en el pecadillo de los periodistas de todos los tiempos al confundir, algo apresuradamente, libertad de opinión y expresión de una verdad eterna, como si tener licencia para imprimir lo que se quiera y tener siempre razón fueran una sola e idéntica cosa. Pero resulta ser sorprendentemente moderno al esbozar los contornos del «cuarto poder» y cuando plantea, en otro pasaje, la cuestión del «gobierno por los medios de comunicación». «Pero —se dice— si los ministros deben retirarse ante los clamores de cinco o seis periódicos, ¿Francia está, pues, gobernada por los periódicos? »La misma Inglaterra, ¿está, acaso, gobernada por los periódicos, por cierto mucho más libres que en Francia? Y, no obstante, los ministros ingleses se retiran cuando las hojas públicas de diversos principios políticos se ponen de acuerdo sobre la incapacidad ministerial. El vicio radical de este eterno razonamiento de los enemigos de la libertad de prensa, consiste en tomar a los periódicos por la causa de la opinión, cuando no son más que el efecto de la misma. Tened ministros hábiles, monárquicos y nacionales, y veréis si los periódicos consiguen hacerlos impopulares: muy al contrario, tales periódicos se volverían ellos mismos impopulares al atacar a hombres que el público había tomado bajo su protección». Dejando a un lado la querella sin base jurídica de la responsabilidad ante los periódicos de un gobierno elegido, convengamos en que Chateaubriand vio a la perfección el circuito democrático de la opinión, yendo de la expresada por la prensa a la opinión pública e inversamente; alimentándose mutuamente la una a la otra para hacer presión las dos juntas o por separado sobre los dirigentes. No obstante, continúa tratándose únicamente de opinión, nunca de información, en esta vibrante descripción del naciente papel y de la fuerza futura de la prensa, a la vez espejo y poder. <<

[107] «Gorbachev Assails Crimes of Stalin, Lauds Khrushchev», New York Times. «Gorbachev Bends to Hard-Diners by Hedging his Attack on Stalin», Wall Street Journal. <<

[108] Girard de Charbonnières, La Plus evitable de toutes les guerres, París, Éditions Albatros, 1985. <<

[109] Entonces llamado New York Herald Tribune y no todavía International Herald Tribune. <<

[110] Reproducido en el International Herald Tribune del 12 de mayo de 1986, en la rúbrica «75 and 50 year ago». «1936: Russia Progresses. PARÍS. Rufus Woods, American newspaper publisher, passed through París (on May 12) after two months of scouting in Germany and Russia. “Russia is finding itself”, he said “by a process of evolution away from Communism toward Socialism, with the adoption of the production methods of capitalism. The fetish of equal wages has been given up in favor of a graduated scale such as exists in capitalistic countries. Secondly, payment to laborers is made on a piece basis for goods actually produced; this has boomed production. Thirdly, the Soviet Union has given up its attempt to control all distribution and now sanctions public markets in competition with government markets. All this is putting Russia on its feet with a solidity never dreamed of.”» ¡Hay para creerse en plena perestroika de Gorbachov! <<

[111] No se debe confundir con John Connally, futuro gobernador de Texas y secretario del Tesoro con el presidente Nixon. El citado comentario del senador Tom Connally, apareció en el New York Times del 25 de mayo de 1943. <<

[112] Paris-Match, 15 de julio. <<

[113] Bullitt fue embajador en la Unión Soviética de 1933 a 1936, y luego en Francia, de 1936 a 1940, entre otros cargos. <<

