Como fumar sin gastar

Bueno, en realidad esta técnica es sobradamente conocida y tiene un sinfín de practicantes: evidentemente, la forma más sencilla de fumar sin gastar consiste en gorronear cigarrillos ajenos.

Pero hay métodos más sutiles. Por ejemplo, poniendo tu mejor cara de virtuoso y ahorrativo, puedes afirmar que eres capaz de dar varias caladas a un cigarrillo encendido sin que su longitud disminuya en un solo milímetro. Naturalmente, no te creerán. Enciéndelo (con cuidado) por la mitad: podrás dar varias caladas sin alterar su longitud (no has dicho que el cigarrillo iba a quedar intacto, sino sólo que no menguaría).

Hay una variante que exige echarle aún más cara y cuyo único objeto es conseguir un cigarrillo gratis. En este caso puedes asegurar que el cigarrillo quedará intacto, o incluso que aumentará de longitud, o que pasará de negro a rubio, o lo que se te ocurra. Una vez conseguido el cigarrillo para el «experimento», te lo fumas tranquilamente y al final dices: «Vaya, esta vez no me ha salido; no lo entiendo, siempre me sale bien… ¿Me das otro cigarrillo, para volver a probar?»