[1] Ocupa la totalidad del Cuerno de África, que se extiende desde el norte de Bab el Mandeb hasta varios grados al sur del cabo Guardafui. En aquella dirección está limitado por el territorio de los dankali y los galla itu, en ésta por la región Sawahil o el Mar Rojo en su frontera oriental, mientras que por el oeste se prolonga hasta escasas millas de Harar. <<
[2] En el año 1838, el teniente Carless reconocía el litoral del país somalí desde Ras Hafun hasta isla Quemada. Por desgracia, sus buenos oficiales cayeron en el olvido durante el ejercicio del sucesor de Sir Charles Malcolm. En este periodo se perdió en Ras Assayr la fragata Memnon, al mando del capitán Powell, pues la carta de navegación de Norie, un documento anticuado con errores de entre quince y veinte millas, era el único mapa de referencia que existía a bordo. Fue así como el gobierno indio, debido a las constantes dilaciones y los prejuicios de su superintendente de Marina, tuvo que hacer frente a unas pérdidas injustificables de por lo menos 50.000 libras. <<
[3] Entre los años 1836 y 1838, el teniente Cruttenden publicó descripciones de viajes a las que se aludirá en este mismo prefacio. <<
[4] Este «precipitado esbozo de los trabajos científicos de la Marina de la India» ha sido extraido de un folleto anónimo titulado, poco prometedoramente, «Aflicciones y actual condición de nuestros oficiales indios». <<
[5] En el año 1848, el fallecido Joseph Hume reclamó en la Cámara de los Comunes que se presentaran todos los estudios indios realizados durante los diez años anteriores. Quedó entonces patente que al menos una veintena habían sido interrumpidos de forma repentina por orden de Sir Robert Oliver. <<
[6] Este plan fue adoptado con éxito por Antonie y Arnauld d’Abbadie cuando viajaban por zonas peligrosas de Abisinia y los países adyacentes. <<
[7] En 1660 Vermuyden encontró oro en Gambia, siempre en alturas desoladas y cubiertas de tierra roja. <<
[8] Con frecuencia se ha reprochado a este autor en las críticas de los periódicos indios el hecho de aventurarse en tierras tan peligrosas con provisiones por valor de 1.500 libras. En el país somalí, al igual que en otros lugares del este de África, los viajeros deben llevar no solo los medios para adquirir distintos bienes, sino también artículos de primera necesidad. Como se desconoce el dinero, es imprescindible cargar mercancías tan voluminosas como telas de algodón, tabaco y cuentas para obtener carne y leche; y del mismo modo, aquél que quiere comer pan debe transportar grano en sus camellos. Por supuesto, los somalíes exageran en sus cálculos del coste de un viaje, si bien es cierto que cada jefe exige un obsequio, y cada pobre, como veremos en las siguientes páginas, espera ser alimentado. <<
[9] En el año 1825 el gobierno de Bombay recibió la noticia de que un bergantín de la isla Mauricio había sido capturado, saqueado y hundido cerca de Berbera, y de que los asaltantes somalíes habían dado muerte bárbaramente a parte de la tripulación. El balandro de guerra Elphinstone (al mando del capitán Greer) fue enviado para bloquear la costa; cuando sus cañones abrieron fuego, los nativos huyeron con sus mujeres e hijos, pudiéndose aún visitar el lugar donde una bala mató a un jinete cerca de la población. Merced a la intervención del hayi Sharmarkay se recuperó a los supervivientes, y los somalíes se comprometieron a abstenerse en el futuro de atacar a las naves inglesas y también a restituir mediante pagos anuales una suma equivalente a los bienes sustraídos. Para garantizar el cumplimiento de esta última condición se decidió que un buque de guerra permaneciera en la costa hasta la liquidación total de la deuda. Cuando se producían intentos de evasión, se detenía el tráfico, enviándose a todas las embarcaciones a alta mar y prohibiéndose cualquier intercambio con el litoral. El Coote (al mando del capitán Pepper), el Palinurus y el Tigris se alternaron en la guardia con el Elphinstone, manteniendo la zona bloqueada hasta 1833. Se recuperaron unas 6.000 libras, y los somalíes quedaron impresionados por nuestra férrea voluntad y también por los medios de que disponíamos para atajar su propensión al pillaje. <<
[10] El autor recomendó que estos hombres fueran ahorcados en el mismo lugar donde se había cometido el ultraje, que sus cuerpos fueran quemados y sus cenizas arrojadas al mar, de tal modo que tan terribles asesinos no se convirtieran en mártires. Esta precaución debería adoptarse siempre que un musulmán mata a un infiel. <<
[11] No ha podido aclararse el motivo de esta objeción. Un pueblo salvaje no queda adecuadamente castigado mediante unas pocas muertes, siendo la penalización económica el mejor método para producir una impresión duradera en sus mentes y corazones. Además de ser una costumbre tanto en India como en Oriente, constituye el único método de salvaguardar las propiedades de los viajeros. <<
[12] El África oriental tiene generalmente un terreno de arcilla rojiza.(N. del T.) <<
[13] El ñu es un rumiante originario de África, que se parece al buey por su aspecto general y por su cornamenta y al caballo por la cola y la crin, teniendo también algo del antílope y del bisonte. Se conocen dos especies: el común y el rayado, y es muy perseguido por los cazadores ingleses y holandeses de El Cabo.(N. del T.) <<
[14] Viene a decir: «Salvaje de nacimiento más que de carácter». (N. del T.) <<
[15] Esta harina se hace con la cápsula pulposa del baobab, la cual lleva también el nombre de «pan de mono», por ser uno de los alimentos favoritos de estos animales. (N. del T.) <<
[16] Fundikira murió poco después, sucediéndole su hijo Manua Sera.(N. del T.) <<
[17] Esta observación quedó justificada desgraciadamente con la guerra de 1861, contra el hijo de Fundikira, en la cual halló la muerte el árabe Snay-ben-Emir, de quien hace Burton tantos elogios. (N. del T.) <<
[18] Burton tiene razón respecto a las comarcas que él ha recorrido. Pero en el país de Uganda. Speke ha encontrado caminos anchos y muy bien conservados. (N. del T.) <<
[19] Estos dos lagos, situados en la misma longitud de que habla Ptolomeo y donde el Nilo tiene su origen, pueden ser el lago Alberto y el Victoria, descubiertos respectivamente por Sir Samuel Baker y el capitán Speke. (N. del T.) <<
[20] Los que han traducido «rasoul» (enviado) por profeta, han falseado la fórmula islamita. Mahoma no se presentó nunca como profeta, en el sentido que damos a esta palabra, que es relativo a la predicción del porvenir. Mahoma se presentó como apóstol. (Burton). <<
[21] Especie de colonos agrícolas, cuya situación es muy parecida a la de los antiguos siervos de la gleba. (N. de T.) <<