Canción del caviloso corazón

Oh Dios, dame la pureza de corazón

Tú que llamas a lo que es lo mismo que a las cosas que no son

Que me deje de escifrar enigmas

Que deje atrás mi vida como el paisaje en un tren.

Que olvide toda la metafísica y sus paradigmas

Y las pobres cositas de mi vida también

Que a lo mejor no fue otra cosa que una interrogación y osadía

Contra Ti, que por lo mismo no dijiste esta boca es mía…

Qué hermoso será saber

Cuando ya no haya que pensar en el mañana.

Cuando llegue el momento solemne en que todo será ayer

Saber que todo fue macana.

Y es seguro que para mí será un gran consuelo

Del trance horrible y el último duelo

Cuando solo un tenue velo

Me separe de la Verdad

Aunque haya alguito pecado de curiosidad…

Y esta cosa que fue mi vida de dos caras

Donde me dicen no faltan cosas raras

Sepamos lo que es,

Pues.

Si realmente fue una cosa buena y caballeresca

Y pecado y locura parece por el otro lado

Y con los que así lo creen no quiero andar a la gresca

Y les doy de barato que fue locura y pecado…

(Porque el principal es mi Padre Espiritual

Es decir, un amigo viejo que tuve llamado Papá Negro o Tata Principal)

Contento con pedirles perdón

De haber nacido para ser estorbón

con tal que me salven la buena intención[8]