La caza del león, el deporte favorito de los monarcas Asirios.
Arriba: Una leona herida levanta la cabeza en un último rugido. Relieve en alabastro del Palacio Norte en Nínive.
Abajo: Siglo VII a.C. Losa caliza del palacio de Asurbanipal, Nínive; ahora en el Museo Británico.