Para los vivos:

Ciccilo Matarazzo

Mercedes Cruañes Rinaldi

Erich Gemeinder Francisco Marins y

Arnaldo Magalháes de Giacomo y también

Helene Rudge Miller (Piu-Piu!) sin poder

tampoco olvidar a mi «hijo» Fernando Seplinsky

A los muertos:

El homenaje de mi nostalgia

a mi hermano Luis, el Rey Luis,

y mi hermana Gloria;

Luis renunció a vivir a los veinte años,

y Gloria a los veinticuatro también pensó

que realmente vivir no valía la pena.