[1] Sí, es el mismo título que el libro infantil, pero imaginen que en lugar de la foto de unos niños ponen la de su político preferido o la de una persona discapacitada que necesita cuidados constantes.<<
[2] No he mencionado el pegar un bofetón porque es ilegal, aunque lo haga un padre o el niño se lo merezca. Tan sólo hemos mencionado aquellas actitudes que se tienen hacia los niños que no se tolerarían con otros adultos, pero que aún no están penalizadas por nuestras leyes.<<
[3] R. Salpolsky, en una entrevista realizada por Eduard Punset y transcrita en su libro El viaje a la felicidad, Destino, Barcelona, 2005, pp. 167-168.<<
[4] N. Acarín, El cerebro del rey, RBA, Barcelona, 2005, pp. 194 y 195. <<
[5] Como la implícita y la de corto plazo. <<
[6] D. J. Siegel, La mente en desarrollo, Desclée de Brouwer, Bilbao, 2007, p. 88. <<
[7] Estaban hablando sobre si era mejor introducir primero las verduras o la fruta. La verdad es que da igual, como demostraremos en el capítulo de la alimentación, pero encontrará tantos profesionales que defiendan una idea como otros que defiendan la contraria. <<
[8] L. A. García Martín es licenciado en filosofía y autor, entre otros, del libro Mi Ángel y yo, Proyectos y Producciones Editoriales Cyan, Madrid, 2007, en donde relata, en poesía, la llegada al mundo y el primer año de vida de su hijo. <<
[9] Esta anécdota se encuentra en su libro El viaje a la felicidad, op. cit.. <<
[10] Nuestro cerebro ha aumentado mucho de tamaño con la evolución de la especie. Ver Figura 1. <<
[11] Tomamos esta idea de D. J. Siegel, La mente en desarrollo, op. cit., p. 35, porque nos parece una forma muy didáctica de explicar nuestro cerebro. <<
[12] N. Acarín, El cerebro del rey, op. cit., p. 42. <<
[13] Ibidem, p. 204. <<
[14] A partir de ese momento nuestro cerebro continúa cambiando pero nunca de forma tan notoria. <<
[15] N. Acarín, op. cit., p. 43. <<
[16] D. J. Siegel, op. cit., p. 53. <<
[17] N. Acarín, op. cit., pp. 154-155. <<
[18] Ibidem, pp. 194-195. <<
[19] N. Acarín, op. cit., pp. 154-155. <<
[20] Ibídem, pp. 194-195. <<
[21] E. Punset, op. cit., pp. 89-90. <<
[22] N. Acarín, op. cit., p. 298. <<
[23] D. J. Siegel, op. cit., p. 63. <<
[24] Ibidem. <<
[25] Muchos de estos aspectos están explicados en la tercera parte de este libro. <<
[26] Normativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la Asociación Española de Pediatría (AEP). <<
[27] D. J. Siegel, op. cit., p. 397. <<
[28] Este no es un libro para hablar de embarazo, sino tan sólo de cómo el embarazo puede afectar al bebé y a su crianza. <<
[29] Por ejemplo, el déficit de ácido fólico se relaciona con espina bífida. <<
[30] Por ejemplo, el alcoholismo en la madre se asocia a bajo peso y al síndrome alcohólico fetal. <<
[31] El síndrome alcohólico fetal está relacionado con problemas psicológicos y comportamentales del niño (como hiperactividad), y el exceso de tabaco provoca una baja tasa de lactancia, lo que puede ocasionar alteraciones psicológicas, sobre todo de apego. <<
[32] Este no es un libro para hablar de partos, sino tan sólo de cómo el parto puede afectar al bebé y a su crianza. <<
[33] Aunque las cosas están cambiando y parece que cada vez más los profesionales que asisten a las mujeres de parto tienden a ofrecer una atención más fisiológica y menos medicalizada. <<
[34] Michel Odent es obstetra y autor de un gran número de artículos y libros sobre el parto y los bebés. <<
[35] L. Fernández del Castillo, La revolución del nacimiento, Granica, Barcelona, 2006, p. 37. <<
[36] Origen o formación de la leche. Pro-lactina, como su nombre indica, es proleche, es decir, es la hormona causante de que tengamos más o menos aporte de leche. <<
[37] Salida de la leche al exterior. La oxitocina ayuda a que la leche fluya. <<
[38] Para saber más del tema de la carta de parto puede consultar www.elpartoesnuestro.es. <<
[39] Estrategia de atención al parto normal del Ministerio de Sanidad. Se puede consultar en la propia web del ministerio, www.msc.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/pdflequidad/estrategiaPartoEnero2008.pdf. <<
[40] K. Bystrova, A. S. Matthiesen, I. Vorontsov, A. M. Widström, A. B. Ransjö-Arvidson y K. Uvns-Moberg, «Maternal axillar and breast temperature after giving birth: effects of delivery ward practices and relation to infant temperature», Birth, 34(4), 2007, pp. 291-300.