[114] The Times, 30 de enero de 1987. <<

[115] 31 de enero de 1987. <<

[116] The Sunday Times, 1.º de febrero de 1987. <<

[117] Ciertas fórmulas de aspecto puramente descriptivo esconden una parcialidad bajo su aparente neutralidad. Por ejemplo, no he oído nunca al servicio internacional de la BBC llamar a los contras nicaragüenses de otro modo que«los rebeldes contras apoyados por la CÍA» («the CIA backed contra rebels»). Pero la BBC no llama nunca al gobierno sandinista «los dictadores de Managua sostenidos por la Unión Soviética», fórmula que, sin embargo, no sería más que el reflejo puro y simple de la realidad. Todas las informaciones del «BBC World Service» sobre Nicaragua que yo he oído durante años tendían a insinuar en el espíritu del oyente que la Contra era un fenómeno totalmente artificial, suscitado exclusivamente por la CÍA, y sin ningún apoyo popular en el país, lo que constituye una mentira manifiesta. Todo corresponsal honrado podía, sin dificultad, comprobar la impopularidad del régimen sandinista en numerosos indicios: la avalancha de nicaragüenses pidiendo asilo político en los países vecinos, aunque no fuera para unirse a la Contra; el hecho de que incluso los soldados sandinistas capturados por la Contra, y liberados tras los acuerdos del alto el fuego, han rehusado regresar a Nicaragua; la manifestación de más de 10 000 personas en Managua, a principios de 1988, reclamando la democratización; la presencia en las cárceles sandinistas, todavía a finales de 1987, de unos 9000 presos políticos, de los que menos de 1000 eran antiguos somozistas, etc. Pese a estos hechos elocuentes, el corresponsal de la BBC en Managua afirmaba aún, el 3 de abril de 1988, en el curso de la emisión «News Desk», que los jefes de la Contra no tenían ninguna representatividad y simplemente temían perder los «confortables salarios que les paga la CIA» («their handsome CIA salaries»). Lo que yo me pregunto es si el handsome salary de ese corresponsal está justificado. <<

[118] El informe del Institute for Applied Economics ha sido sintetizado especialmente en el Wall Street Journal, del 7 de marzo de 1984: Holmes M. Brown: «How Televisión Reported the U.S. Recovery». <<

[119] A la vez redactor-jefe y presentador. <<

[120] «Televisión news is a tool of democracy… News is a light on the horizon… a beacon that helps citizens of a democracy». <<

[121] Estas dos frases fueron pronunciadas por los señores Rocard y Barre en sus alocuciones respectivas en el coloquio «Medios de comunicación, poderes y democracia», organizado en París en mayo de 1987 por el Instituto Internacional de Geopolítica, presidido por Marie-France Garaud. <<

[122] «This is a case of prior book restraint triggered by powerful news organizations that are quick to denounce prior restraint by government». «The Book Criticizes Giants, so Publication is in Doubt» (Un libro crítico de los gigantes: la publicación es, pues, dudosa), New York Times, citado en International Herald Tribune (28 de octubre de 1986). <<

[123] «Mr. Reagan has chosen not to offend the rich, the powerful and the organized in his budget cuts, but to take on the weak, with a budget which falls most heavily on the poor», New York Times, 23 de abril de 1982. <<

[124] Citado por Newsweek, 19 de abril de 1982. «Stands for an anti-European and anti-Western position of German Unity».<<

[125] «The basically leftist orientation of younger Germans was probably fashioned by Der Spiegel», ibid. <<

[126] «… the dawn of a new era of censorship, of manipulation of the press, of considering the media the handmaiden of government», citado por Leonard S. Sussman, «Press versus Government», Freedom at Issue, mayo-junio de 1984. <<

[127] «The whole character of the relationship between governor and governed is affected». <<

[128] «What would have happened if color television on the first night of the Grenada intervention had shown the blasted hospital, dead bodies, and perhaps a wounded mental patient wandering through the rubble? Would that single picture have proved that the political basis for the American intervention —eliminating a Cuban/Soviet beachhead— had been erroneously conceived? That the murder, days earlier, of the prime minister and civilians had been justified? That Americans should pull out before the murderers were apprehended? That Grenadians would have been better off if no American soldier landed?» (artículo citado). Leonard R. Sussman dirigió desde 1967 hasta 1988 Freedom House, institución especializada en el estudio de los problemas de prensa y de información en el mundo. <<

[129] Antoine Porot, Manuel alphabétique de psychiatrie, París, PUF, 1969. <<

[130] En las elecciones llamadas «administrativas» del 29 y 30 de mayo de 1988. <<

