CHARLES FOURIER. Uno de los nombres fundamentales para la comprensión del socialismo utópico es el de Charles Fourier, nacido en 1772, muerto en 1837. Su infancia estuvo llena de vicisitudes: hijo de un próspero negociante de paños, su familia quedó arruinada por diversas causas durante los primeros años de la Revolución francesa. Su padre lo adiestró para que se ganara la vida como viajante de comercio; de esta manera conoció casi toda Europa central y la Rusia zarista; su principal actividad durante esta época fue la lectura —lo que tal vez explique su aislamiento intelectual—. En este sentido su pensamiento se desarrolla aisladamente, al margen de las principales teorías filosóficas en boga durante la época. Su doctrina pretende a la vez que una crítica de la sociedad de su tiempo, el esbozo de una sociedad más humana, más feliz. Premia editora publica de él, en la colección Los brazos de Lucas, su Jerarquía de cornudos, una visión satírica de su época. Otras obras importantes de Fourier son su Teoría de los cuatro movimientos y de los destinos generales (1808), donde expuso las bases de su sistema social, que debía apoyarse en el falansterio.