A. Bergstrum, P. Okong, A. B. Ransjö-Arvidson, «Immediate maternal thermal response to skin-to-skin care of newborn», Acta Paediatrica, 96(5), 2007, pp. 655-658.<<
[41] K. Michelsson, K. Christensson, H. Rothgnger, J. Winberg, «Crying in separated and non-separated newborns: sound spectrographic analysis», Acta Paediatr, 85(4), 1996, pp. 471-475. <<
[42] Asociación El Parto es Nuestro: www.elpartoesnuestro.org; www.quenoosseparen.info. <<
[43] T. Tapiainen, S. Ylitalo, E. Eerola, M. Uhari, «Dynamics of gut colonization and source of intestinal flora in healthy newborn infants», APMIS, 114(11), 2006, pp. 812-817. <<
[44] K. Bystrova, A. S. Matthiesen, 1. Vorontsov, A. M. Widström, A. B. Ransjö-Arvidson, K. Uvns-Moberg, B. Welles-Nyström, C. Wassberg, «Skin-to-skin contact may reduce negative consequences of “the stress of being born”: a study on temperature in newborn infants, subjected to different ward routines in St. Petersburg», Acta Paediatr, 92(3), 2003, pp. 320-326. <<
[45] E. Morelius, E. Theodorsson, N. Nelson, «Salivary cortisol and mood and pain profiles during skin-to-skin care for an unselected group of mothers and infants in neonatal intensive care», Pediatrics, 116(5), 2005, pp. 1105-1113. <<
[46] K. Mikiel-Kostyra, J. Mazur, 1. Boltruszko, «Effect of early skin-to-skin contact after delivery on duration of breastfeeding: a prospective cohort study», Acta Paediatr, 91(12), 2002, pp. 1301-1306. <<
[47] B. Wiberg, K. Humble, P. de Château, «Long-term effect on mother-infant behaviour of extra contact during the first hour post partum. V. Follow up at three years», Scand J Soc Med., 17(2), 1989, pp. 181-191. <<
[48] www.msc.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/pdf/equidad/estrategia PartoEnero2008.pdf. <<
[49] Neonatólogo del Hospital Universitari de Tarragona Joan XXIII en su escrito «Contacto piel con piel inmediato para recién nacidos a término». Resumen de una conferencia que puede consultarse en www.quenoosseparen.info/artículos/documentacion/doccastellano.php. <<
[50] Se entiende que hay patologías que requieren una intervención inmediata, pero en la mayoría de los problemas no es así. Tanto en las cesáreas como en las instrumentaciones el niño puede quedarse con la madre. <<
[51] Ejemplo extraído de P. Motos (coordinador), Frases célebres de niños. El hormiguero, Aguilar, Madrid, 2007, p. 36. <<
[52] Según las últimas estadísticas de nuestro país, aunque los hombres colaboran cada vez más en las tareas domésticas (alguno que yo conozco incluso ha dejado de trabajar para hacerlo), en general la tónica dominante sigue siendo que las mujeres realicen esas labores. De los 46 375 millones de horas al año invertidas en actividades productivas no remuneradas en los hogares españoles, 33 872 millones de horas, esto es, el 73 por ciento del total, son realizadas por mujeres, frente al 27 por ciento que hacen los hombres (INE, 2008). Tengo menos probabilidades de equivocarme en el ejemplo si pongo la palabra «padre», aunque no piense que todos actúan así. <<
