[1] Otro retraso. Van Helsing dijo el 6 de octubre que saldrían «por la mañana».
[2] Esta referencia a la debilidad de Harker no consta en el Texto Abreviado.
[3] No queda claro contra qué lucha Mina: ¿se está desprendiendo del control de su mente por parte de Drácula? ¿Se está sumergiendo en su propia naturaleza vampírica? ¿Está luchando por escuchar a Drácula más claramente?
[4] Si bien es posible que Mina utilice la expresión en su sentido coloquial y vulgar, como hacen otras muchas esposas de abogados, deja caer esta jerga legal en la conversación. Significa: «Mezclar o juntar propiedades con el propósito de asegurar una división por partes iguales. Se utiliza especialmente en ciertos casos del reparto de la propiedad de un pariente sin testar» (Oxford English Dictionary). No consta en el Texto Abreviado.
[5] Cosa que, debe notarse, no hace.
[6] Mina, que ha transcrito lo que Seward anotó acerca de la muerte de Lucy, conoce, obviamente, la importancia que estas palabras tienen para Van Helsing y lord Godalming.
[7] Lo del cambio de la frase no consta en el Texto Abreviado. ¿Recuerda Mina que cuatro hombres habían «amado» a Lucy por haber intercambiado con ella fluidos corporales?
[8] El Book of Common Prayer, la liturgia de la Iglesia de Inglaterra, permaneció inalterable de 1662 a 1928, dentro de cuyo espacio de tiempo ocurren los sucesos de la novela. El servicio que Mina desea escuchar es el Oficio de Difuntos, que comienza por la lectura por parte del sacerdote de lo siguiente: «“Yo soy la resurrección y la vida”, dijo el Señor: “El que crea en mí, aunque esté muerto, vivirá, y el que viva y crea en mí, nunca morirá”. Yo sé que mi Redentor vive y que el último día estará sobre la tierra. Y aunque después los gusanos devoren este cuerpo, con mi carne veré a Dios, al que veré por mí mismo, y mis ojos le contemplarán, y no otros. No traemos nada a este mundo, y es cierto que no llevaremos nada de él. El Señor nos lo dio, el Señor nos lo quitó; bendito sea el Nombre del Señor».
[9] La transcripción de Mina debe de ser increíblemente precisa.
[10] La estación de Charing Cross está más cerca del verdadero centro de Londres que el resto de las terminales. Fue inaugurada en 1864, y bien pronto se convirtió en la terminal de los trenes-barco que iban y venían a Dover y Folkestone. El gran reloj del exterior del hotel llegó a ser el lugar de encuentro favorito de mujeres jóvenes (tanto amateurs como profesionales), e inspiró en 1903 la cuarteta de A. H. Binstead: «La terminal de Charing Cross / está encantada cuando llueve / por ninfas que refugio buscan / y míticos trenes esperan» (Pitcher in Paradise).
[11] Las Notas indican que los cazadores primero planearon marcharse el 5 de octubre.
[12] Harker resume la complejidad del viaje; el tren no iba directamente a Varna en tres días. Se precisaba al menos un día para llegar a París, y si era el mismo día que el tren salía para Giurgiu, eran necesarios otros cuatro más para llegar a esta ciudad. Otro día de vapor y de tren acabaría dejando al viajero en Varna.
El Orient Express.
El legendario Orient Express iba de París a Viena, y más tarde hasta Constantinopla. En 1876, Georges Nagelmackers emuló el éxito de George Pullman en los Estados Unidos y fundó en Europa La Compagnie Internationale des Wagons-Lits, con coches-cama de lujo y coches-comedor. La compañía proporcionaba dichos vagones especiales y el servicio de los mismos en trenes regulares, y cobraba un suplemento a los pasajeros con billete de primera clase. El «buque insignia» de Nagelmackers, el Express d’Orient (no fue vuelto a bautizar como Orient Express hasta 1861), comenzó su actividad regular dos veces por semana de París (Gare de l’Est) a Viena, para continuar a Budapest, Bucarest y Giurgiu. Aquí, un trasbordador cruzaba el Danubio hasta Russe, en Bulgaria, donde un segundo convoy estaba esperando para un viaje de siete horas a Varna. Esta fue, probablemente, la ruta de los cazadores.
—— Retorno a otras notas ——
Capítulo 24 - nota 35.
[13] Odessus fue una antigua ciudad tracia que floreció durante los siglos II y III; incorporada finalmente a Varna. Una señal de su prosperidad fue la acuñación de monedas tracias con la mención de Odessus u Odessos.