[131] Desde 1968 hasta 1988, el voto comunista en Francia evoluciona de la siguiente manera: en las elecciones legislativas de 1968 el Partido Comunista obtiene 4 435 337 votos; en las de 1973 (es decir, un año después de la constitución de la Unión de la Izquierda y la firma del Programa Común socialista-comunista), 5 085 108; en las elecciones legislativas de 1978, 5 791 525 (una parte de esta progresión es debida al aumento del número de electores, sobre todo de los más jóvenes, porque el presidente Giscard d’Estaing había rebajado, de 21 años a 18 años la edad del derecho a voto). Los años de la Unión de la Izquierda, aprovecharon pues, indudablemente, al Partido Comunista francés, y no solamente al Partido Socialista. Rota en 1977 por voluntad del Partido Comunista, la Unión experimentó una breve resurrección entre las dos vueltas de las legislativas de 1978, y luego se hundió definitivamente. Incluso cuando Mitterrand incluyó ministros comunistas en su gobierno socialista de 1981 hasta 1984, ya no habrá Programa Común. La hostilidad comunista al Partido Socialista será, ya violenta y declarada, ya (durante el período de presencia de cuatro ministros comunistas en los gobiernos Mauroy, entre 1981 y 1984), silenciosa y solapada. En la elección presidencial de 1981, el voto comunista, después de tres años de ruptura y de polémicas, desciende a 4 003 025, y, en las legislativas de 1986, a 2 663 734. En fin, en la presidencial de 1988, tiene 2 055 995 votos, para remontar, ligeramente, hasta 2 675 040 en las legislativas del 5 de junio. El hundimiento del voto comunista en Francia empieza después del entierro de la Unión de la Izquierda y del Programa Común. Prosigue incluso durante los años en que el Partido Comunista entra en un gobierno socialista como socio complementario y donde, ¡colmo de la mala suerte!, comparte por consiguiente el descrédito en que incurre la política seguida por ese gobierno, el cual se sumergió, en 1984, en un abismo de impopularidad, igual que el mismo presidente François Mitterrand. Escapando de esa trampa en julio de 1984 y reemprendiendo sus ataques contra los socialistas, el PCF no pudo reparar, pese a ello, sus pérdidas. Se convirtió en un partido marginal. Así, en todos los casos, como se ve, el gran reflujo del comunismo europeo, en el curso de la década de los ochenta, se desarrolla en Francia, como en otras partes, independientemente del contexto; un contexto que, a su vez, está en cambio perpetuo. <<

[132] Wall Street Journal, 19 de junio de 1984 (edición europea). <<

[133] Los amantes de la literatura cómica pueden acudir a la antología hecha por Survey en su número especial sobre Polonia, verano de 1983 (XXVI, 3). <<

[134] «It is far wiser and more tactful to let the Russians make their own criticism of their society than to judge them and pontificate as an outsider with different assumptions and outlook». Citado por Andrew Nagorski, Reluctant Farewell, p. 48. Muchos corresponsales, como Nagorski, encontraban los puntos de vista de Binyon perfectamente aceptables en Moscú, cuando habrían rechazado en otro lugar esa justificación de su trabajo comprendido como simple eco de una prensa controlada por el Estado. <<

[135] Yo mismo aludí a ello en Cómo terminan las democracias. <<

[136] Bharat Bhushan, «Aids, a Soviet Propaganda Tool», The Times of India, 19 de noviembre de 1986. <<

[137] L’Express, 7 junio 1971; citado en Ideas de nuestro tiempo, París, Robert Laffont, 1972. <<

[138] Mi vida en Alemania, antes y después de 1933; traducción francesa de Monique Lebedel, París, 1988; edición original en alemán, Stuttgart, 1986. <<

[139] Página 21, nota 1. <<

[140] Fundación Saint-Simón, París, Fayard, 1985. <<

[141] «La scuola in tutti i suoi gradi e in tutti i suoi insegnamenti educhi la gioventù italiana a comprendere il clima storico della rivoluzione», Benito Mussolini (5 de diciembre de 1925). <<

[142] «Vi sono nel mondo e nel nostro paese un complesso di idee che rappresentano quanto di più avanzato il movimento progressista e rivoluzionario ha prodotto da mezzo secólo: abbiamo interesse che esse si affermino nella scuola», Giorgio Bini. <<