[53] En el mejor de los casos. Porque hay mujeres autónomas que no tienen baja maternal. Hemos escogido el dato más frecuente en nuestro país. <<
[54] M. À. Claramunt, Pequeñas delicias, Milenio, Lérida, 2005, p. 54. <<
[55] Sociólogo griego contemporáneo. <<
[56] La episiotomía (corte en la zona del periné) en nuestro país es aún rutinaria en muchas maternidades, si bien en muchos casos no sería necesaria. Provoca malestar en la mujer, que no puede sentarse cómodamente durante varios días, ni ir al baño con facilidad, y menos tener relaciones sexuales completas y placenteras. <<
[57] En nuestro país suele haber una revisión hacia el mes o mes y medio para ver si ya han remitido los loquios, si el útero va volviendo a su lugar, etcétera. <<
[58] H. G. Ginott, Entre padres e hijos, Medici, Barcelona, 2005, p. 8. <<
[59] Ibidem, p. 17. <<
[60] Es el final de la escolarización obligatoria: ESO (Educación Secundaria Obligatoria). <<
[61] En España es conocida la Supernanny del canal Cuatro y la versión inglesa de Jo Frost, pero hay algunos más. <<
[62] Es un estudio del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de Estados Unidos, que se puede descargar entero en www.nichd.nih.gov/publications/upload/seccyd051206.pdf. <<
[63] En el mismo programa el padre no hace nada en casa y cuando Supernanny le dice que quizás debería colaborar, él sólo pregunta: «Cuándo voy a tener tiempo libre?». <<
[64] Es un programa de un niño que se llama Alejandro, de 4 años. Se puede ver fácilmente en YouTube poniendo «Supernanny Alejandro». Como el programa está dividido en partes, esta es la segunda parte. <<
[65] Es la tercera parte del programa anterior. <<
[66] Como, por ejemplo, el SPC (Sistema Pictográfico). <<
[67] Ejemplo extraído de P. Motos (coord.), op. cit., p. 29. <<
[68] Digo «de momento» porque hay un debate actualmente sobre esta cuestión y es posible que cuando usted lea este libro se haya modificado la edad de escolarización obligatoria. <<
[69] Muchas de las actuaciones de las que vamos a hablar a continuación también tienen incidencia en la madre y la benefician, pero no vamos a citarlas porque no es el tema que nos ocupa. También conviene decir que no es un listado exhaustivo, sino orientativo sobre algunos aspectos que, desgraciadamente, se producen con frecuencia. <<
[70] Puede consultarse en la Asociación Española de Pediatría (AEP), cuyo comité de lactancia materna tiene un manual editado y la web www.aeped.es. AEP, Lactancia materna: guía para profesionales, Monografía n° 5, Ergón, Madrid, 2004.
Ante la imposibilidad de citarlos todos, tan sólo mencionamos un par de máxima evidencia científica, pero pueden consultar más en la página www.quenoosseparen.info/artículos/documentacion/basedatos.php.
E. R. Moore, G. C. Anderson y N. Bergman, «Early skin-to-skin contact for mothers and their healthy newborn infants », Cochrane Database Syst Rev, 18 de julio de 2007.