[14] En el Texto Abreviado no se dice nada de las crecientes dificultades para hipnotizar a Mina.
[15] ¿Por qué habría Drácula de preocuparse de evitar las sospechas en Varna más que en Whitby? Ciertamente, no dejó de salir de su caja a bordo del Demeter, y nos preguntamos por qué la tripulación del Czarina Catherine sobrevivió al viaje.
[16] Ese «hicimos» es una forma de hablar; Harker, desde luego, no participó en lo de atravesar a Lucy con la estaca.
[17] Este sombrío propósito y las cínicas observaciones sobre el soborno no constan en el Texto Abreviado.
[18] Harker no parece pensar nada del monedero de Drácula, que sabemos estaba bien repleto, ni de la presencia de su agente, ya dispuesta con anterioridad.
[19] Los detalles que siguen sobre las maquinaciones de los cazadores no constan en el Texto Abreviado.
[20] El Manuscrito dice: «al propietario del barco, Mr. Hopgood», única indicación de su identidad. Roger Johnson, en correspondencia personal con quien esto escribe, señala que «la firma londinense de Hapgood» está de alguna manera relacionada con el barco (véase capítulo 26 del presente libro, nota 7).
[21] Esta es la primera indicación de que Van Helsing cree que la destrucción de Drácula será diferente de la de Lucy. Nótese que se anuncia que el «polvo» aparecerá «poco después» de la decapitación y de la estaca.
[22] Esta ilógica observación —viniendo nada menos que de un abogado— y la obvia declaración de su propósito asesino no aparecen en el Texto Abreviado.
[23] En el Manuscrito, «Victor» es sustituido por «Rufus». Ambos son claramente pseudónimos.
[24] En el original inglés las siglas son H.B.M., que el anotador señala como las iniciales de «Her Britannic Majesty». [N. del T.]
[25] Probablemente el 24 de octubre, no el 25, para que tengan sentido el posterior comentario de Seward sobre la distancia de los Dardanelos y el plan de acción que han pensado. El primer párrafo no consta en el Texto Abreviado.
[26] Este es un examen dental muy sutil, pues el 5 de octubre Seward anotaba que los dientes de Mina eran «más afilados» (véase capítulo 24 del presente libro, nota 31).
[27] ¡Qué comentario tan frío! El griego euthanasia, de eu («bueno») y thanatos («muerte»), significa «muerte sin dolor», la metodología para causar intencionadamente una tranquila y fácil muerte. La de Mina sería la que se caracteriza como eutanasia voluntaria, pues es una muerte solicitada. Sin embargo, la eutanasia de seres humanos continúa siendo ilegal y muy controvertida casi en todas partes.
El problema ético y moral que la eutanasia presenta no es nuevo en modo alguno. En 1881, el periodista Richard Rowe escribía así sobre las gentes sin hogar de Londres en su Life in the London Street: «Pero tales vidas, vidas que existen, ¿han de ser protegidas? No puedo creerlo. Matamos caballos viejos cuando han llegado a ser un estorbo para sí mismos. Si no podemos ayudar a nuestros parias, matarlos sería, creo, hacerles un favor; entregarles, en este sentido, a las tiernas bondades de Aquel que todo lo ve, tan indulgente y en quien confiamos. Mas el primer paria seleccionado para esta eutanasia probablemente pondría objeciones, de otro modo él tendría ya su propia “carta de pago” para el otro mundo, mientras que el benevolente asesino estaría colgado entre dos tenebrosos muros de una cárcel, con una bandera negra ondeando sobre él».
[29] Las Notas incluyen un apunte tachado en el que se dice que el telegrama llegó el 27 de octubre, seguido de una entrada con fecha del 28 de octubre confirmando la llegada del telegrama de dicha fecha.
[30] El más importante puerto moldavo de entrada, junto a los ríos Danubio, Sereth y Prut y por donde se exporta la mayor parte de la madera rumana, Galati, está situado a unos 241 kilómetros al norte de Varna y a 209 al nordeste de Bucarest.
[31] El resto de este párrafo —hasta la frase «¿Cuándo sale el próximo tren…?»— no consta en el Texto Abreviado, y después parecen haberse perdido algunas palabras. El resultado de esta enmienda es hacer que los cazadores parezcan más confiados y más capaces de llevar a cabo sus planes.
[32] ¿Es este el mismo John Seward que citó a Disraeli diciendo aquello de «lo inesperado siempre sucede»? (véase capítulo 9 del presente libro, nota 25).
