La estructura geométrica de una pajarita de papel, sin ser complicada, lo es más de lo que pudiera parecer a primera vista, lo suficiente como para que sea difícil recordarla recurriendo a la mera memoria visual. He aquí una sencilla construcción geométrica que permite reproducirla sin dificultad:
Dibujamos un cuadrado y lo dividimos en cuatro cuadrados iguales. Descartamos uno de los cuartos de arriba, por ejemplo, el de la derecha, y los otros tres, que forman una L, los dividimos en cuatro partes cada uno trazando sus dos diagonales. Obtendremos así 12 triángulos isósceles rectángulos iguales, de los que descartamos los siguientes: el de la izquierda del cuadrado superior, el de abajo del cuadrado de en medio y el de arriba y el de la derecha del cuadrado inferior derecho. Lo que queda es la pajarita de papel, con las señales de los dobleces y todo.
Moraleja: Sólo los tontos se fían de su memoria, como decía… (¡Vaya!, se me ha olvidado quién lo decía).