>J. Winberg, «Mother and newborn baby: mutual regulation of physiology and behavior — a selective review», Dev Psychobiol, noviembre de 2005, pp. 217-229. <<
[71] En 1986 el Parlamento Europeo redactó la Carta Europea de los Derechos de los Niños Hospitalizados. Cada país (y en nuestro caso, cada comunidad autónoma, por estar transferidas las materias de salud) ha adaptado esos derechos en diferentes leyes. <<
[72] Existen cantidad de artículos que demuestran que el bebé no sabe gestionar su estrés y se impacta con más facilidad. Si quiere ver un programa ameno y divulgativo sobre este tema, le recomendamos el programa Redes n° 447, de Eduard Punset, que se puede encontrar en internet en el siguiente enlace: http://tu.ty/videos/redes-447-el-cerebro-del-bebe. En él hay una entrevista con Sue Gerhardt (psicóloga infantil y escritora, considerada una de las mayores expertas en su campo de investigación) en la que se habla de este tema.<<
[73] Es un estudio del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de Estados Unidos, que se puede descargar completo en www.nichd.nih.gov/publications/upload/seccyd051206.pdf. <<
[74] Basulto es dietista-nutricionista, profesor de la Universidad Rovira i Virgili y miembro fundador del Grupo de Revisión, Estudio y Posicionamiento de la Asociación Española de Dietistas y Nutricionistas. <<
[75] Esta pregunta es divertida porque la niña tomaba pecho, pero parece ser que el pediatra no tenía la leche materna en su lista como un lácteo, y cada vez que iban les preguntaba lo mismo. <<
[76] No pretendemos ser exhaustivos en la enumeración de problemas, sino que nos detendremos en aquellos que nos parecen más frecuentes y evidentes. <<
[77] Aunque el control de esfínteres es un tema que comentaremos en capítulos posteriores, es curioso cómo todas las autoridades mundiales en esta materia (Academia Americana de Pediatría, Organización Mundial de la Salud, Asociación Española de Pediatría) no consideran problemática la enuresis hasta pasados los 5 años y la encopresis hasta pasados los 4. En nuestras escuelas consideran que como un niño a los 3 años no controle es que va tremendamente atrasado. <<
[78] No me gusta esta palabra por el significado de «guardar» niños, ya que muchas de ellas tienen programas educativos, etcétera, pero es el nombre más extendido y conocido, y es el que vamos a utilizar. En otros lugares de la geografía se utilizan otros nombres más bonitos; por ejemplo, en Cataluña se les llama llar d'infants (hogar de niños). <<
[79] Las Ciudades Amigas de los Niños es un distintivo que otorga Unicef a las que cumplen una serie de requisitos hacia ellos. En nuestro caso tomamos el nombre para referirnos a ciudades que tienen en cuenta a los menores y a sus familias en los aspectos que comentaremos más tarde. <<
[80] Cabe destacar la gran labor de grupos en pro de la lactancia materna que animan a las madres a asistir con sus bebés a cualquier evento que organizan, incluso conferencias. <<
[81] N. Acarín, op. cit., p. 188. <<
[82] N. Acarín, op. cit., pp. 204-298. <<
[83] Entrevista concedida a Eduard Punset y publicada en su libro El viaje a la felicidad, op. cit., p. 176. <<
[84] Sí, obligamos. ¿No le ha pasado nunca con su bebé, entre 8 meses y 2 años, que un día se resistía a ponerse el pañal y usted se lo ha puesto? <<
[85] Puede consultarse el texto en inglés en www.who.int/child-adolescenthealth/NUTRITION/infantexclusive.htm. <<
[86] www.aeped.es/lactanciamaterna/grupos.htm. <<