[143] Les lieux de mémoire, 4 volúmenes bajo la dirección de Pierre Nora, París, Gallimard. En el tomo I (1984), Pierre Nora, Lavisse, instituteur national; le petit Lavisse, évangile de la République. En Lavisse, escribe Nora, «el deber patriótico es el corolario de la libertad republicana. La historia de Francia no es, en muchos aspectos, más que un repertorio de ejemplos para el manual de instrucción cívica». En otras palabras, es lo contrario de una iniciación al conocimiento histórico. Por digno de alabanza que sea inculcar a los niños el culto a la patria y a la libertad, hacerlo enseñando la historia o la literatura es internarse en un mal camino, pues equivale a legitimar el principio de que el maestro tiene derecho a servirse de la ciencia para adoctrinar, principio susceptible luego a prestarse a otras utilizaciones mucho más nefastas. O se enseña o se predica, pero no se pueden hacer ambas cosas a la vez. <<

[144] Dejo contar a Michel Heller lo que fue la revuelta del Cronstadt (Michel Heller, Soixante-dix ans qui ébranlèrent le monde, 1988, Calmann-Lévy): «Los disturbios obreros de Petrogrado causan una profunda impresión a los marineros de la Flota del Báltico, “orgullo y florón de la Revolución”. El movimiento llega pronto a los acorazados Petropavlosk y Sebastopol que, en 1917, eran los grandes focos del bolchevismo en la marina. El 28 de febrero, la tripulación del Petropavlosk redacta una resolución, formulando las nuevas reivindicaciones de los marinos del Báltico. El 1.º de marzo, es adoptada en una reunión que agrupa a toda la guarnición de Cronstadt. Los marineros del Báltico exigen, en primer lugar, la reelección de los soviets, la libertad de palabra y de prensa para los obreros y campesinos, la libertad de reunión, el derecho a fundar sindicatos y asociaciones campesinas. Reivindican para los campesinos el “derecho absoluto a trabajar la tierra, como quieran, y a poseer ganado… sin estar obligados a arrendarse”. En su resolución-programa, titulado Por qué luchamos, los marineros de Cronstadt escriben: “Al efectuar la revolución de octubre, la clase obrera esperaba obtener su libertad. Pero el resultado es un avasallamiento mayor de la persona humana… Cada vez ha ido resultando más claro —y ello es hoy una evidencia-que el partido comunista ruso no es el defensor de los trabajadores que pretende ser, que sus intereses le son ajenos y que, una vez llegado al poder, no piensa más que en conservarlo.” La consigna de los marineros: “Soviets sin comunistas” no permite ninguna duda: no se sublevan contra el poder soviético, sino contra el dominio del partido comunista. Esto es lo que hace que la revuelta de Cronstadt sea tan peligrosa para los bolcheviques. La revuelta de Cronstadt, declara Lenin en el X Congreso del partido en marzo de 1921, es más peligrosa para nosotros que Denikin, Yudenitch y Koltchak juntos. El 2 de marzo, Lenin y Trotski firman una orden denunciando el movimiento de Cronstadt como una “conspiración blanca”. 50 000 hombres son destinados para aplastar la revuelta, bajo el mando de Tukhatchevski. En la noche del 17 al 18 de marzo, las unidades rojas irrumpen en la fortaleza, defendida por 5000 marinos. El 18 de marzo, todos los periódicos soviéticos consagran su primera página al quincuagésimo aniversario de la Comuna de París y fustigan a coro a “los verdugos sanguinarios, Thiers y Gallifet”. En la rendida fortaleza, se fusila a los marinos insurgentes. Los supervivientes son llevados al continente y enviados a campos de concentración en Arkhangelsk y Kholmogory». <<

[145] En el original, el poema se titulaba, por otra parte, Teodoro. Pero los Duviols cambiaron el título por A Roosevelt para que todo estuviera más claro. <<

[146] Por J.-P. Cendron, C.-D. Echaudemaison y M.-C. Lagrange, Fernand Nathan, 1981. <<

