Poco hay que añadir a la presentación de HYPERION,la primera entrega de esta narración ya clásica e imprescindible, uno de los mayores logros de la moderna ciencia ficción. En esta segunda parte de la novela, la aventura épica de HYPERION alcanza su clímax cuando los peregrinos se reúnen ante las Tumbas de Tiempo y éstas se abren para liberar al Alcaudón.
Es posible leer LA CAÍDA DE HYPERION sin haber leído HYPERION, su primera parte, pero no se lo recomiendo a nadie, aunque me consta que es factible ya que así lo hizo Pedro Jorge Romero, uno de los buenos conocedores y especialistas en ciencia ficción de nuestro país.
También es posible leer LA CAÍDA DE HYPERION casi un año después de HYPERION, como tuvieron que hacer los lectores norteamericanos, y yo mismo, pero tampoco se lo recomiendo a nadie: resulta en realidad una nueva forma de tortura, algo tan poco recomendable como un coitus interruptus…
De hecho, HYPERION y LA CAÍDA DE HYPERION son dos partes de una única novela que, por su extensión, se editó en Estados Unidos en dos volúmenes. Para pesar de los lectores en inglés, las dos mitades se publicaron, además, con casi un año de separación: desde junio de 1989 a marzo de 1990. Por si ello fuera poco, a la primera edición en inglés de LA CAÍDA DE HYPERION le faltaba la página 305, lo que motivó no poca agitación. La editorial tuvo que distribuir montones de «hojas 305» adicionales y los libreros hacerlas llegar a sus lectores. Un buen follón.
Espero que todo ello pueda resultar tan sólo anecdótico para el lector español y que nuestra edición resulte completa, correcta y, además, accesible para poder disfrutar de LA CAÍDA DE HYPERION inmediatamente después de finalizar la lectura de HYPERION, que viene a representar, de hecho, un largo prólogo de la presente novela.
Como ya indiqué en su presentación, HYPERION mostraba una gran riqueza a la vez estilística y temática en todos y cada uno de los relatos de los peregrinos del Alcaudón, narrados, a modo de homenaje, con estilos diversos y, tal vez, complementarios. Pero es en LA CAÍDA DE HYPERION donde se alza la voz propia de Simmons como autor de ciencia ficción con su personal estilo.
Con gran maestría, Simmons logra en este libro una brillante conclusión al articular todos los temas presentados en la primera mitad e impregnar el aparente caos temático que de ella se podría derivar con un significado definitivo.
El conjunto debe entenderse, por lo tanto, como una única novela, y como tal la juzga Tom Whitmore en LOCUS:
La saga de Hyperion puede leerse como aventura, como ciberpunk, como una alegoría o como novela del estructuralismo literario en clave de ciencia ficción; en cualquier caso, debe ser leída por todo aquel que tenga un mínimo interés por la ciencia ficción… y muchos otros la encontrarán también imprescindible.
En la presentación de HYPERION decía que estoy convencido de que esta saga (Hyperion Cantos es el nombre que ha dado al conjunto un editor norteamericano) es una de esas obras excepcionales que surgen sólo muy de vez en cuando en la ciencia ficción. Una de esas novelas que colaboran eficazmente a aumentar el prestigio y el reconocimiento de un género.
Por todo ello, HYPERION obtuvo los premios Hugo (el más popular y prestigioso de los que se conceden en la ciencia ficción) y el premio Locus. Su continuación, LA CAÍDA DE HYPERION, ha obtenido también el premio Locus y ha sido finalista tanto del Hugo como del Nébula. No obstante, resulta curioso y sorprendente el hecho de que HYPERION obtuviese el premio Hugo y LA CAÍDA DE HYPERION haya quedado tan sólo finalista de dicho premio pese a que muchos críticos la consideran incluso superior a la primera mitad.
Aunque los datos de que dispongo cuando escribo esta presentación (primera semana de septiembre) son sólo provisionales, parece ser que el Hugo de novela de 1991 lo ha obtenido Lois McMaster Bujold con THE VOR GAME, una nueva aventura en la serie protagonizada por Miles Vorkosigan, a quien nuestros lectores pudieron conocer en EL APRENDIZ DE GUERRERO (1986, NOVA ciencia ficción, número 33), y reencontrarán en FRONTERAS DEL INFINITO (1989, NOVA ciencia ficción, número 45), que obtuvo tanto el Hugo como el Nébula en la categoría de novela corta.
No es éste el momento de comentar el gran éxito popular, la amenidad y el evidente interés de la obra de Bujold, sino de decir que es muy posible que, siendo en realidad LA CAÍDA DE HYPERION la «segunda mitad» de una novela ya premiada (HYPERION), ello puede haberle restado votos para alzarse con un Hugo que, en especial este año, se presentaba muy disputado por la gran calidad de todas las obras finalistas: THE VOR GAME de Lois McMaster Bujold, LA CAÍDA DE HYPERION de Dan Simmons, QUEEN OF ANGELS de Greg Bear, EARTH de David Brin y THE QUIET POOLS de Michael P. Kube-McDowell.
Para los lectores que siguen esta colección y son buenos aficionados a la ciencia ficción, me apresuraré a decir que cuatro de estas novelas se editarán en castellano en las colecciones de Ediciones B. En concreto las de Bujold, Simmons y Bear se publicarán en esta misma colección y ya tendré oportunidad de comentarlas.
Pero EARTH (Tierra) de David Brin (por cierto con una cuidada y brillante traducción de Rafael Marín Trechera) aparecerá en la colección Éxito Internacional, donde también se publicarán las otras obras de Dan Simmons (por cierto, Carrión Comfort se llamará en España LOS VAMPIROS DE LA MENTE). Hay varias razones para editar EARTH en otra colección, las más importantes de las cuales son el posible carácter de best-seller de esta última obra de Brin y, también, el exagerado precio de los derechos de edición que ha solicitado el nuevo agente español de David Brin, que aleja prácticamente a este autor de las colecciones especializadas y de géneros todavía minoritarios como la ciencia ficción. Aprovecho pues esta oportunidad para recomendar a los lectores de esta colección que no se olviden de EARTH, de David Brin, claramente una de las mejores obras de ciencia ficción de 1990, pese a que en España no se publique en una colección especializada en el género.
No quisiera que se repitiese algo parecido a lo que ocurrió con LAS TORRES DEL OLVIDO (1987, Ediciones B, Colección Tiempos Modernos, número 7) del australiano George Turner, una obra comparable a UN MUNDO FELIZ de Huxley y a 1984 de Orwell, y que muchos buenos lectores de ciencia ficción todavía desconocen por haber aparecido en una colección no especializada.
Y, para volver a LA CAÍDA DE HYPERION, finalizaré esta presentación como ya hice al comentar su primera parte: en mis ratos de mayor optimismo, se me ocurre pensar que esta obra de Dan Simmons pueda aportar a la ciencia ficción algo parecido al reconocimiento que supuso para el género una obra como las Crónicas marcianas, de Ray Bradbury. Hay en la saga de HYPERION suficiente calidad literaria y capacidad de sugerencia para lograrlo y dispone también de una gran riqueza temática claramente extraída de lo mejor del gran acervo de la ciencia ficción.
¿Qué más se puede pedir?
MIQUEL BARCELÓ