[87] Si quieren alguno, les recomendamos los siguientes en lengua española: Asociación Española de Pediatría (AEP), Lactancia materna: guía para profesionales, Monografía, no 5, op. cit.; C. González, Manual práctico de lactancia materna, ACPAM, Barcelona, 2004; C. González, Un regalo para toda la vida, Temas de Hoy, Madrid, 2006; R. A. Lawrence, La lactancia materna, Mosby, Madrid, 1996; Liga Internacional de la Leche, El arte femenino de amamantar, Diana, México, 1993. <<
[88] Las causas de una verdadera hipogalactia son raras y debidas a enfermedades de la madre o a negligencia médica. Podemos citar: hipotiroidismo, retención de placenta posparto, agenesia del tejido mamario, cierto tipo de cirugía estética, mastectomía, síndrome de Sheehan, déficit congénito de prolactina, gran desnutrición de la madre… Si usted no sufre nada de eso no tiene por qué tener falta de leche. Y si tiene alguno de estos problemas (hipotiroidismo, por ejemplo) se puede solucionar. <<
[89] Organización Mundial de la Salud, Unicef, Academia Americana de Pediatría, Asociación Española de Pediatría. <<
[90] Es importante remarcar que es mínimo 6 meses, porque hay profesionales que piensan que es «hasta» los 6 meses y ya recomiendan otros alimentos a partir de ese momento. Hay que esperar a que el niño cumpla los 7 meses. <<
[91] El grupo se llama ALLETA. Pueden encontrar información en www.alleta.cat. <<
[92] C. González, Un regalo para toda la vida, pp. 217-218. <<
[93] Datos extraídos de un artículo de la doctora Mónica Tesone, psicóloga y consultora de lactancia. <<
[94] OMS, «Nutrición del lactante y niño pequeño. Estrategia mundial para la alimentación del lactante y niño pequeño», A55115, abril de 2002. <<
[95] La malnutrición de la madre ha de ser muy extrema para que se note en la lactancia y, si lo es, es porque no hay comida, ni para el niño ni para la madre. Así que, mejor continuar con la lactancia. <<
[96] AEP, «Lactancia materna: una guía para profesionales», op. cit., p. 290. <<
[97] J. Basulto, «Ya está listo para los sólidos», Tu Bebé, 181, 2008, pp. 40-42. <<
[98] Puede encontrar recomendaciones similares en OMS, «Nutrición del lactante y niño pequeño. Estrategia mundial para la alimentación del lactante y niño pequeño», op. cit., AEP, «Lactancia materna: una guía para profesionales», op. cit. <<
[997] Ejemplo extraído de P. Motos (coord.), op. cit., p. 40. <<
[100] T. A. Nicklas y D. Hayes, «American Dietetic Association. Position of the American Dietetic Association: nutrition guidance for healthy children ages 2 to 11 years », J Am Diet Assoc, 108(6), 2008, pp. 1038-1044, 1046-1047. <<
[101] Los vómitos frecuentes están asociados más a problemas psicológicos que médicos. Si su pediatra descarta alteraciones médicas, replantéese cómo da de comer a su hijo. <<
[102] Este capítulo es un resumen muy pequeño del libro de la misma autora Dormir sin lágrimas, publicado en esta misma editorial. Si quieren saber más, consulte la fuente principal. <<
[103] Pido perdón a Shakespeare por parafrasear una de sus más conocidas máximas. <<
[104] No queremos dar la idea de que no valoramos los brazos paternales, que también son muy apreciados por los bebés. A lo largo de estas líneas nos referiremos tanto a las madres como a los padres para agilizar el texto y no ser tan repetitivos. Quiero huir, aunque no siempre se puede, de utilizar sólo el género masculino cuando las cosas son tanto femeninas como masculinas. No pretendo minusvalorar el papel del padre en la crianza, psicológicamente importantísimo para el correcto desarrollo del bebé. <<
[105] Ahora no sólo nos referimos a países del Tercer Mundo, en los que la madre puede ejercer de madre. En los países nórdicos, por ejemplo, Noruega, en donde las bajas por maternidad son más elevadas que la media europea, las tasas de lactancia han aumentado y los problemas de sueño, aunque aún presentes, no son tan frecuentes en las consultas pediátricas.