[147] Por M. y S. Chaulanges, Librairie Delagrave, 1975. <<

[148] «No al libro di testo! E’pagato dai lavoratori anche quando l’acquista lo stato. E’un affare di miliardi per l’industria editoriale. E’imposto dalla scuola dei padroni. Promuove un tipo di istruzione che non serve al lavoratori. Favorisce una cultura squalificata e classista». (Il libro di testo nella scuola elementare, media, superiore, suplemento núm. 8, septiembre 1976, de «Dimensione A»). <<

[149] «Occorre una scuola nella quale si cerchi di abbattere gli ostacoli alla formazione di personalità rivoluzionarie», «Il libro di testo: pedagogía e política», Calendario del Popolo, enero de 1972. Numerosos artículos de la prensa y de las revistas comunistas se mueven en el mismo sentido. <<

[150] «Hitler invade successivamente l’Austria, la Cecoslovacchia e la Polonia. Le nazioni democratiche, che avevano cercato di evitare lo scontro, sono costrette ad entrare in guerra. Mussolini, alleato della Germania, prevedendo una vittoria lampo dei Tedeschi, dichiara guerra alla Francia e all’Inghilterra (1940). Le armate tedesche invadono il Belgio, per aggirare le fortificazioni francesi e colpire la Francia alle spalle. Occupati i Paesi Bassi e una parte della Francia, la Germania si rivolge contro la Russia che è costretta ad entrare in guerra». <<

[151] PUF, 1983. Con numerosos ejemplos, Bonilauri demuestra que los objetivos dominantes de los manuales de enseñanza son: 1) «Embellecer el sovietismo», 2) «Condenar el liberalismo»; 3) «Corromper el pluralismo». <<

[152] Se las encontrará, por lo que concierne a Francia, en libros que, hacia 1982-1985, empezaron a aparecer para denunciar los estragos de esta chifladura y que, como prueba de la inquietud de la sociedad civil, fueron por lo general éxitos editoriales. Hay que recordar, entre los más sonados, dos libros de Mauricce Maschino, Vuestros hijos ya no me interesan y ¿Queréis hijos idiotas?, así como el sabroso Pez de colores en el peral, de J.-P. Despin y M.-C. Bartholy. Y, de J. C. Milner, una abrumadora requisitoria: De la escuela. Y también, de Jacqueline Romilly, La enseñanza en peligro, 1984. <<

[153] El teórico oficial de esta teoría es Pierre Bourdieu, especialmente en Los herederos (1964) y La reproducción (1970). Para aquilatar la fragilidad de la base sociológica de esta tesis, y lo arbitrario de su abstracción ideológica, se leerá, no sin asombro, a Philippe Beneton quien, en La plaga del bien (1983) muestra (capítulos III y IV) la indigencia científica y el soporte científico ridículo de una pretendida «encuesta» de Bourdieu en un instituto de segunda enseñanza de París. Raymond Boudon ya había demostrado la impotencia de este dogmatismo para establecer los hechos en La desigualdad de oportunidades, la movilidad social en las sociedades industriales (1973). <<

[154] Laurent Schwartz, Pour sauver L’Université, 1984. Para ilustrar esta manera de promover la igualdad, voy a mencionar un hecho del que he podido tener conocimiento directo. Habiéndose beneficiado de la «renovación de los colegios», un alumno llega a la segunda enseñanza a los diecisiete años sin casi saber leer ni escribir. Una parte del consejo de la clase, a final de año, propone hacerle repetir el curso y orientarle el año siguiente hacia una formación profesional. Otra parte, mayoritaria y que logra imponerse, decide hacerle pasar a primer curso literario (sic) «para no añadir un traumatismo psicológico a su handicap escolar». Esto explica en qué estima tiene la FEN los últimos cursos literarios, llamados terminales A. Para apreciar mejor la nociva imbecilidad, relativa al instituto San Carlos, hay que saber que las terminales C (científicas) son las únicas bien consideradas y que las A son verdaderos vertederos. De ahí la ausencia de khagne competitiva (preparación para la Escuela Normal Superior de Letras) en Marsella. Los buenos «literarios» se van, pues, a París, desde la clase terminal. Tras lo cual, la FEN denuncia la «doble desigualdad» científica-literaria y París-Provincia, cuando hace todo lo que puede para agravar una y otra. <<

