UNA HOJA MARCHITA

Cada brote quiere su fruto

y cada mañana su tarde,

nada hay eterno sobre la tierra

más que el cambio y la huida.

Hasta el estío más hermoso

ventea el otoño y la decadencia.

Detente, hoja, paciente y tranquila,

cuando el viento quiere arrebatarte.

Juega tu juego y no te defiendas,

deja que tranquilamente ocurra.

Deja que el viento que te arranca

te lleve hasta casa.