Agradecimientos

Por encima de todo, debo esta novela a Susan Dennard. Por ser la clase de amiga que, por lo general, solo existe en los libros. Por ser de esas amigas a las que merece la pena esperar. Por ser mi anam cara. Gracias por las aventuras (y desventuras), por reír conmigo hasta las lágrimas y por toda la alegría que me has aportado. Te quiero mucho.

Infinita gratitud a mi Equipo A particular: mi increíble agente, Tamar Rizinski; mi excelente editora, Margaret Miller, y la incomparable Michelle Nagler. Me siento inmensamente afortunada de teneros cerca. Gracias por todo lo que habéis hecho por mí.

A mi buen amigo y crítico Alex Bracken, que siempre tiene sabios consejos y brillantes ideas que ofrecerme, y que me ha sacado de infinidad de situaciones desesperadas. Gracias por ser una de las luces más brillantes de este viaje. A Erin «Ders» Bowman, por las charlas de viernes, por las locas excursiones y por haber sobrevivido conmigo al brutal ataque de cangrejos del lago Glenville, en Carolina del Norte. Me alegro mucho de haberte enviado un correo electrónico.

También debo gratitud a Amie Kaufman, Kat Zhang y Jane Zhao, que han asumido toda clase de funciones, desde la de tablas de salvación hasta la de críticas y animadoras, pero, por encima de todo, han sido unas amigas maravillosas. A la inteligentísima Bilkana Likic, por ayudarme con el acertijo hace muchos años. A Dan «DKroks» Krokos, por ser un verdadero amigo y cómplice del delito. A la legendaria Robin Hobb, por llevar a dos escritoras noveles a cenar en Decatur, Georgia; gracias por ser tan amable y perspicaz con Susan y conmigo.

Muchísimas personas han trabajado incansablemente para que mis libros llegaran a materializarse y para llevarlos a manos de los lectores. Gracias de todo corazón a Erica Barmash, Emma Bradshaw, Susannah Curran, Beth Eller, Alona Fryman, Shannon Godwin, Natalie Hamilton, Bridget Hartzler, Katy Hershberger, Melissa Kavonic, Linette Kim, Ian Lamb, Cindy Loh, Donna Mark, Patricia McHugh, Rebecca McNally, Regina Roff Flath, Rachel Stark y Brett Wright. Y mi inmenso agradecimiento al equipo de Bloomsbury de todo el mundo; es un honor trabajar con todos vosotros.

Un enorme abrazo a mis padres, a mi familia y amigos; gracias por vuestro apoyo incondicional. Y a mi increíble marido, Josh; no hay palabras, en ninguna lengua, para describir cuánto te quiero.

Gracias a Janet Cadsawan, que da vida al mundo de Trono de Cristal con su maravillosa joyería. Y gracias a Kelly de Groot por el mapa, el entusiasmo y, sencillamente, por ser increíble.

A mis lectores: gracias por convertir este viaje en un cuento de hadas; gracias por las cartas y por los dibujos, por venir a mis presentaciones y por recomendar la serie; gracias por dejar entrar a Celaena en vuestros corazones. Hacéis que el duro trabajo y las muchísimas horas de escritura valgan la pena. Y por fin, me gustaría dar las gracias a mis lectores de FictionPress, que llevan tantos años conmigo y con los que he contraído una deuda que nunca podré pagar. No importa adónde me lleve este camino, siempre daré las gracias por haber tenido esa oportunidad de coincidir con vosotros. Gracias, gracias, gracias.