[155] Paul Camous; en La vie publique, septiembre de 1987. <<

[156] A partir de 1987, el «efecto Gorbachov» atenúa la percepción de la agresividad soviética tanto en los jóvenes como en los mayores. El cambio de estilo de la diplomacia soviética consigue un éxito donde la falsificación escolar había fracasado en parte. <<

[157] Sobre esta «revolución cultural», notada en 1987 en ocasión del coloquio antes mencionado, véase, desde 1982, la encuesta de Branko Lazitch y Christian Jelen en L’Express del 25 de junio de 1982. <<

[158] Citado por el Wall Street Journal, 14 de mayo de 1982. «Karl Marx Goes to College», por Arnold Beichman. <<

[159] «Radical ideas, have spread and deepened. Nowhere is this more true than in the colleges and the universities. There are hundreds, perhaps thousands, of openly socialist professors».<<

[160] He aquí la cita completa en inglés tomada de la sección «50 Years ago» del International Herald Tribune (2 de abril de 1987): «“Britain should disarm, and if Hitler marched his troops into this country when we were undefended, they should be welcomed like tourists and greeted in a friendly way.” So declared Bertrand Russell, writer and philosopher, in an address (on April) at Petersfield, Hampshite, on the practical application of pacifism. Concerning the hospitable welcome, Earl Russell explained: “It would take the starch out of them and they might find some interest in our way of living.” If the British government stopped arming and turned pacifist, this country would not be invaded and would be as safe as Denmark, according to Russell, who contended that no country ever attacked another country unless it was afraid of the other’s armaments. As a step toward worldpeace, he proposed dismemberment of the British Empire».
Traduzco el final del pasaje: «Si el gobierno británico dejara de armarse y se volviera pacifista, nuestro país no sería invadido y estaría tan seguro como Dinamarca —buen ejemplo, por cierto, como los acontecimientos demostrarán en 1940—, según Russell, que sostiene que ningún país ha atacado nunca a otro, excepto si temía al armamento de este último. Como primer paso hacia la paz mundial, ha propuesto el desmembramiento del Imperio británico». <<

[161] «Mi país primero; tenga o no razón». <<

[162] Citas extraídas de L’Allemagne, un enjeu pour l’Europe, de Renata Fritsch-Bournazel, prólogo de Alfred Grosser, Éditions Complexe, 1987. <<

[163] 30 de octubre de 1951. <<

[164] Nueva York, Harper and Row, 1987. <<

[165] Pierre Daix, J’ai cru au matin, París, Robert Laffont, 1976. <<

[166] Citado por Jeannine Verdés-Leroux en Le réveil des somnambules, París, Fayard-Minuít, 1987. <<

[167] Citado por Jean-Marie Doménach, La propagande du partit socialista, 1987. <<

[168] «Fantasma. Escenario imaginario en que el sujeto está presente y que figura, de manera más o menos deformada por los procesos defensivos, el cumplimiento de un deseo y, en última instancia, de un deseo inconsciente», Vocabulaire de la psychanalyse de J. Laplanche y J.-B. Pontalis, PUF, 1967. <<

[169] «It was at this point that he said in words I have never forgotten, “As for them, the more innocent they are, the more they deserve to be shot.” I was so taken aback that I thought I had misheard him. “What are you saying?” I asked. He calmly repeated: “The more innocent they are, the more they deserve to be shot.” (“Je mehr unschuldig, desto mehr verdienen sie erschossen zu werden.”). I was stunned by his words. “Why? Why?” I exclaimed. All he did was smile at me in nervous sort of way. I waited, but he said nothing even after I repeated my question. I got up, went into the next room, and fetched his hat and coat. When I returned, he was still sitting in his chair, holding a drink in his hand. When he saw me with his hat and coat, he looked surprised. He put his glass down, rose, and with a sickly smile took his hat and coat and left. Neither of us said a word. I never saw him again». <<

[170] Dirección de vigilancia del territorio, servicio de contraespionaje interno, equivalente al FBI americano o al MI5 británico. <<