Para los países menos desarrollados, podemos leer los libros El concepto de continuum, de Jean Liedloff, y Nuestros hijos y nosotros, de Meredith E. Small, en los que se exponen numerosos casos de madres a las que se les deja ejercer su rol y darle a su hijo esos cuidados que necesita, por lo que desconocen los trastornos del sueño. <<
[106] Aparte de los estudios citados, en los libros mencionados al final de la nota anterior, se puede leer la bibliografía de Michel Odent y James McKenna citada al final. <<
[107] Quizás los estudios más conocidos sean los publicados por la OMS en «Pruebas científicas de los diez pasos hacia una feliz lactancia natural». <<
[108] No se pretende hacer un manual de pediatría infantil, tan sólo nombrar aquellos aspectos más importantes que necesita un recién nacido. No es una enumeración exhaustiva, sino orientativa. <<
[109] R. Debré y A. Doumic, Le sommeil de l'enfant avant trois ans, PUF, París, 1959, citado en J. de Ajuriaguerra, Manual de psiquiatría infantil, Masson, Barcelona, 2002, p. 160. <<
[110] Citado en J. de Ajuriaguerra, op. cit., p. 160. <<
[111] J. J. McKenna y S. S. Mosko, «Sleep and arousal, syncrony and independence, among mothers and infants sleeping apart and together (same bed). An experiment in evolutionary medicine», Acta Pediátrica, Supl. 397, 1994, pp. 94-102. <<
[112] Como ya hemos remarcado en notas anteriores, son muchas las cosas que necesita y que va a conseguir nuestro bebé de 4 a 7 meses, pero priorizamos aquellos aspectos más conocidos para poder dar una visión general. <<
[113] Según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. <<
[114] L. Mause, Historia de la infancia, Alianza, Madrid, 1991; A. Aluja, Personalidad desinhibida, agresividad y conducta antisocial, PPU, Barcelona, 1991; A. M. Daderman y L. Lidberg, «Relapse in violent crime…», Acta Psychiatrica Scandinavica, 106 (sup1. 412), 2002, pp. 71-74, entre otros. <<
[115] La mayoría de estos métodos prometen una eficacia del 95 por ciento, cuando, en realidad, apenas es del 70 por ciento la primera vez. Decimos la primera vez porque a la mayoría de niños a los que les funciona, a la larga, tienen recaídas. Normalmente, los niños a los que les ha funcionado la primera vez y no ha hecho falta repetirlo nunca suelen llegar entre el 50 y 60 por ciento. Véase F. Milberg e L. Gerold, «Dificultad para conciliar el sueño y despertares nocturnos como motivo de consulta pediátrica», Arch, Argent. Pediatr., 99 (6), 2001, pp. 503-509. <<
[116] J. E. Le Doux, «Brain mechanisms of emotions and emotional learning», Current Opinion in Neurobiology, vol. 2, 1992, pp. 191-197. <<
[117] S. E. Taylor, Lazos vitales. De cómo el cuidado y el afecto son esenciales para nuestras vidas, Taurus, Madrid, 2002. <<
[118] E. Punset, El viaje al amor, Destino, Barcelona, 2007, p. 169. <<
[119] OMS, «Puebas científicas de los 10 pasos para una feliz lactancia natural», UNICEF, la Asociación Española de Pediatría (AEP) y la Asociación contra la Muerte Súbita del Reino Unido (www.sids.org.uk/fsid). <<
[120] Al igual que pedimos garantías a las cunas o a cualquier cosa relacionada con los bebés, el colecho también precisa unas medidas de seguridad. En el caso del colecho son las normales para todo bebé (no dormir boca abajo), medidas de seguridad e higiene de la habitación, no poner excesivos ambientadores, colonias, repelentes de insectos, etcétera, que puedan aturdirle o irritarle, más las que exponemos. <<
