Cómo olvidar la sintonía del mítico programa El hombre y la Tierra dirigido y conducido por el desaparecido Félix Rodríguez de la Fuente.

Esa música la asocio directamente con animales.

Me ocurre lo mismo con la de «Paquito el chocolatero».

Los niños sienten por los animales una atracción especial, y cuanto más grandes sean, mejor.

Nos encantaban los ciervos, los elefantes, los leones…

En esto, Disney ha tenido mucha culpa, porque nos los imaginábamos como en sus películas.

Pero Félix Rodríguez de la Fuente consiguió mostrarnos la naturaleza y a los animales comportándose tal y como eran en su hábitat natural, lo que no incluía cantar ni bailar.

Nos enseñó que no hay que irse a África para ver animales salvajes, que nuestra propia fauna ibérica es impresionante. Para comprobarlo, solo hay que acercarse a cualquier estadio de fútbol…

En la serie conocimos animales como el lirón careto o el abejaruco, y desde entonces nunca más hemos oído hablar de ellos.

Él fue el responsable de que los lobos dejasen de ser «los malos» del reino animal y nos los presentó como realmente eran, hasta tal punto que desde entonces miramos a Caperucita como la auténtica villana.

¿Quién no ha sufrido, viendo su programa, por ese pobre cervato acechado por un lince ibérico?

Que yo pensaba que, si había un cámara grabando eso, ¿por qué no avisaba al pobre ciervo para que huyese?

Pero el equipo del programa solo era testigo y no podía intervenir.

Aunque luego se supo que intervino más de la cuenta, preparando animalitos como cebo para que el reportaje fuese más emocionante…

Félix Rodríguez de la Fuente tenía además una forma peculiar de comunicar que le hizo único.

En 1980 España quedó conmocionada con la noticia de su muerte en un accidente de helicóptero.

Enrique y Ana le dedicaron una canción que todos hemos cantado. Y que si la analizamos bien, parecía alentarnos al suicidio.

«Amigo Félix, cuando llegues al cielo,

amigo Félix, hazme solo un favor:

quiero ir contigo a jugar un ratito

con el osito de la osa mayor.»

Sin comentarios.