[171] Maud y Octave Mannoni, citados en Le Monde, 2 de septiembre de 1986. <<

[172] Alien Weinstein, The Hiss-Chambers Case, 1978. <<

[173] Gianfranco Pancino obtuvo la libertad provisional el 13 de enero de 1988, al cabo de tres semanas. <<

[174] Commentaire, primavera de 1980, núm. 9. La cita de Herzen se encuentra en: Isaiah Berlín, Les penseurs russes, trad. fr. Albin Michel, 1984. <<

[175] Sabino Acquaviva, Guerriglia e guerra rivoluzionaria in Italia, Milán, Rizzoli, 1978. <<

[176] Noticia aparecida en la Neue Zurcher Zeitung (14 de agosto de 1987). El diario suizo precisa que los medios de comunicación brasileños reproducen ampliamente las declaraciones de Boff, lo que suscita en la revista mensual francesa Est et Ouest (septiembre de 1987) este comentario: «Es el momento de preguntarse por qué los otros medios de comunicación occidentales, sobre todo europeos (que nosotros sepamos) las han silenciado. Cuando Boff aparece como una víctima de la “represión” del Vaticano, merece ocupar la actualidad. Pero cuando el mismo Boff se presenta como un ensalzador de la Unión Soviética y se va de la lengua, revelando ese aspecto capital de la teología de la liberación, entonces se le ignora». <<

[177] «The bishops who drafted the recent pastoral letter on the American economy could usefully spend a few weeks touring Europe. They might learn there what they obviously did not learn here: social conscience is not enough; it won’t produce economic justice. The principies the bishops admire most are enshrined in Europe and, partially as a result, Europe’s economy is mired in massive unemployment». <<

[178] «Gorbatchev Surely Grinned at the Pope’s Parallelism», International Herald Tribune, 16 de marzo de 1988. <<

[179] «At independence, about 90 percent of the colony’s 250 000 Portuguese settlers left, many to neighboring South África. The new leaders made virtually no effort to win back this bitter exile groupe.
«When independence came, 93 percent of Mozambique’s African population was illiterate. The departure of the Portuguese led to economic collapse. Into the vacuum stepped Frelimo, a guerrilla group with a visión of a Marxist Mozambique that one day would become the first African member of Comecon, the Soviet-dominated, East bloc economic unión.
»Portuguese-speaking Frelimo operatives, who generally had a better command of Marxism than of local tribal languages, brought revolution to a conservative countryside.
»Churches were closed and traditional leaders dismissed. Abandoned plantations were turned into East Europeanstyle state farms. Hundreds of thousands of peasants were herded from ancestral lands into 1400 communal villages.
»Dissenters were sent to detention camps euphemistically termed “reeducation centers”, where beatings and starvation were frequent. Renamo rebels, preying upon disenchantment with the government, raided them for recruits».
<<

[180] Teresa Toranska, «ONI»… op cit. <<

[181] Véase Darquier. <<

[182] Pierre Daix, J’ai cru au matin, Laffont, 1976. <<

[183] La corde raide y Hiéroglyphes, trad. fr. 1953 y 1955; nueva edición «Pluriel», 1978. <<

[184] Gallimard, 1982. <<

[185] Julliard, 1987. <<

[186] Laffont, 1979. <<

[187] Traducción francesa: La Bombe P, Fayard, 1972. Sobre la falta de seriedad de estas tesis, véase Jean-Claude Chesnais, La revancha del Tercer Mundo, París, Laffont, 1987 (traducción española, Barcelona, Planeta, 1988), y, del mismo, La transition démographique, París, PUF, 1986. <<

[188] París, Éditions de Minuit. <<

[189] 1.º de mayo de 1988. <<

[190] Traducción francesa: La peinture de la vie moderne, Paris dans l’art de Manet et ses successeurs, Knopf. M. Clark emigró luego a California. <<

[191] New York Review of Books, 15 de agosto de 1985. <<

[192] «Cultural apparatchiks like Mrs. Cachin have a state machineset up for the purpose, which never stops vomiting retrospectives. The animus informing Mrs. Cachin’s review was provoked in great measure, I believe, by my lack of enthusiasm for most of its products». <<