[121] M. F. Small, Nuestros hijos y nosotros, Vergara-Vitae, Buenos Aires, 1999, p. 155. <<
[122] H. A. Hofer, «Early social relationship…», Childdevelopment, vol. 58, 1987, pp.185-187. <<
[123] Los hay que, como los japoneses, duermen siempre juntos, tengan la edad que tengan, pero no porque el niño no sea capaz de dormir solo. <<
[124] Aprovechamos estas líneas para recomendar a los padres el uso de pañales reciclables y ecológicos. Puede que cuesten un poco más, pero el planeta lo agradece. ¿Sabe usted que un pañal seguirá sin desintegrarse totalmente hasta que pasen varios siglos? Imagine la cantidad de pañales que gasta su hijo y multiplique por los niños que hay. <<
[125] L. Piedrahita, ¿Cada cuánto hay que echar a lavar el pijama?, Aguilar, Madrid, 2006, p. 15. <<
[126] Enuresis es hacerse pipí. <<
[127] Encopresis es hacerse caca. <<
[128] P. Motos (coord.), op. cit., p. 16. <<
[129] Psicóloga y sexóloga. Los fragmentos están sacados de una entrevista publicada en la página web de Criar y amar, www.criaryamar.com. <<
[130] Ibidem. <<
[131] P. Motos (coord.), op. cit., p. 9. <<
[132] Véase nota 6 del capítulo V. <<
[133] Extraído de la película Dr. Jekyll and Mr. Hyde, 1931. <<
[134] Los anglosajones lo bautizan como la edad del T. T. (Terrible Two), cuya traducción sería «los terribles dos». <<
[135] No se debe confundir con otras patologías más graves que llevan la palabra comportamiento asociada a sus síntomas. <<
[136] La primera vez que vi estos conceptos fue en un artículo de L. Gutman, terapeuta y autora, entre otros libros, de La maternidad y el encuentro con la propia sombra, RBA libros, Barcelona, 2006. <<
[137] Erik tiene 12 años, no es de la edad que nos ocupa, pero el ejemplo vale la pena. <<
[138] La expresión príncipe destronado no me gusta porque no es exacta. El niño que así responde es porque nunca fue príncipe. Cuanto más amor le hayan dado sus padres, menos celos tendrá. Un verdadero «príncipe» de la casa tiene tanto amor y tanta autoestima que difícilmente se sentirá destronado. <<
[139] Mariana Vas es logopeda y autora del libro Mi niño no habla bien. Guía para conocer y solucionar los problemas del lenguaje infantil, La Esfera de los Libros, Madrid, 2009. <<
[140] Según un estudio de H. Catts y A. Kamhi, Language and Reading Disabilities, Allyn & Bacon, Needham Hts., 1999, un 73 por ciento de los alumnos que en segundo curso mostraba dificultades en la lectura, también había presentado ya problemas de lenguaje en la etapa de educación infantil. <<
[141] Ejemplo extraído de M. Vas, op. cit., pp. 151-152. <<
[142] Ejemplo extraído de M. Vas, op. cit. <<
[143] D. Grandi y G. Donato, Terapia miofuncional. Diagnóstico y tratamiento, Lebón, Barcelona, 2008, p. 23. <<
[144] Ibidem, p. 24. <<
[145] Archives of General Psichiatry, 65 (5), mayo de 2008, pp. 578-584. <<
[146] Extraído de M. Vas, op. cit., pp. 155-156. <<
[147] P. Motos (coord.), Frases célebres de niños 2, p. 15. <<
[148] Ibidem, p. 9. <<
[149] P. Motos (coord.), Frases célebres de niños, p. 32. <<
[150] Ibidem, p. 23. <<
[151] J. M. Louis, Los niños precoces, Narcea, Madrid, 2004. <<
[152] Para los poco entendidos en matemáticas, como yo, es una curva que refleja la distribución normal de la población. <<
[153] J. M. Louis, op. cit., p. 50. <<