Agradecimientos

MUCHA gente me ha ayudado a crear este libro. Estoy profundamente agradecida a Barbara Lalicki por sus observaciones editoriales, apoyo incondicional y entusiasmo desbordante. Maria Gomez me dio más consejos editoriales. Andrew Harwell me ayudó con un millar de tareas entre bambalinas con eficiencia y una magnífica actitud. Sarah Hoy y su equipo diseñaron una portada que continúa asombrándome. Melinda Weigel estuvo atento a cada detalle de estas páginas.

A Josh Adams, cinturón negro para los negocios, gracias por hacer que todo fluyera tan tranquilamente. Creo que eres un campeón.

Mi más sincero agradecimiento a los editores y asesores editoriales que han puesto su confianza en Bajo el cielo eterno. Es un honor increíble ver mi novela aventurarse en el mundo. Por su apoyo, también me siento en deuda con Stephen Moore y Chris Gary.

Dos personas me ayudaron a dar forma a la novela de principio a fin. A Eric Elfman y Lorin Oberweger, mentores brillantes y queridos amigos, dedico mi más sentido agradecimiento. Gracias también a Lynn Hightower, cuyos mantras «Todo comienza con érase una vez» y «Cada escena necesita un corazón» he hecho míos.

Talia Vance, Katy Longshore y Donna Cooner convirtieron el solitario oficio de escribir en un deporte de equipo. Tengo mucha suerte de conoceros. Bret Ballou, Jackie Garlick y Lia Keyes han pasado muchas horas conmigo bajo el cielo eterno. Gracias.

Amigos y familia, gracias por animarme a continuar durante todos estos años mientras perseguía un sueño. Sin vosotros no lo habría alcanzado. En particular, gracias a mis padres por ser los mejores modelos que una hija podía pedir. A mis chicos: tiro de la anilla de una granada de amor y la lanzo trazando un arco hacia vosotros.

Finalmente, a mi marido: entregarme a ti hace que la vida sea dulce.