[193] París, Verdier, 1987. <<

[194] Se sabe que Heidegger distingue lo ontológico, o ciencia del Ser, y lo «óntico», referente a los «que están», nivel de la «existencia no auténtica». <<

[195] Véase en particular el capítulo III. <<

[196] L’Express, 7 de junio de 1971; citado en Idées de nostre temps, París, Robert Laf-font, 1972. <<

[197] Mi vida en Alemania, antes y después de 1933; traducción francesa de Monique Lebedel, París, 1988; edición original en alemán, Stuttgart, 1986. <<

[198] Página 21, nota 1. <<

[199] Véase el edificante dossier de prensa en Heidegger et les modernes, de L. Ferry y A. Renaut, París, Grasset, 1988. <<

[200] La futilidad del mismo Heidegger como pensador se observa incluso en textos en que su ontología nazi no constituye el tema de base. Así en El origen de la obra de arte, cuya trivialidad había observado yo en ¿Para qué los filósofos? (capítulo V), Heidegger, que acumula sobre un cuadro de Van Gogh clichés de un inenarrable aburrimiento, no ha sido siquiera capaz de consultar sobre ese cuadro del pintor una pequeña documentación elemental, y comete sobre el contenido de la obra un error grosero que derrumba toda su presuntuosa interpretación. Ver a ese respecto Meyer Schapiro, «The Still Life as a Personal Object. A note on Heidegger and Van Gogh», The Reach of Mind: Essays in Memory of Kurt Goldstein, Nueva York, Springer Publishing Company, 1968, trad. fr. en Meyer Schapiro, Style, artiste et société, París, Gallimard, 1982. <<

[201] Walter Laqueur, Weimar, une histoire culturelle de l’Allemagne des annés vingt; trad. fr. Georges Liébert, París, 1978; título original, Weimar, a Cultural History 1918-1933, Londres, 1974. <<

[202] Op. cit. <<

[203] El economista, tío de André Gide. <<

[204] Véase esta polémica en Le Monde del 2 de septiembre de 1986. <<

[205] La cursiva es mía. <<

[206] París, Éditions du Seuil, 1967. <<

[207] Gustave Le Bon, La psychologie des foules, 1895. <<

[208] Éditions de Minuit, 1970. <<

[209] Pourquoi des philosophes? (¿Para qué los filósofos?), 1975, capítulo VI y prólogo de la edición de 1971, Livre de Poche, col. «Plueriel», pág. 36 y siguientes. <<

[210] Libro III, capítulo III: «Cómo los franceses han querido reformas antes de querer libertades». <<

[211] Benjamin Constant, De la libertad de los antiguos comparada con la de los modernos, 1819 <<

[212] La historia abrumadora de esta lucha fanática de los intelectuales contra la libertad individual ha sido narrada por Alain Laurent, en dos obras fundamentales: De l’individualisme (París, PUF, 1985) y L’individu et ses ennemis (París, Pluriel-Hachette, 1987). <<

[213] La République des camarades. <<

[214] En francés, disponemos de una selección de textos de Makhaiski, Le socialisme des intellectuels (París, Seuil, 1979), traducido, con una excelente presentación, por Alexandre Skirda. Se encontrarán en las notas de esta presentación referencias a varios estudios en lengua inglesa sobre el «makhaiskisme». <<

[215] París, Grasset y Livre de Poche. <<

[216] En el argot de la Escuela Normal, los «Ernest» son los peces de colores que nadan en el estanque central del patio de honor del número 45 de la calle Ulm, en París. <<

[217] En los reinos de Taifa, Barcelona, Seix Barral, 1986; traducción francesa, Fayard, 1988. <<

[218] Véase el texto íntegro de las comunicaciones en «Lo stalinismo sinistra italiana, atti del convegno organizzatto da “Mondoperaio”», Roma, 16-17 de marzo de 1988 (suplemento del núm. 4 de Argomenti socialisti, Roma, abril de 1988). <<

[219] París, Gallimard, 1975. <<

[220] Reeditadas por Mercure de France en 1988. Mémoires de l’abbé Morellet, de l’Académie française, sur le XVIIIe siécle et la Révolution, prólogo y notas de J. P. Guicciardini. <<