[33] El trascendentalismo fue un movimiento de escritores y filósofos norteamericanos del siglo XIX que, en general, creían en la unidad esencial de toda la creación, en la bondad innata del hombre y en la supremacía de la intuición sobre la lógica y la experiencia para el descubrimiento de las verdades más profundas. Sin embargo, es muy posible que no sea esto lo que Seward quiere decir, sino que probablemente se refiere a la filosofía de Immanuel Kant (1724-1804), quien pensaba en el «idealismo trascendental», en este caso diferenciado del «empírico». Precepto mayor del idealismo trascendental es que el conocimiento se basa en la «existencia subjetiva» más bien que en la experiencia; por tanto, el yo o ego utiliza percepciones sensibles para almacenar conocimiento.
[34] Mina, por fin, comprende lo sabio que es buscar a Drácula en su castillo y no durante su viaje. Sin embargo, con sus lealtades divididas, el plan de Mina ha de despertar sospechas, y no es así.
—— Retorno a otras notas ——
Capítulo 26 - nota 18.
[35] Lord Godalming se refiere a alquilar un tren más pequeño para llevarlos sólo a ellos a su destino. En Inglaterra esto podía generalmente hacerse por 5 chelines la milla [1,6 kilómetros]. Ese precio incluía un vagón de primera clase y una máquina ligera, así como el privilegio de una vía sin tráfico lento.
[36] ¡Van Helsing habla como Drácula!
[37] Van Helsing no admite esta posibilidad de engaño en el Texto Abreviado.
[38] Resulta interesante que la última frase —sobre «la salida y la puesta del sol»— no figure en el Texto Abreviado. A la luz del crítico suceso que ocurre en el ocaso, al final de la novela, esta omisión es significativa.
[39] El Texto Abreviado no incluye esta observación de tipo paternalista.
[40] Lo del «ataque de nervios» no consta en el Texto Abreviado.
[41] ¿Puede decir Van Helsing realmente que fue amigo de Hans Christian Andersen (1805-1875), el gran escritor y narrador de cuentos de hadas? Andersen fue el escritor danés más ampliamente viajero de su época; hizo 29 viajes al extranjero y estuvo más de nueve años fuera de Dinamarca. Van Helsing, coleccionista de cuentos de hadas de un tipo distinto, y Andersen compartían el interés por las historias folclóricas, y es ciertamente posible que se conocieran. Sin embargo, el Texto Abreviado omite por completo la metáfora del «patito feo» y la mención de Andersen.
[43] El elogio que Van Helsing hace de la perspicacia de Mina en comparación con la falta de lo mismo en Drácula, en el propio Van Helsing y en Seward, no consta en el Texto Abreviado; ni tampoco las consideraciones que poco más adelante se hacen acerca de la filosofía del crimen y sobre «el punto de apoyo» de Arquímedes.
[44] Latín: «de lo particular a lo universal». Nótese que, de hecho, Mina ha estudiado, evidentemente, la filosofía del crimen, pues está familiarizada con Lombroso y Nordau (véase nota 46).
[45] Lo que realmente dijo en su Geometra fue «Dos moi pou sto kai tan gan kinaso», que Van Helsing traduce negligentemente.
[46] Cesare Lombroso (1835-1909), criminólogo y médico italiano que sostenía que los individuos que se entregaban a actos criminales lo hacían no porque así lo decidían, sino porque eran gentes «atávicas» que no habían evolucionado más allá de la naturaleza incivilizada de nuestros antecesores primitivos. La Encyclopaedia Britannica de 1888 (9ª edición) se refiere a tales individuos como hombres «que viven en medio de nuestra civilización como simples salvajes…; el actual sistema legal difícilmente puede llevar a distinguirles de los criminales. Los moralistas atribuyen al atavismo un gran número de delitos que los hombres de leyes achacan a inclinaciones culpables». Pero el editor de la Britannica parece escéptico ante este punto de vista: «No se debe, sin embargo, al atavismo, sino a la simple continuación de un viejo orden de cosas, pues tantas gentes de nuestras clases sociales pobremente educadas, pastores, trabajadores agrícolas e incluso obreros industriales, están tan poco desarrolladas y viven una vida tan escasamente intelectual como los salvajes. Latente en nuestras pequeñas aldeas y grandes ciudades, hay más salvajismo del que muchos reformadores conocen, y no se precisa sino una pequeña experiencia para descubrir algo de la vieja barbarie acechando todavía en mentes y en corazones bajo un delgado velo de civilización».
