A principios del decenio de 1970 la Prieuré de Sion se había convertido en una modesta cause célebre entre ciertas personas de Francia. Se publicaron varios artículos en revistas y algún periódico se ocupó del asunto. El 13 de febrero de 1973 el Midi Libre publicó un artículo bastante largo sobre la orden de Sion, Sauniére y el misterio de Rennes-le-Château. El artículo vinculaba específicamente la orden con la posible supervivencia de la estirpe merovingia en el siglo XX. También sugería que entre los descendientes de los merovingios estaba un «pretendiente auténtico al trono de Francia», al que identificaba como el señor Alain Poher.[3]
Aunque no es un nombre especialmente conocido en Gran Bretaña o en los Estados Unidos, Alain Poher era (y sigue siendo) un nombre conocido en Francia. Durante la segunda guerra mundial ganó la Medalla de la Resistencia y la Croix de Guerre. Tras la dimisión de De Gaulle, fue presidente provisional de Francia desde el 28 de abril hasta el 19 de junio de 1969. Al morir Georges Pompidou, ocupó el mismo puesto del 2 de abril al 27 de mayo de 1974. En 1973, cuando apareció el artículo del Midi Libre, Poher era presidente del senado francés.
Que nosotros sepamos, Poher nunca ha comentado, en uno u otro sentido, sus supuestas conexiones con la Prieuré de Sion y la estirpe merovingia. No obstante, en las genealogías de los documentos Prieuré se menciona a Arnaud, conde de Poher, quien, en algún momento situado entre 894 y 896 emparentó matrimonialmente con la familia Plantard, supuestos descendientes directos de Dagoberto II. El nieto de Arnaud de Poher, Alain, se convirtió en duque de Bretaña en 937. Tanto si el señor Poher reconoce estar vinculado a la Prieuré de Sion como si no, parece claro que la orden le reconoce a él como, en el menor de los casos, descendiente de los merovingios.