[1] Lugar del campamento de Facundo, en La Rioja, donde se conserva el enorme algarrobo a cuya sombra se dice que descansaba Quiroga. <<
[2] Segovia: «se aplica… al jaguar o tigre, que acosado por los perros u otros enemigos, se pone enfurecido y se resiste a pie firme». <<
[3] En octubre de 1839 varios distritos del sur ganadero se alzaron contra el gobernador, en otro resquebrajamiento del otrora sólido bloque federal. Grupos de peones, comandados por hacendados, fueron sofocados por las milicias de la frontera en la provincia de Buenos Aires. Los jefes de la conspiración fueron ajusticiados por orden de Rosas. Otros insurrectos se refugiaron en la Banda Oriental y por lo menos mil acompañaron a Lavalle. <<
[4] Alsina rectifica la fecha en su nota 37: «De octubre de 1840 y abril de 1841». El historiador Halperín Donghi (en Argentina. De la revolución de independencia a la confederación rosista, Buenos Aires, Paidós, 1972) dice: «Presentado como explosión espontánea de la cólera popular, el terror estuvo sin embargo a cargo de un pequeño número de funcionarios, en su mayoría policiales, y se ejerció con demasiado cuidado de no provocar dificultades a la política del gobierno para que sea verosímil que la selección de las víctimas haya sido obra de la ciega cólera popular…». «Y en lo inmediato las carnicerías de 1840 causaban grave daño político al sistema que acababa de vencer sobre adversarios tan poderosos. Así lo entendió Mandeville; luego de cuarenta días de terror en las calles indicó sobriamente a Rosas que la situación debía cesar de inmediato: el Restaurador se explayó en frases truculentas (…) pero las matanzas cesaron esa misma noche. La gestión, aunque discreta, no permaneció sin embargo desconocida, y si a muchos indignó la tardanza de Mandeville en intervenir, a todos pareció que los hechos revelaban qué poder era en Buenos Aires mayor que el del todopoderoso Restaurador…». <<
[5] «La caballería que conduce la carga en una marcha». (Segovia). <<
[6] El triunfo de Paz en La Tablada provoca la sublevación de los unitarios de Mendoza encabezados por J. A. Moyano. deponiendo al gobernador federal Corvalán. Pero Villafañe, segundo de Quiroga, venció a los sublevados en el Pilar, devolviendo a éste el dominio sobre San Juan y Mendoza. <<
[7] Es José Félix Aldao, el sacerdote capellán del Ejército de los Andes. <<
[8] Rudecindo Alvarado (1792-1872), fue guerrero de la Independencia. Luchó en el Ejército del Norte junto a Belgrano y realizó las campañas de Chile y Perú a las órdenes de San Martín. Fue gobernador de Mendoza y Salta en 1831, depuesto por la victoria de Quiroga en La Ciudadela. Emigró del país hasta 1848. Fue Ministro de Guerra y Marina de Justo José de Urquiza en 1854 y ocupó el cargo de gobernador de su provincia natal, Salta. <<
[9] Wenceslao Paunero (1805-1871), porteño, luchó en la guerra con el Brasil y posteriormente junto al general Paz. Como emigrado, pasó a Bolivia y a Chile. Apoyó a Mitre. Fue jefe del Estado Mayor de Buenos Aires (1859-61), y Ministro de Guerra de la Nación (1868). <<
[10] Misión enviada por Rosas a Córdoba con fines de pacificación. Los comisionados Pedro Feliciano de Cavia y Juan José Cernadas llegaron a la ciudad de Córdoba en enero de 1830. <<