Cesare Lombroso.
En su obra L’uomo delinquente (1876; parcialmente traducido al inglés en 1911 con el título de Criminal Man), Lombroso señalaba ciertas anormalidades de los «criminales natos», tales como el tamaño del cráneo y la asimetría del rostro y de otras partes del cuerpo. Sus puntos de vista han quedado desacreditados con el tiempo, pero el papel de Lombroso al aplicar la ciencia al estudio de la conducta criminal es considerado como algo fundamental. Wolf (The Essential Dracula) señala muchas semejanzas entre la descripción de Drácula y el criminal arquetípico de Lombroso.
Max Nordau (1849-1923), médico húngaro, autor y crítico, adaptó los puntos de vista de Lombroso sobre la degeneración hereditaria en su libro Degeneration (1892). Nordau concluye que varios artistas del siglo XIX fueron víctimas de sus cerebros decadentes, y califico su arte como «degenerado». Caracterizó a Baudelaire mostrando «todos los estigmas mentales de la degeneración durante toda su vida», y calificó a Rossetti y a Verlaine de «imbéciles», a Swinburne de «criminal», y a Wagner de «grafómano enloquecido». Aunque Nordau fuera, irónicamente, un temprano líder sionista, su pensamiento fue fácilmente adoptado por el régimen nazi, que en 1937 comenzó a expurgar los museos alemanes de «arte degenerado». Con el total desprestigio de las teorías de Lombroso, la crítica de arte pseudocientífica de Nordau sufrió idéntico destino.
Max Nordau.
[47] Véase capítulo 3 de la presente obra, texto que acompaña a la nota 30, para los comentarios del propio Drácula acerca de este tema.
[48] He aquí un talento en verdad sorprendente: ¡tomar el pulso a Mina en unos segundos besándole la mano al mismo tiempo! En suma, es otra muestra de la charlatanería médica de Van Helsing.
[49] Los comentarios de Van Helsing y de Mina no son sino una ingenua visión de las tácticas de Drácula. Primero, su ancestro (o Drácula, si le identificamos con su antepasado) no actuó de manera egoísta o para salvar su propia piel; al contrario, tomó la apropiada decisión táctica al comprender que su ataque inicial había sido imprudente y al encontrarse rodeado de enemigos superiores en número, regresando a su punto de partida para reclutar más combatientes y luego volver al campo de batalla. Si acaso, la historia de Drácula (o de su antepasado) debería atemorizar a los cazadores en vez de animarles, pues la crueldad de Drácula constituye su gran ventaja sobre enemigos menores que no tienen su longevidad. Segundo, describir los actos de Drácula como producto de un cerebro infantil comparados con las sabias acciones de los cazadores (los cuales no tuvieron en cuenta en absoluto que su presa podía no llegar allí donde ellos la esperaban), es el colmo de la necedad. Tercero, describir el evidente retorno de Drácula a Transilvania, esto es, de alguien que ha salido del continente europeo exactamente una vez en quinientos años como producto del «hábito», parece más necedad aun. Podría esperarse este tipo de pomposo razonamiento de alguien como Van Helsing, pero las mismas cosas repetidas por Mina como si fuera un lorito pueden muy bien ser vistas como producto del control que sobre ella ejerce Drácula. Esto es: Drácula puede sacar provecho de sus enemigos sólo viendo si el comportamiento de estos es predecible e irracional, e instilando en ellos una falsa sensación de confianza.
[50] Hay muchas frases semejantes en los salmos, aunque ninguna coincide por completo con las palabras de Van Helsing, que es siempre algo confuso por lo que a las Escrituras se refiere.
[51] Van Helsing continúa desfigurando sus metáforas religiosas. Mina no fue «bautizada»; según ella, se vio obligada a beber de la sangre de Drácula, un paralelismo con la comunión.
[52] ¡Vaya ego! ¿Cómo es posible que Van Helsing pueda saber algo acerca de la conexión mental entre Mina y Drácula? Si Van Helsing no se equivoca en lo de las intrusiones de Mina en la mente de Drácula, produciendo así las impresiones sensoriales ya anotadas, y si esas intrusiones pasan desapercibidas para Drácula, ¿cómo es posible entonces que él crea que Drácula no puede hacer lo mismo, obtener las impresiones sensoriales de Mina pasando desapercibido? De hecho, ¿no es más probable que Drácula —con quinientos años de práctica— pueda explorar la mente de Mina a voluntad y sin dejar huella alguna?